La Gran Pirámide Símbolo de un antiguo conocimiento perdido en las arenas del tiempo, la Grán Pirámide es uno de los monumentos más impresionantes de la humanidad. El misterio de su construcción y significado ha movido a investigadores de todos los tiempos entre los que podemos destacar al Abate Moreaux, Gastón Máspero, el Coronel Garnier, Marsham Adam, David Davidson, el escritor Rodolfo Benavidez, el Profesor Piassy Smyth y Otto Hesse entre otros. De esos maravillosos estudios iremos hablando en Okulta, pero lo que nos ocupa en este artículo, en especial, es la profecía expresada matemáticamente en el diseño de la Gran Pirámide. Otto Hesse, entro otros investigadores, sostiene que los pasadizos, pasillos y cámaras de La Gran Pirámide poseen un altísimo simbolismo. La medida de éstos es utilizada para calcular períodos históricos, siendo verdaderos registros cronológicos del desarrollo de la humanidad por un período de 6 mil años. Por ejemplo las medidas y proporciones de la Cámara de la Reina indica la fecha del año 4 antes de Cristo, fecha exacta del nacimiento del Mesías. La Gran Galería, por ejemplo, registra la fecha de su crucifixión. Misteriosamente en el período que se adjudica a los años 1918 a 1928 está simbolizado con el mítico número 666 en la Cámara del Triple Velo. También se profetizan las grandes guerras, magnicidios y debacles de todo tipo que cambiaron el curso de la historia de la humanidad. A partir de 1987 se profetiza un período de confusión, cambios geográficos, geopolíticos y climáticos que terminan con la última fecha de la profecía que es el 17 de septiembre del año 2001, fecha considerada el fin de una época. No ha de ser casual que para la mayoría de los filósofos, el 11 de septiembre de 2001, con el atentado a las Twin Towers, se instala un hito, un antes y un después en la historia de la humanidad. Una era de oscuridad está llegando a su fin, quizá no hallamos visto aún sus más tremendos efectos, necesarios para la imprescindible purificación previa a encaminarnos hacia una era dorada de plenitud y amor universal. Algún escéptico podrá preguntar por los seis días de diferencia: es muy probable que se deban a desajustes naturales producidos entre la fecha de construcción del monumento y nuestra época. Por la deriva continental, por ejemplo, pudo explicarse la diferencia de algunos grados en la ubicación exacta de la Gran Pirámide en el eje Norte-Sur. "Dramáticas profecías de la Gran Pirámide" El excelente trabajo que lleva ese título, escrito por el mexicano Rodolfo Benavidez hace 40 años, consigna la cronología de acontecimientos que figura plasmada en la galería de la Gran Pirámide con una alarmante precisión. Comienza en el año 2644 antes de Cristo y llega hasta nuestros días. En dicha cronología, el año 2001 figura como el fin de la "Era Adámica" y la fecha exacta es el 17 de septiembre de 2001. Esa culminación de una era generará el "Gran Cambio", lo que implica que el modo de vida que conocíamos hasta ese momento ya nunca será igual. Y no hace falta más que leer los periódicos para palpar la realidad: el mundo ya no es el que conocíamos después de los terribles atentados en los Estados Unidos el 11 de septiembre de 2001. El gran cambio ya está en marcha, lo que no podemos asegurar es hacia dónde nos llevará |