Las Kalanchoe son unas plantas medicinales originarias de la Isla de Madagascar que fueron introducidas en América por los nativos esclavizados, quienes ya conocían su valor terapéutico. Su milenario uso y recientes estudios científicos indican que tienen cualidades para su uso externo (son antiinflamatorias, antihemorrágicas, astringentes y cicatrizantes), y también son efectivas en la remisión del cáncer, el reumatismo, la hipertensión, los cólicos renales, las diarreas e, incluso, en desórdenes psicológicos como la esquizofrenia o las crisis de pánico.
Desde hace unos años, el agricultor Josep Pàmies ofrece tres variedades de Kalanchoe a través de la asociación La Dulce Revolución: Kalanchoe pinnata (bruja, yerba de bruja, prodigiosa, hoja del aire, siempreviva, ojaransín, hojerilla), Kalanchoe daigremontiana (aranto, madre de miles o kalanchoe mexicana) y Kalanchoe gastonis-bonnieri (ojaransín, hojerilla y oreja de burro). En este nuevo reportaje de Miquel Figueroa, conoceremos las propiedades de estas plantas que, después de varios años de experimentación - y por extraño que pueda parecer - han demostrado su poder para hacer remitir el cáncer.