Ocho rasgos de creatividad
La creatividad es un proceso complejo que aún sigue sorprendiendo a los investigadores. El asunto no se reduce al uso de un hemisferio u otro del cerebro. Ni siquiera se puede definir como el resultado de un proceso cognitivo como tal, sino que también involucra fuertes componentes emocionales.
Desde el punto de vista psicológico, también es difícil definir qué es una personalidad creativa y qué no lo es. Lo que sí es cierto es que quienes son más creativos suelen tener más dificultades para funcionar como la sociedad lo exige. Su mente es más caótica y activa y por eso mismo se vuelve impredecible.
Pese a todo, hay algunos rasgos que parecen comunes entre quienes son creativos. Sobresalen los que te señalamos a continuación.
Sueñan despiertos
Es un rasgo que le trae muchos problemas a quienes lo tienen.
Fantasear no es un atributo bien valorizado en la cultura occidental, que pone gran énfasis en “tener los pies bien puestos sobre la tierra”. Por eso muchos catalogan estas mentes como “ociosas”. Es, sin embargo, un rasgo inconfundible de creatividad.
Son observadores y curiosos
Los creativos tienden a buscar detalles en todo. En cualquier momento y en cualquier lugar, hay algo que captura su atención y generalmente no es lo obvio. Entonces se enfocan en ello y luego indagan todo cuanto sea posible sobre lo que atrapó su interés.
Buscan experiencias nuevas
La gente creativa busca situaciones que le permitan romper con su rutina diaria. No se trata necesariamente de quienes echan todo al fuego y se van a recorrer caminos desconocidos.
Es más bien una actitud en la que la variedad es vista con beneplácito y entusiasmo.
Les atraen los desafíos
Si alguien es creativo se sentirá muy motivado al encontrar algún desafío. No necesariamente un crucigrama o algún juego intelectual. Simplemente
el misterio les atrae y quieren desentrañarlo a toda cosa, entenderlo. Descubrimiento y hallazgo son dos palabras esenciales en su diccionario.
No tienen buena perspectiva del tiempo
El creativo típico no mide el tiempo en horas, ni en minutos.
Una vez ha enfocado su atención en algo puede pasar días, semanas o incluso años enteros embelesado en ello. Rara vez se adapta a un trabajo de ocho horas. Más bien oscila entre la haraganería y la obsesión.
Son sensibles a la estética
Casi todas las personas creativas tienen algún interés por el arte. Bien sea como productores o como espectadores. La música, el teatro, el cine, la pintura y todas las artes ejercen una fuerte atracción sobre ellos.
Es un lenguaje no obvio que alimenta su intuición.
Tienden a ser solitarios
La soledad ocupa un lugar importante en la vida de las personas creativas.
Necesitan del retiro porque su mente suele estar trabajando todo el tiempo. Piensan, deducen, se preguntan… Es una actividad constante en la que los demás no tienen cabida.
No se desmotivan ante el error
Quienes son creativos ven en el error una realidad casi maravillosa. Al fin y al cabo, el error es un descubrimiento. Pensaban que estaban en lo correcto y de pronto fueron sorprendidos por una equivocación. Esto,
en lugar de desmotivarlos, se convierte para ellos en una revelación que los incita a seguir adelante.