LE PIDO A LA LUNA
Luna que eres faro en mis heridas,
silueta, resplandor en noche fría,
elévame hacia ti, sé mi guarida,
la luz que me proteja de agonías.
Dime luna si me quieres consolar,
refúgiame en tu abrazo cual reparo,
de las sombras que no dejan de acosar,
déjame ser una estrella en tu claro.
Allí arriba donde las aves sueñan,
entre danzas su libertad en vuelo;
más cerca de ti ellas se adueñan,
de las nubes, los astros y del cielo.
Orlada de brillantes resplandores,
llegaría junto a ti en un regalo,
en racimos de magníficos colores;
mi ilusión es tocarte con un beso.