Aún hay margaritas para deshojar, hay praderas para caminar. Y mares de esmeraldas voces del viento, sentimiento y grandezas que bullen en el alma. Paisajes de extrema belleza que pintar. Un suspiro alicaído trata de hacerme desistir. Yo arrastro mis versos sin prisa, sin pausa, peino mis poesías releyendo en mi corazón, la fuerza del amor.
Feliz semana
Besos y abrazos para todos
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