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SUN GAZING
El SunGazing (ó mirar al sol) es una técnica tan sencilla que puede explicarse en muy pocas líneas: usted mira el Sol en un horario seguro, el primer día diez segundos solamente, y luego va sumándole cada día diez segundos adicionales. No es una práctica que tenga que realizarse durante toda la vida .Sólo se realiza como máximo durante un período de 270 días de forma regular o irregular. Decimos esto porque habrá días en que estará nublado, o en que por cualquier razón no podremos hacer la práctica. Esto no debe preocuparle. Algunos días fallará usted, otros fallará el Sol. Si está algún día sin hacerlo, se retoma al día siguiente desde el punto donde lo dejó. No pasa nada. Si usted hace SunGazing durante 270 días – lo que toma 111 horas en total –ya habrá completado la práctica: su cuerpo se habrá convertido en un chip solar y entonces ya no es necesario seguir con la práctica. Más adelante si desea seguir haciendo SunGazing por gusto, lo puede hacer aunque ya no será necesario. Mirar al sol durante la franja de tiempo segura es sencillo y los resultados son fantásticos. No es peligroso. Los primeros rayos de sol de la mañana y los últimos rayos de sol de la tarde son más beneficiosos que la TV y que los ordenadores. La franja ‘segura’ es beneficiosa para la salud en general e incluso para los ojos. Se obtiene salud perfecta para mente, cuerpo y espíritu. Se experimenta un incremento de la memoria y de la inteligencia. El proceso de envejecimiento se hace más lento, uno se halla en el camino hacia la iluminación. Es como si se estuviera viviendo ‘el cielo en la tierra’. Uno se libera de toda enfermedad en esta vida. Se distinguen claramente tres fases, de tres meses cada una, dado que una persona quizás no tenga el objetivo de alcanzar una realización espiritual, con lo que el proceso se acorta. Al final de los tres primeros meses, que corresponden a 15 minutos mirando al Sol, la persona consigue una salud mental perfecta. Ello es previo a cualquier sanación del cuerpo y a cualquier camino espiritual. Tras esos tres meses la persona se desprende de sus inseguridades, miedos, depresiones, celos, envidias, etc. Al conseguir esto, la mente deja de bombardear al cuerpo con negatividad, y ello hace posible que en los tres meses siguientes el cuerpo consiga la salud física. Practicando SunGazing desde el tercer mes hasta el sexto, siguiendo como siempre con la progresión de diez segundos diarios, al final del sexto mes usted estará mirando al Sol treinta minutos y sus problemas físicos habrán desaparecido. Antes se creía que las neuronas no se podían regenerar, pero el resultado de cientos de análisis aplicados a personas que miran al Sol ha obligado a cambiar estas conclusiones. Efectivamente, con el SunGazing las neuronas se multiplican, se fortalecen, se regeneran. Nuevamente, pasados 6 meses, puede, si lo desea, dar por acabado su proceso. A los seis meses de práctica, que coincide con que se está mirando al Sol 30 minutos, todas las células del cuerpo empiezan a almacenar energía del Sol. Se convierten en células fotovoltaicas; son como un panel solar. Más allá de los seis meses, la energía del sol es muy bien recibida por las células, que están capacitadas para almacenarla, sus células estarán capacitadas para absorber directamente la energía del sol. Su cuerpo se habrá vuelto un panel solar. Tras los nueve meses usted sólo necesitará seguir un mantenimiento.
