Vigila a tu vecino, y si detectas un acto ejemplar o inspirador… denúncialo

Crónicas de Héroes es una iniciativa cívica para recolectar y mapear anti-denuncias: acciones cívicas, inspiradoras y que proponen una realidad distinta a la del miedo y la violencia.

Generalmente la violencia, la tragedia y el morbo venden mucho más que las buenas noticias. Quizá por eso es que los grandes medios suelen privilegiar la cobertura de este tipo de eventos. El problema es que al enfatizar ese aspecto del escenario, que evidentemente no es el único, se construye una percepción colectiva que termina por modelar “la realidad”, y entonces se nutren sentimientos de miedo, estrés, frustración, encabronamient, y otras frecuencias poco benéficas. Asociado a lo anterior, en particular al miedo, cuando este sentimiento es masificado, entonces el entorno se vuelve fértil para alojar una dinámica de, digamos, paranoia, y para promover, o al menos justificar, la vigilancia –tanto de las autoridades, como entre los propios ciudadanos.

Pero qué sucedería si en lugar de que nuestra atención se concentre en los crímenes y la violencia cotidiana, se enfocara en la otra cara de la moneda –es decir, los cientos de gestos ejemplares y acciones cívicas que también ocurren a nuestro alrededor. Cómo afectaría nuestra realidad el hecho de que en lugar de temernos y vigilarnos mutuamente, estuviésemos atentos a registrar un acto empático o una conducta inspiradora.

Crónicas de Héroes (CdeH) es un experimento cívico que orienta la atención colectiva hacia las cosas positivas que ocurren en el entorno. El proyecto funciona de manera descentralizada, exclusivamente mediante voluntarios, y actualmente hay cinco ‘células’ en marcha, tres en México (Ciudad Juárez, Monterrey, Veracruz), una compartida entre México y Estados Unidos (San Diego-Tijuana), y otra en Kazajastán. La dinámica es bastante sencilla: si presencias un gesto o acción de este tipo, lo compartes en cronicasdeheroes.org, y tu crónica quedará registrada en un mapa. Además de este sitio general, las ciudades activas cuentan con sus propios sitios y mapas, donde también puedes compartir tu historia. 

En una fila del supermercado me encontré con un niño que estaba comprando mandado y una veladora, que fue lo que más me llamo la atención, bueno, aparte de que contaba unas monedas con desesperación por la incertidumbre de que se fuera a completar todo lo que llevaba, le pregunté que para quién era la veladora y me respondió que para el descanso en paz de su abuela, esto me dio mucha ternura y le pagué todo su mandado, él no lo podía creer y sólo me sonrió agradecido.

Si bien no se trata de ocultar que con frecuencia se cometen crímenes y acciones deplorables dentro de una sociedad, lo cierto es que por cada uno de esos acontecimientos, seguramente podríamos enlistar muchos de los otros –pero de estos últimos pocas personas, y aún menos medios, hablan. Más allá de ser una propuesta ‘hermosa’ o bien intencionada, lo que propone esta iniciativa, algo así como regenerar o equilibrar la narrativa sociocultural de una población genera beneficios puntuales. Por ejemplo ayuda a resanar el ánimo colectivo, a recuperar la confianza ciudadana, estimula el civismo y la participación, entre otras.

En lo personal me parece que CdeH también responde a una tendencia de revaluar lo ‘micro’, en lugar de seguir a la espera de una revolución explosiva que transforme las condiciones actuales para lograr un entorno más justo, digno y armónico, lo más efectivo es concentrarnos en pequeñas acciones, muchas de ellas individuales, que terminen por forzar el rediseño de la situación. En este sentido, entre más microhéroes existan en una sociedad, será mucho más factible la evolución tangible de ese grupo.

Los invito a consultar los sitios de Crónicas de Héroes, a compartir sus historias y, por qué no, a organizarse para replicar la iniciativa en sus ciudades.  

Más info: sitio oficial / contacto:  info@cronicasdeheroes.mx