Nada es imposible. ¡Querer es poder!
No existen peores frase como las del tipo “Deja eso así” o “Tú no lo puedes hacer…”, esas afirmaciones calan en lo más profundo de la identidad de cada uno, deparando en sueños frustrados, convirtiéndose poco a poco en una voz oscura y atemorizante (similar a la de Darth Vader) que nos dice contínuamente que no podemos hacer o conseguir eso que aspiramos.
El hombre del traje gris
Por estas situaciones nos encontramos con cientos de personas en la calle, infelices, trabajando en lo que no quieren porque les dijeron que alcanzar los sueños o hacer lo que se querían no era posible, no era lo indicado, que es mejor hacer lo que dicta la sociedad o tus padres. Un ejemplo típico: el prestigio social de un doctor que casi siempre será mayor al de un saxofonista, pongamos por caso.
Personas que transformaron sus sueños en realidad
Pero nunca es tarde, siempre existe tiempo para frenar y regresar un poco a lo que de verdad queríamos aprender, hacer o ser, no hay más límites que los que nos pongamos a nosotros mismos, sino me creen pueden preguntarle a Jacob Barnett, un niño que nació con Síndrome de Asperger y a cuyos padres les afirmaron que era imposible que su hijo aprendiera a hablar, o a hacer cosas tan sencillas como amarrarse los cordones de los zapatos, y Jacob no sólo lo hizo, sino que a sus cortos 14 años ostenta el título del astrofísico más joven del mundo, y está por conseguir su doctorado en física cuántica, entre otros logros.
O
Pablo Pineda, quién rompió todos los paradigmas al convertirse en la primera persona con síndrome de Down en conseguir un título universitario en Europa y protagonizar una película, a este caso se le suma el caso de Iker, un niño con síndrome de Down que habla inglés, español y francés de forma fluida.
Y la lista puede extenderse por varias páginas y libros, la conclusión es la misma: el que quiere puede; es necesario repetirse la idea de que
cada uno es el verdadero dueño absoluto de su destino, los límites se los coloca cada uno, porque la verdad es que uno decide a quién escuchar y a quién obedecer, a quién le damos poder sobre nuestra vida. Y por eso los sueños y aspiraciones nunca se deben abandonar.
Para no olvidar hacia dónde vamos
Pero ¿cómo recordar lo que queremos ser? Una técnica es la de llevar un diario personal, en el que se deben anotar cada día las metas que se desean alcanzar, y que se debe hacer para conseguirlas, sin olvidar cuáles serán los posibles obstáculos, y releerlo frecuentemente prestando atención a lo que se registró; la otra, y un poco más popular, es la de crear un mapa mental, con recortes de revistas, para visualizar exactamente lo que se quiere conseguir, y debe colocarse en un lugar visible, para recordar a diario nuestras metas y aspiraciones personales.
“Sueña como si fueras a vivir eternamente, vive como si fueras a morir mañana”, esta frase del actor estadounidense James Dean resume, en gran manera
lo importante que es soñar y luchar por tus sueños, sin dejarte castrar por los demás, tu vida es tuya y está en tus manos, ¡Vívela!lamenteesmaravillosa.com