Algo sobre Hira Ratan Manek:
Hira Ratan Manek (HRM) nació el 12 de septiembre de 1937 en Bodhavad, India, y creció en Calicut (Kerala, India), donde realizó estudios de ingeniero mecánico en la Universidad de Kerala. Después de su graduación, se encargó de los negocios familiares, de navegación y comercio. Continuó trabajando allí hasta que se retiró en 1992. Fue en 1962, cuando contaba entonces con 25 años de edad que conoció a Madre, la compañera de Sri Aurobindo, quien le enseñó la práctica de mirar al sol. Desde ese momento, y paralelamente a los negocios familiares, investiga varias culturas y descubre que el auténtico Surya NamasKar (el saludo al sol) del que se habla en yoga consiste en realidad en mirar al sol. A partir de allí, investiga prácticas egipcias relacionadas con el dios Ra y estudia tradiciones de México y Perú y sistematiza la técnica de SunGazing. Desde el 18 de junio de 1995, HRM vive solo de la energía solar y el agua. Ocasionalmente, por hospitalidad y propósitos sociales, bebe té y otras infusiones. Respecto a su característica de no comer, HRM se ha entregado a observación y experimentos científicos por extensos períodos. Entre 1995 y 1996 doctores del colegio médico de Kerala observaron durante 211 días y constataron que durante éstos, HRM sólo bebió agua. Esto apareció publicado en medios de comunicación. En 2000-2001, un equipo internacional integrado por 21 médicos lo observó día y noche en Ahmadabad (India), durante 411 días, en que igualmente sólo ingirió agua. Esto fue publicado en periódicos médicos indios en el año 2001. En Estados Unidos, universidades subvencionadas por la NASA lo observaron durante 130 días, durante los cuales, una vez más sólo lo vieron ingerir agua. Desde el año 2002 HRM comenzó a difundir los conocimientos que había logrado. En ese año, dio 136 conferencias en USA. Ha sido invitado por agencias de gobierno de muchos países, que quieren entender el proceso que él propone. En 2003 HRM dio unas 147 ponencias en USA, Canadá, el Caribe y Reino Unido y cerca de 400 periódicos de todo el mundo publicaron un artículo suyo. Adicionalmente, muchos canales de televisión tienen documentales de su historia. HRM intervino en la BBC, Servicios del Mundo. Ahora hay centros de curación solar alrededor de todo el mundo, cuyos facilitadores son grupos de practicantes del fenómeno que Hira Ratan Manek desencadenó.
Fuente: http://www.hrmargentina.com.ar
La Naturaleza nos ha dado un cuerpo que contiene un superordenador que es nuestro cerebro. HRM le llama “cerebrator”. El cerebro es más poderoso que el más avanzado de los ordenadores. El ser humano ha sido dotado de innumerables talentos y unos poderes infinitos, inherentes por naturaleza. El individuo nunca debe subestimarse a sí mismo, pues cada cual es un regalo de la naturaleza. Si hacemos uso de esos poderes podremos alcanzar altos niveles. Desafortunadamente estos infinitos e inherentes poderes están programados en aquella zona del cerebro que se encuentra latente y en desuso. Incluso la Ciencia médica está convencida de que apenas utilizamos el cerebro, tan solo en un 5-7%. Se sabe que el más brillante de los humanos, Albert Einstein alcanzó un 32%. Si pudiésemos activar el cerebro y despertar esos infinitos poderes, podríamos conseguir cualquier cosa que nos propusiéramos. Con el fin de que el cerebro funcione eficazmente, es necesario que lo activemos. Ya que es una entidad holística, requiere así mismo de una fuente de abastecimiento de energía holística. La energía solar es la fuente que pone en funcionamiento al cerebro, la cual puede entrar en el cuerpo humano o el cerebro, sólo a través de un órgano que es el ojo humano. Se les conoce como las ventanas del alma, recientes investigaciones han revelado que los ojos tienen muchas funciones aparte de la visión. Todavía seguiremos conociendo nuevos resultados. Los ojos son órganos complejos que tienen cinco billones de partes más que una nave espacial, que tiene sobre 6-7 millones de partes. Podemos ver, por tanto la inmensa capacidad del ojo humano. HRM afirma que el arco iris está en nuestros ojos, no en el cielo. Los siete colores del sol son sólo el reflejo de lo que está en el ojo. Nosotros podemos crear un arco iris cuando