"Las runas son el nexo entre el pasado y el presente y se unen para
configurar el futuro."
Fabiana Daversa (especialista en runas)
Las runas son un antiquísimo oráculo compuesto por 25 signos mágicos que
con el tiempo se convirtieron en el primer alfabeto de los
escandinavos, el pueblo vikingo que desarrolló su civilización en el
extremo norte europeo. Este alfabeto mágico tiene la particularidad de
ser el único que sobrevive, en occidente, a la furia descalificadora de
la iglesia romana. Las runas se propagaron a bordo de las naves vikingas
y llegaron hasta Latinoamérica.
El oráculo de las runas
Comprende varios niveles. Desde el análisis de cada símbolo y la
predicción inmediata hasta el estudio del inconsciente. Como las runas
presentan los mismos arquetipos que las mancias orientales o saberes
esotéricos, pueden desarrollarse todo tipo de asociaciones, con la
ventaja – a favor de las runas – de ser más adecuadas para la
lateralidad de nuestros cerebros occidentales, que prefieren la
objetivación a las lecturas abstractas planteadas por sufies, budistas o
taoístas, que a muchos les resulta difícil entender.
¿Cómo se consulta el oráculo, cómo se tiran las runas?
El primer paso es que el consultante elija 9 runas al azar y las tire
sobre el Campo del Sol, que es el mandala rúnico. Las runas caen en
determinada posición sobre el mandala, un círculo mágico dividido en
partes que expresa la globalidad de nuestra existencia. Al significado
de las runas se añade el significado del lugar donde han caído, y se
infiere e interpreta un significado.
El vínculo de las runas con la astrología
Las runas tienen un complejo archivo de informaciones. Los nórdicos
fueron eximios navegantes y, por lo tanto, atentos observadores de los
astros. Ellos recorrían los mares quinientos años antes que Colón,
orientados por el tránsito de los planetas sobre las constelaciones.
Cada runa está consagrada a un astro, sea planeta, estrella, satélite o
la combinación de ellos. Hay doce runas que corresponden a los signos
astrológicos.
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