Tomen los cinco elementos, los componentes de este Prapancha (Universo). Entre ellos, el agua tiene el movimiento y el frío como su Dharma; la combustión y la luz son el Dharma del fuego. Cada uno de los cinco elementos posee su Dharma único. La humanidad para el hombre y la animalidad para los animales – ellas les protegen de desvirtuarse. ¿Cómo podría ser fuego el fuego si no tuviera el poder de la combustión y la luz? Habrá de manifestar su Dharma para ser lo que es. Si lo perdiera, se volvería tan inanimado como un trozo de carbón. De manera similar, el hombre también posee algunas características naturales que son su principio animador mismo; uno puede ser identificado como 'humano' sólo cuando se encuentran presentes estas habilidades. Para preservarlas y fomentarlas se han establecido ciertos modos de conducta y pautas de reflexión. Esto es llamado Dharma. Estas cualidades no han sido importadas desde algún lugar externo; ni pueden ser eliminadas. Representan su propia y genuina naturaleza, su singularidad.

- Geeta Vahini, Ch 7.