queramos, nos vamos al jardín y simplemente observamos por debajo de una fuente el fluir del agua cuando el sol se mueve por encima, así veremos el arco iris. El ojo recibe el espectro completo de la luz solar. Es como tener una ventana de vidrio. El ojo es el instrumento perfecto para recibir todos los colores del arco iris. Ya que los ojos son una parte delicada del cuerpo, debemos utilizarlos de manera que no los dañemos. Las recomendaciones de hoy en día, de no mirar en absoluto al sol (ya que podría dañar la vista) y de no exponerte al sol pues podrías tener cáncer, sin ninguna necesidad están generando histeria y paranoia. Cuanto más te alejas de la Naturaleza, más motivo existirá para la enfermedad y por lo tanto más tendrás que sufrir a las instituciones sanitarias. Hay métodos definitivos e infalibles de beneficiarnos de la Naturaleza, sin exponernos a efectos adversos. Cuando vemos al sol, nos sentimos llenos de energía. Es tan intuitivo como cuando se reúnen las nubes y nos volvemos melancólicos. HISTORIA El Sol es el planeta más grande de nuestro sistema, su circunferencia es 109 veces más grande que la de la Tierra y puede contener muchas Tierras en él. La distancia desde la Tierra es de 150 millones de kilómetros y su peso 333.000 veces el peso de la Tierra. El peso del Sol representa el 99,8% del peso de nuestro sistema planetario. El Sol está lanzando continuamente bolas de fuego hacia la Tierra con saltos de 200.000 Km, éstas tienen una dimensión de 50.000 Km de largo por 9.000 Km de ancho. Debido a todos estos magníficos poderes del Sol no nos sorprende que haya inspirado a la humanidad a lo largo de toda su historia. Fue adorado desde los primeros tiempos por muchas sociedades en diferentes partes del mundo. Cada civilización tenía su propia historia. En el antiguo Egipto, al Sol se le adoraba como Ra. Se decía que la humanidad y los animales llegaron a través de sus lágrimas. Al rey mismo se le creía como al hijo de Ra. También se creyó que en su muerte, el rey se reuniría con su padre el Sol. Las pirámides fueron consideradas como rampas o medios de acceso al cielo. Además, se creía que Ra viajaba en un barco a través del cielo y a través del submundo durante toda la noche y allí con el fin de elevarse de nuevo a la mañana siguiente, tenía que vencer al demonio Apepi. Se le representó como elevándose del océano del caos para saludar al mundo de nuevo. En la vieja Grecia y Roma, Apolo vino a asociarse con el Sol. En Mesopotamia lo hizo Shamash. Las tribus indias de América tiene muchos cuentos relacionados con el Sol. Una de esas historias dice así: “Hace mucho tiempo, vivía allí un jefe egoísta que tenía al Sol, la Luna y las estrellas para sí mismo. El mundo no tenía nada de luz. En ese tiempo vivía un cuervo, que quiso conseguir la luz y darla al mundo. El cuervo se transformó en hoja, que fue tragada por la hija del jefe, la cual quedó embarazada, teniendo pronto un bebé, que resultó ser el cuervo. El bebé vio muchos sacos colgados en la casa del jefe y comenzó a llorar. El jefe resultó ser un abuelo indulgente y dio al niño el primer bardo. Esta bolsa estaba llena de estrellas y el cuervo las lanzó a través de la chimenea y éstas rápidamente se colocaron en el cielo. El niño lloró de nuevo y esta vez el abuelo le dio otro saco, el cual contenía la Luna. De nuevo el bebé la lanzó al cielo. Más tarde el niño empezó a llorar de nuevo, esta vez el abuelo le dio el Sol y el niño rápidamente se transformó en el cuervo y voló a través de la ventana. Así fue como la luz volvió al mundo”. La ciencia ha demostrado la necesidad de luz solar para el crecimiento, para la agricultura, para la salud y para otros numerosos aspectos de la vida humana. Muchos de los mitos de alrededor del mundo reflejan una creencia en la necesidad de la luz solar en los más grandes proyectos. La mitología india también comprende el papel del sol, al cual se le ha adorado como a Surya en tiempos remotos. De acuerdo con la mitología india, Surya era el responsable de la salud y la vida, un reflejo de lo que quizás fueran las creencias científicas de la época. Surya es una de las principales deidades védicas. Se le retrató cabalgando a través del cielo en un carro tirado por 7 caballos. Nos