DIVINO DISCURSO PROFUNDA SABIDURIA DE LA MADRE EASWARAMMA
L A M A D R E D E E A S W A R A E S E A S W A R A M M A ¿QUIEN
es Easwaramma? Es la madre de Easwara. Este no fue el nombre que le
dieron sus padres. Pero después de su matrimonio, Kondama Raju (el
abuelo de Swami), que tenía gran sabiduría y estaba bendito con la
visión del futuro, comenzó a llamarla Easwaramma (Madre de Easwara:
Dios).
Validez del Nombre, Easwaramma Ella
fue bautizada como Namagiriamma cuando nació. Pero Kondama Raju le
dijo que Easwaramma era el nombre más apropiado para ella, pues sabía
que ella se iba a transformar en la madre de Easwara (Dios). Easwaramma
nació en una familia tan pobre que ni siquiera tenía alimento
apropiado. Todo lo que tenía para comer era Ragi Sankati (gruel
preparado de un grano integral). Hasta yo como solo Ragi Sankati.
Mucha gente en Karnataka come Ragi Sankati. Me gusta mucho. No me hace
ninguna gracia el arroz, Korma (curry), etc. El Ragi Sankati con
chutney (conserva agridulce) en aceite de maní, es Mi alimento
favorito. Ambos el Ragi y el aceite de maní están disponibles en
nuestra aldea. Cuando vengo aquí (Whitefield) desde Puttaparthi, traigo
harina de Ragi conmigo. Hasta cuando voy a Kodaikanal, les digo a los
muchachos que traigan harina de Ragi para Mí. Easwaramma era
analfabeta. Cuando veo la actitud egoísta, mentalidad pervertida y
comportamiento ostentoso de la gente educada de hoy en día, siento que
fue mejor que Easwaramma no haya tenido educación.
Nobles Verdades Enseñadas por la Madre Easwaramma
En
esos días (los días escolares de Swami), cuando volvíamos de la escuela
de Bukkapatnam a la tarde, la Madre Easwaramma amorosamente preguntaba
lo que había pasado en la escuela ese día. Un día los niños le dijeron,
“Madre, hoy un maestro hizo que nuestro Sathya se parara en la banca.”
Comenzaron a criticar al maestro. Madre Easwaramma intervino y dijo,
“Niños, no deben hablar mal de su maestro. Ningún maestro castigaría un
alumno sin una razón adecuada. Nuestro Sathya debe haber cometido
algún error.” Luego Me preguntó, “Sathya, ¿qué error cometiste?” Le
conté los hechos tal como sucedieron. El maestro ordenó, “Quienquiera
que haya escrito lo dictado, debe ubicarlo sobre la mesa. Los demás
deben pararse sobre la banca.” Yo no había tomado notas. Ese fue Mi
error. Entonces, me paré sobre la banca. También dije algo que fue más
de lo necesario. Dije, “Señor, ¿pueden todos esos muchachos que han
tomado notas contestar las respuestas a sus preguntas? Aunque yo no
tomé nota, puedo contestar cualquier pregunta que me haga.” El maestro
pensó que era egoísta y ordenó que debía pararme en la banca durante 3
períodos. Le obedecí. Mientras tanto, la campana sonó y el otro
maestro Mahboob Khan vino a la clase. El era un Mahometano y una
persona noble. Le afligió verme parado en la banca. Le preguntó al
maestro porqué Me había hecho parar allí. “No ha tomado notas, por eso
el castigo,” dijo el maestro. Mahboob Khan Me defendió, diciendo, “Y,
¿qué tiene si no ha tomado notas? Puede contestar todas tus preguntas, y
eso es suficiente. Pídele que se siente.” Sin embargo, el maestro
insistió que merecía el castigo porque no había obedecido su orden. El
maestro tenía que ir a otra clase. Pero no pudo levantarse de la
silla. Inicialmente pensó que su Dhoti se había enredado a un clavo en
la silla. Pero no era así. ¡Estaba pegado a la silla! Cuando trataba
de levantarse, la silla también lo hacía. Entonces Mahboob Khan le
dijo, “Él no es un muchacho común. Está dotado de poderes divinos. Lo
has castigado sin una razón apropiada. Por lo menos ahora dile que se
siente.” El maestro se dio cuenta de su error y Me dijo que me
sentara. Simultáneamente, también pudo levantarse de su silla. Cuando
todo esto fue narrado a Madre Easwaramma, dijo, “Querido Sathya, No
debiste castigar a Tu maestro.” Le dije, “Yo no lo castigué; de hecho,
se castigó solo.” La Madre Easwaramma solía impartir muchas enseñanzas
sagradas a los niños. Les dijo, “Mis queridos, van a la escuela a
estudiar. Lo que sea que aprendan, denle buen uso. Sólo entonces serán
llamados verdaderamente educados y ganarán el título de Sakshara
(literatos). Si no hacen un uso adecuado de su educación, se vuelven un
Rakshasa (demonio). Hagan esfuerzos para volverse Sakshara.” Madre
Easwaramma Me dijo, “¡Sathya! En todo momento, en todo lugar, bajo
todas las circunstancias, ama a todos. No odien a nadie. Cuando Amas a
todos, también serás amado por todos.” Si no amas a los demás, ¿cómo
puedes esperar que te amen? Das amor y recibes amor. Es un tráfico de
una sola mano. Debes dar y tomar. Yo amo a todos. Es por eso que
todos Me aman. No hay traza de odio o enemistad en Mí. De esta forma,
Madre Easwaramma enseñaba a los niños muchos ideales sagrados.
