Muchas veces quisimos terminar esta historia, de un amor que estuvo lleno de injuria, dime quien arranco los sueños de tu memoria que han hecho de ti una mujer sin sentimiento.
Has escondido bajo tus grandes ojos, toda la ira de los años transcurridos, tu nobleza lo perdiste con el tiempo culpable no soy yo de tu sufrimiento.
Muchas noches tus ojos me miraron, y encontré en ellos una honda pena, quise arrancar el dolor que había en ellos pero más pudo tu soberbia y seguir sufriendo.
Eres mala mujer sin corazón, sin sentimiento, tu alma no hallara paz, ni mucho menos sosiego, aunque olvidarme quisieras.. no podrás,, porque siempre estaré en tu pensamiento.
Y seguirás día a día con ese sufrimiento, yo a lo lejos llorándote cada vez menos recordando con pena el tiempo vivido, preguntando por ti aunque no creas.
Y hasta que un día te acabaras para siempre y al morir te lleves todo mi cariño, lloraré tu partida como buen hombre aunque tenga que sufrir como un niño.
Adiós mala mujer, ve con tu mejor suerte, yo te amé sin medida, sin reproche, te amare de día y te recordare de noche y te amare siempre hasta que llegue mi muerte.