maravilla la analogía entre los 7 caballos y los 7 colores de la luz. Los americanos tienen una práctica que consiste en tomar energía para sus cuerpos, los indios nativos tomaban baños de sol poniéndose de pie durante dos horas con una exposición máxima de las partes del cuerpo y no tenían necesidad de comer alimentos durante esos días, subsistían por el microalimento de la luz solar. Cuando las nubes aparecen nos volvemos melancólicos. Miramos al sol y cogemos energía. El fenómeno HRM, de hecho es un redescubrimiento de un ritual científico, el cual se utilizaba para sanar enfermedades físicas y mentales así como dolencias emocionales y espirituales en épocas remotas. Los hindúes de la antigüedad le llamaban a esta práctica Surya Namaskar, al mismo tiempo que los antiguos egipcios y los americanos la llamaron helioterapia y los europeos terapia de Apolo. Entre los americanos al Sol se le conocía como INTA. Las técnicas científicas que practica HRM se basan en como él obtiene su energía de la luz solar. La humanidad también utiliza la energía solar para el funcionamiento de cocinas, calefacción y automóviles solares. De la misma manera, lo que HRM hace es convertirse él mismo en coche solar, utilizando la luz solar. Tradicionalmente los seres humanos comemos fuentes secundarias de energía como las plantas y otros vegetales que dependen en gran medida del sol para su crecimiento. La idea está en cómo aprender a absorber la energía de la fuente primaria, que es el sol mismo. Hay una explicación científica de lo que puede ocurrir durante el ejercicio de este método. Ya que el cerebro es un poderoso recipiente de energía y la retina y glándula pineal (el tercer ojo) están equipadas de células fotorreceptoras, una especie de fotosíntesis podría tener lugar durante el Surya Namaskar, el cual proporciona a la persona todo tipo de energía y vitaminas que requiere para un correcto funcionamiento de sus órganos internos. Además, los rayos del sol con sus 7 colores curan todo tipo de dolencias tales como el Alzheimer, Parkinson, obesidad, artritis, osteoporosis, cáncer y otras. Si queremos alcanzar la paz mundial, todos deberíamos conseguir un perfecto equilibrio mental. Este método también puede contribuir a la paz mundial. PROCESO HRM experimentó con su propio cuerpo durante tres años e ideó este método basado en el ensayo y el error. Esto lo puede lograr cualquiera, en cualquier parte del mundo, en cualquier época del año. HRM no es el único y cualquier persona puede hacerlo. En la actualidad miles de personas utilizan este método y están logrando resultados. En Brasil, Australia, Alemania, más de 3000 personas subsisten a base de luz, hace ya mucho tiempo. Originalmente en la antigüedad, se trataba de una práctica espiritual y ahora se está convirtiendo en una práctica científica, que puede ser practicada por cualquier persona, tal como se describe a continuación. Día a día esta práctica se está haciendo cada vez más popular y se le ha llegado a conocer como el fenómeno HRM para cursos y mayor informacion contactar a.
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Sungazing (también conocido como sun gazing, curación solar, observación solar, Sun Yoga, Surya Yoga y Solar Yoga) es el nombre que recibe la práctica de miras directamente al sol en su ocaso o salida durante unos minutos con la creencia de que ello permite recibir su luz, energía, y complementar, mejorar o reemplazar la alimentación con comida.
Similar a la teoría de la alimentación a partir del aire, no hay evidencia científica que avale esta práctica.
La práctica de mirar al sol es peligrosa, ya que mirar directamente al sol, incluso por períodos breves de tiempo, puede causar daños graves a los ojos e incluso ceguera.1 La retinopatía solar es una patología del ojo debida a la radiación solar2 que se produce frecuentemente por mirar al sol durante los eclipses solares.3 Aunque la pérdida de visión que resulta de este daño es generalmente reversible, se han producido informes de daño o pérdida de visión permanentes,4 por lo que la mayoría de oftalmólogos aconsejan a sus pacientes no mirar directamente al sol5 durante los eclipses solares. También hay evidencia de que la exposición al sol puede producir cáncer de piel.