Hagan el Bien, Sean Buenos, Vean lo Bueno, Hablen Bien Quiero
contarles un incidente que habla de la inmensa compasión y amor por los
niños de la Madre Easwaramma. Había clases de verano. Estudiantes de
muchos Estados y países estaban asistiendo a esas clases en ese
entonces. Gokak, que solía conducir las clases, era un disciplinario
estricto. Era un hombre de alto carácter dotado de espíritu de
sacrificio. También era un gran académico. Estaba conduciendo las
clases de forma ejemplar. Un día, los estudiantes estaban tomando el
almuerzo en el comedor. Uno de los muchachos se levantó y se fue antes
de que los demás terminaran sus comidas. Gokak, que observó esto a
través de la ventana, lo llamó y lo reprendió por ese acto de
indisciplina. “Cuando sus compañeros están tomando su alimento, no
debería levantarse a la mitad aunque usted ya haya terminado. Eso
equivale a insultarlos.” Diciendo así, Gokak lo suspendió de las
clases. El muchacho rompió en llanto, pero Gokak no se conmovió. El
muchacho vino a la habitación de Madre Easwaramma, cayó a sus pies y
comenzó a llorar. Le contó acerca del duro castigo impuesto por Gokak.
Le suplicó que fuera en su rescate. Madre Easwaramma lo consoló y lo
despachó. Se sentó en los escalones por donde Gokak pasaría. Después
de un rato, Gokak llegó. Madre Easwaramma le ofreció Namaskar. Gokak
le respondió con Namaskar a ella. Entonces ella le dijo, “Cuando le
hice Namaskar, usted me lo devolvió recíprocamente. En la misma manera,
si usted castiga a otros, será castigado a su vez. El muchacho cometió
un error por inocencia. Por favor perdónelo y permítale asistir a las
clases.” Gokak actuó conforme el consejo de Easwaramma y perdonó al
muchacho. De esta manera, solía ayudar a otros y brindarles consuelo y
solaz. Sus palabras de sabiduría quedaron impresas en los corazones de
los demás. Están atados a la consecuencia de sus acciones. Si hablan
a otros con dureza, volverá a ustedes como un eco. Si golpean a otros,
volverá a ustedes como una reacción. Por lo tanto, no hieran a nadie.
Hagan el bien, sean buenos, vean el bien y hablen bien. Entonces
cosecharán ricas recompensas. Aunque Madre Easwaramma no tenía
educación formal, estaba dotada de profunda sabiduría. La enseñanza que
Madre Easwaramma impartió a Gokak quedó grabada en su corazón para
siempre. Más tarde cuando fue nombrado Vice Canciller de Puttaparthi,
solía recordar sus palabras de sabiduría. La recordaba a menudo.
Decía, “Veo a Madre Easwaramma en sueños casi todos los días. Actúo de
acuerdo a las palabras sabias que ella me dijo. Su consejo no solo es
útil para mí, sino para otros también.” No deben criticar a otros.
No deben herir a otros ni burlarse de ellos. Deben amar a todos. Esto
es lo que tenemos que aprender. A amar a todos. Esta es la principal
enseñanza de Madre Easwaramma. Extraído de los Discursos de Bhagaván el Día de Easwaramma.
|