Siento dejaros otro de mis mensajes filosóficos, pero me gusta compartir este tipo de experiencias.

 

Hoy estuve comiendo con unas compañeras de trabajo de hace casi 20 años. Nos vemos poco, una vez cada dos años más o menos. Hoy fue una de esas ocasiones, y como no podría ser de otra manera nos liamos a contar batallitas de cuando trabajábamos juntas en la misma planta de hospital. Yo soy la más joven del grupo y en una de esas batallitas mis amigas me quisieron orientar sobre una persona de la que hablaban. ¿No te acuerdas de fulanita? Si mujer, que tenia el pelo teñido de rojo.. La de los perros...

 

Y entoneces me di cuenta de que hay un antes y un después en mi vida a raiz de tener gatos. Antes de tener gatos yo valoraba a la gente de otra forma: puedo recordar si tenian un niño pequeño, si la operaron de varices, si estaba en la despedida de menganita, si salió en la foto del periódico... en fin, puedo traer a mi mente las caras recordando ciertas circunstancias. Pero de esta persona en concreto, lo de que tuviera varios perros, no debía ser relevante, porque soy incapaz de recordarla.

 

En cambio, soy consciente que desde que tengo gatos, recuerdo mejor a las personas por las mascotas que tienen. Seguro que no te puedo decir el nombre, pero se que tienen un gato siamés; que era el que dejó a su perro en casa de mi amiga; que sus padres eran los que me preguntaron sobre como cuidar el persa que les regalaron; que es la chica que un día trajo un hurón al trabajo para enseñarlo; que es el chico que tiene dos perros de lanas... incluso si te enteras de separaciones, me preocupa más con quién se quedó el gato que de porqué se separó la pareja.

 

!Cómo cambiamos!

 

Lines.