[editar]Reivindicaciones de los observadores solares
Sus defensores argumentan que experimentan aumentos del nivel de energía y disminuciones del apetito.6 Uno de los observadores solares más famosos, Hira Ratan Manek, reivindica que esta práctica puede proporcionar alimento al organismo; también que desde 1995, ha vivido de la luz solar sin necesidad de alimentos sólidos y que no experimenta ansias de comer ni letargo alguno, efectos normalmente asociada a la inanición, ni falta de nutrientes. Su mujer ha señalado que bebe pequeñas cantidades de café, té, zumos de frutas y sueros lácteos.7 Sin embargo, ninguna de sus afirmaciones ha podido ser corroborada por investigadores independientes.
Mirar al sol se ha utilizado con otras técnicas como el Método Bates para mejorar la vista, pero muchos practicantes creen que basta con la luz solar para mejorar o recuperarse completamente de los defectos visuales.
Manek y otros muchos observadores solares han informado de haber tenido un amplio rango de experiencias espirituales como resultado de su práctica, algunas veces incluyendo, pero no necesariamente limitadas a:
sentimientos de bienestar,
conexión con la naturaleza,
sentimiento de iluminación espiritual, y
firme convicción acerca de la práctica de mirar al sol
La práctica de observar al sol se realiza a menudo descalzo en contacto directo con la tierra desnuda, y para la mayoría, durante las "horas seguras": la hora siguiente al amanecer y la hora anterior a la puesta del sol8 , especialmente cuando estos procesos ocurren al nivel del horizonte (es peligroso cuando ocurren sobre una montaña o colina y el sol está alto sobre el horizonte). Otras personas sienten que se puede practicar en otros momentos del día y han propuesto que hay muchos factores que influyen en este proceso[cita requerida], como cambios que se producen durante su transcurso que son capaces de alterar la fisiología humana de tal forma que se puede mirar al sol durante periodos más largos de tiempo, o en horas no necesariamente "seguras"[cita requerida].
Las autoridades de esta práctica, como Manek, suguieren que los que quieran realizar esta práctica lo hagan con precaución. Su centro de sanación solar9 recomienda a los practicantes que miren al sol durante 10 segundos el primer día, 20 el segundo, 30 el tercero y así sucesivamente hasta alcanzar los 44 minutos, durante el transcurso de unos nueve meses.
Otra autoridad, el sanador ucraniano Nikolay Dolgorukiy estableció un record en 2006 al mirar el sol sin parar durante más de 13 horas — desde la salida a la puesta del sol.10 En 2007, Nikolay Dolgorukiy miró al sol con los ojos abiertos durante 16 horas. Nikolay pide a los principiantes que lo hagan durante varios segundos y aumenten la exposición gradualmente, por segundos. De acuerdo a su página web,11uno de los seguidores de Nikolay Dolgorukiy, Tatiana Zhadan miró al sol directamente con los ojos abiertos durante 5-6 horas en 2006.
Debido a la forma en que trabajan los ojos, mirar al sol durante un eclipse solar puede ser especialmente dañino, y por esta razón la idea es criticada por los observadores.[cita requerida]
Además, los observadores no recomiendan ayunar por uno mismo, aunque sugieren que podría en última instancia trascender la necesidad de alimentarse mediante la observación.[cita requerida]
Algunos practicantes, impacientes por los resultados, han practicado durante una hora o más, con la esperanza de conseguir algún tipo de cambio notable. Desafortunadamente, el único cambio que resulta típicamente es la retinopatía o la formación de moscas oculares. Este tipo de discapacidad puede incluir un punto brillante, típicamente del tamaño angular del sol, justo en el centro del campo de visión de nuestro ojo, lo cual puede dificultar la visión en esa parte del ojo. Esta incidencia, de acuerdo con las mismas fuentes, se puede evitar ejercitando la paciencia y la precaución, mirando al sol solo unos pocos segundos al principio y aumentar el tiempo de exposición posteriormente.
