Yo creo que este cuento no se lo creen ustedes tampoco.  Cuando voy llegando tarde a mi trabajo ( hacía frío en la madrugada, las noches son más largas y el sol sale tarde, así que apagué el despertador u por suerte tengo el celular media hora más tarde), veo que la laboratorista está tratando que convencer a una gatita de salirse de la clínica, pero ella llegaba a la entrada y corría otra vez hacia adentro.

 

Me dicen que una mujer que llegó a hacerse exámenes de laboratorio, fué seguida por la gata y se quedó adentro.  la mujer se fué y nos la dejja.  La secreteria del laboratorio y la lic. se creen el cuento, pero no se hacen responsables de la gata, ni siquiera preguntaron dónde encontró a la gata, pues se le nota que estuvo cuidada con humanos, pero está flaca.

 

Pues no atendí a nadie, me regresé a casa con la gata, comió y bebió desesperadamente y la dejé con mi hija a quien desperté y le dí las instrucciones.  Parece que mi hija habla dormida, pues 3 horas después me llama alarmada para notificarme que hay una gata en casa y que llora mucho.  Tuvo que meterla a su cama para que se callara y durmieron juntas.

 

Ya la bañé, le dí desparasitante, parece de 2 meses, tiene algunos dientes y comió croquetas y muchas.  Ahorita duerme a mi lado y cuando sepa cómo se pasan fotos desde un Black berry, se las envío. 

 

Por supuesto que ya hablé con alguien que quería un gato y me ofrecí a esterilizarla, pero no ha llegado y creo que no vendrá.

 

Tilcia