Todo el temor, la angustia, la crueldad y la injusticia que hieren al mundo de hoy son causados por el erróneo tipo de educación material.  Hasta quienes prometen curar la enfermedad del cuerpo, lo tratan como si sus diferentes partes fueran materia adecuada para un estudio y tratamiento separados.  Toda la naturaleza es el cuerpo de Dios y debe ser considerada como Una.  La educación espiritual lleva la atención hacia la unidad detrás de toda la aparente multiplicidad.  Para celebrar una ocasión o un festival, puede que hayan aseado y limpiado el polvo de sus casas y sus alrededores, pintado o blanqueado las paredes, dibujado diseños auspiciosos en el suelo o colgado coronas de flores sobre las puertas – todo esto no es más que decoración exterior.  Para ser realmente felices, deben decidir eliminar los males del egoísmo, la codicia, el odio y los celos que puedan albergar.  Entonces se darán cuenta en verdad de la luz dentro de sí mismos, y el Atma (Alma Suprema) alboreará en toda su gloria sobre ustedes.

- Divine Discourse, Jan 15, 1979.