Manek ha creado un sitio web que ofrece más ayuda y estudios sobre esta materia.
Actualmente no existen pruebas científicas sólidas de que mirar al sol funcione realmente de la forma que los observadores creen, como tampoco existen pruebas de lo contrario. Muchos observadores han expuesto que la práctica debería ser sometida a un análisis exhaustivo siguiendo el método científico, para ayudar a su corroboración o refutación.
Hira Ratan Manek, de hecho, ha afirmado en su sitio web [1] que ha sido testeado en varias ocasiones bajo condiciones de ayuno extensas: primero en Calicut, India bajo la dirección del Dr. C.K. Ramachandran; después en Ahmedabad, India bajo un equipo internacional de 21 médicos y científicos dirigidos por el Dr. Sudhir Shah y el Dr. K. K. Shah[2], el Presidente de la Asociación Médica India en aquel momento; y posteriormente, en la Universidad Thomas Jefferson y en la Universidad de Pennsylvania. Otras fuentes [3][4] han indicado que la NASA también ha observado a Manek, sin embargo, la NASA lo niega[5].
Aunque estas fuentes sugieren que se ha realizado un trabajo científico sobre esta práctica, los resultados no se han publicado extensamente y ni las comunidades médica ni la científica han reconocido abiertamente su validez. La comunidad de observadores todavía espera un estudio riguroso y definitivo para resolver el asunto.
Las ideas de sobrevivir sin comida, o inedia, y mirar al sol tienen muchos oponentes y críticas[6][7][8][9]. Estas prácticas se han tachado de curandería, pseudociencia y no científicas en muchas ocasiones. Médicos, científicos y otros han condenado la práctica de mirar al sol:
1. La mayor parte de las críticas se centran en la idea de que mirar al sol es una práctica no saludable que podría provocar daño en los ojos e incluso ceguera, antes que favorecer la salud. Se sabe que la retinopatía solar se produce de esta forma y los eclipses solares dejan a menudo a los observadores con ceguera de diversos grados y persistencia.12
1a. Se ha argumentado que el cuerpo humano utiliza un mecanismo de defensa natural para protegerse a sí mismo del sol. Cuando el ojo recibe una luz brillante, la reacción automática es una contracción de las pupilas, guiño de los párpados y la producción inmediata de lágrimas.
2. Los críticos contraponen que el cuerpo humano no tiene ningún órgano para convertir la luz solar en una forma de energía que pueda utilizarse como combustible. Los animales normalmente utilizan amplios sistemas digestivos para desmenuzar la comida sólida en nutrientes y energía. Los observadores afirman que sus ojos pueden convertir la luz solar en energía para sus cuerpos. Sin embargo, mientras que las plantas poseen clorofila para facilitar la fotosíntesis, los seres humanos no poseen clorofila en sus ojos.
2a. Incluso si un ser humano pudiese de alguna manera aprovechar la energía del sol a través de sus ojos y convertirla en energía y nutrientes, los ojos proporcionan un area demasiado pequeña, especialmente en comparación con las hojas de las plantas verdes. Además, los humanos requieren una mayor cantidad de energía para su sustento que las plantas. Mirar al sol tendría que ser decenas o centenas de veces más eficiente que la fotosíntesis para producir suficiente energía como para mantener a un ser humano mínimamente funcional.
3. Unido al posible daño a los ojos, algunos estudios han mostrado que la exposición al sol puede incrementar el riesgo de cáncer de piel.
Los observadores aducen que algunas de esas críticas utilizan técnicas populares de amedrentamiento contra esta práctica en un intento de asociarle connotaciones emocionales con una base científica relativamente pobre:
1. Los partidarios creen que actuando con precaución y siguiendo el proceso indicado por Hira Ratan Manek pueden evitar la retinopatía, la ceguera y otros defectos de los ojos potencialmente dañinos. Esto significa mirar al sol solo cuando sus rayos son débiles, alrededor del amanecer y el atardecer y acondicionado los ojos a niveles crecientes de luz, de una forma similar a unejercicio mental o físico. No recomiendan mirar al sol durante los eclipses solares.
1a. Un cuerpo no acostumbrado al ejercicio físico responde naturalmente al mismo con una realimentación negativa, normalmente en forma de dolor y otros achaques. Si un médico examinara las células y los tejidos en un cuerpo que ha sufrido un ejercicio físico extenuante, debería asumir, de acuerdo a los daños limitados y agudos producidos en esas células y tejidos, que el ejercicio físico es dañino para el paciente y que no mejora la salud. Este punto de vista sería un grave error de perspectiva del problema, tal y como no ver el bosque por culpa de los árboles. El cuerpo humano tiene un gran potencial de recuperación y el limitado daño en el que se incurre a través del ejercicio físico es generalmente temporal (excepto cuando no se hace con precaución). El hecho de que los ojos, como el resto del cuerpo, retroceden a modo de queja cuando miran al sol por primera vez no es necesariamente una prueba de que mirar al sol sea dañino. Los practicantes regulares encuentran que sus ojos se ajustan pronto a la luz. En general, solo en los comienzos de la sesión experimentan alguno de estos problemas.
2. Aunque es verdad que los ojos humanos no poseen clorofila, hay otras formas de convertir la luz en energía. Las células fotovoltaicas, es decir, los paneles solares, pueden también aprovechar y convertir la luz solar en energía. Para que funcione la fotosíntesis, todo lo que se necesita, en teoría, es una manera de aprovechar el efecto fotoeléctrico para alimentar una cadena de transporte de electrones. Los observadores del sol mantienen que el ojo humano posee realmente algún tipo de células fotovoltaicas y que este podría ser el medio por el cual los humanos pueden sobrevivir con energía solar.
2a. Los practicantes creen que aún hace falta experimentar y analizar mucho más su práctica. Hay algunas teorías que podrían explicar cómo una superficie tan pequeña como la de un ojo podría absorber la luz solar y convertirla en la misma energía que la comida.[cita requerida]Es posible que las células fotovoltaicas que se supone que existen sean altamente eficientes para convertir energía. Sin embargo, otra posibilidad es que la energía solar actúe más como catalizador o disparador que estimule la producción de energía de alguna otra fuente.
3. Los practicantes creen que aunque la exposición al sol y la probabilidad de contraer cáncer del piel han sido relacionados en diferentes estudios, podría no haber una relación directa real. La asociación es más probablemente debida al uso de protectores solares, algunos de los cuales se ha demostrado que poseen efectos cancerígenos.13
Mientras que se admite que no hay pruebas científicas actualmente para esta actividad, también se sugiere que casi no hay evidencias que la falseen tampoco. La comunidad de observadores está esperanzada en que en el futuro el tema reciba un tratamiento amplio y completo por la ciencia y la medicina.
Gustav Fechner (1801-1887): Físico y filósofo Alemán que es ampliamente considerado como el padre de la psicofísica, la ciencia que busca cuantificar la relación entre los estímulos físicos y las sensaciones que producen. Experimentos en la formación de imágenes persistentes, para las que él observó el sol, le dejó parcialmente ciego y sensibilizado a la luz.[cita requerida]
Khwaja Shamsuddin Azeemi (nacido en 1927): Maestro Sufi pakistaní y parapsicólogo que recomienda observar el sol para mejorar tanto la vista de cerca como de lejos, el enfoque mental y el bienestar general. Sin embargo, recomienda mirar al sol solo durante los primeros pocos minutos del amanecer, cuando el sol es rojo-anaranjado. Y para los principiantes, no más de un minuto al día durante seis meses. Previene contra practicarlo durante períodos prolongados puesto que podría conducir a problemas de salud mental.
↑Stokkermans TJ, Dunbar MT (October 1998). «Solar retinopathy in a hospital-based primary care clinic». J Am Optom Assoc.69 (10): pp. 625–36. PMID9805443.
↑Krasniz I, Beiran I, Miller B (1999-11-01). «Retinal lesion due to excessive exposure to sunlight». Harefuah137 (9): pp. 378–80, 431, 430.PMID11419039.