LA TERAPIA DE

REGRESIÓN HIPNÓTICA


La "Terapia Regresiva", ha adquirido durante los últimos años, un alto grado de popularidad; contando con un gran número de seguidores. Aunque para inducir a un estado regresivo, son diversos los métodos que se pueden utilizar; seguramente es la hipnosis, uno de los más directos. Como otros tipos de psicoterapias, se fundamenta en que cada individuo posee dentro de él, un "sistema de archivo" subconsciente. En él, se almacena en forma permanente, todo lo que a través de nuestra vida, vemos, oímos, aprendemos o experimentamos. Al igual que como cualquier otro de archivo, gran cantidad de lo que allí se encuentra es innecesario o molesto "a la vista"; y entonces se le relega al "fondo de los cajones"... es decir, al inconsciente.

Pero, a través de la hipnosis, sofrología y otras técnicas, podemos acceder a esa parte oculta de la mente y por tanto, a ese sistema de archivo de información. La "Terapia Regresiva" nos ayuda a indagar en esos recuerdos bloqueados que tienen relación con nuestra más temprana infancia y que tanto nos condicionaron. Con un objetivo más lejano, también nos conecta con esas impresiones que en estado de gestación nos marcaron para siempre. Y por último, tampoco debemos despreciar, la posibilidad de asociar algunas pautas de nuestra conducta con sensaciones arrastradas de una vida anterior.
Se manejan diversas teorías - dónde naturalmente, incluimos la existencia real de la reencarnación - que podrían explicar de dónde provienen esos recuerdos que no pertenecen a nuestra vida actual: Inconsciente Colectivo, Memoria Genética, Fabulación Inconsciente... No vamos a incidir sobre ello, porque nos alejaría del propósito de este artículo, en el cual quisiera expresar algunos puntos de vista personales sobre la "Terapia Regresiva"; y más concretamente, la que se utiliza mediante la hipnosis. Porque creo, que falta bastante información - o ésta nos llega muy distorsionada - entre aquellos que asumen en papel de "pacientes" y sobre todo y lo que es más peligroso, los que ejecutan el papel de "terapeutas". Lógicamente son puntualizaciones personales, las cuales solo las avalan bastantes años de experiencia; aunque también debo añadir, que generalmente son compartidas por bastantes psicólogos, psiquiatras, y profesionales de la salud mental, próximos al entorno donde me muevo. Vamos con ellas:

- Con la regresión hipnótica no debemos hacer olvidar los acontecimientos negativos pasados, o fingir que nunca sucedieron. Se trata de ayudar a colocarlos en su sitio, de integrarlos, asimilarlos e incluso aceptarlos, dentro de nuestra mente consciente.

- Existen dos tipos de regresión: A etapas más tempranas en la vida actual - las cuales si tenemos constancia de que han sucedido, pues son fácilmente comprobables - y las que se relacionan con supuestas vidas pasadas, que nunca podemos admitir como realidad inequívoca, mientras existan hipótesis alternativas.

- La Hipnosis no es en absoluto peligrosa, si partimos de la base, de que quien la practique, sea un profesional con un nivel suficiente de ética y posea los conocimientos necesarios sobre lo que está haciendo, como sucede en cualquier otra actividad en la vida. No obstante, recordemos que la hipnosis practicada por alguien irresponsable, puede entrañar un grave peligro. La "Terapia Regresiva", es algo más complicada ya que tenemos que manejar conflictos y motivaciones inconscientes. Si los desconocemos el paciente puede verse envuelto en un mayor grado de confusión y dudas.

- Hay que recordar que si a una persona hipnotizada le ordenamos hacer algo que vaya en contra de sus convicciones, dicha persona responderá con un cierto grado de agitación. Por lo tanto, a nadie se le puede inducir a que actúe en contra de sus principios éticos y morales. La mente humana posee unos mecanismos denominados "defensas" que como su nombre bien indican, nos protegen contra aquellas inducciones que nuestra moral o ética rechaza. Por ejemplo, cuando vemos en la televisión que a una persona hipnotizada se le hace andar a cuatro patas o hacer cualquier otra tontería, en el fondo de esa persona, (aunque sea muy en el fondo), subyace un grado bastante importante de deseos de protagonismo y de llamar la atención.

- A nivel terapéutico es muy útil la terapia de regresión creamos o no en la reencarnación. Su fundamento, es hacer consciente lo inconsciente, es decir, provocar una catarsis en el paciente. Y al margen de que sea real, el que una persona con hidrofobia o pirofobia - temor al agua o al fuego, por poner dos ejemplos - sea debido a una muerte traumática en una vida anterior debido al agua o al fuego; o a acontecimientos acaecidos en la niñez del sujeto ... en cualquier caso, insisto, el desbloquear tales recuerdos resultará beneficioso terapéuticamente, al margen de la aceptación de la reencarnación como etiología de la fobia en cuestión.

- No es lo mismo "regresión" que "revivicción". En la primera estamos recordando vivencias de nuestro pasado, en la segundo estamos reviviéndolos, que no es lo mismo. Así, si a un sujeto hipnotizado en estado de "revivicción", lo regresamos a sus dos años de vida, le será imposible que pueda expresarse con palabras, ya que a esa edad no sabemos hablar. Con la "revivicción", la terapia es más agresiva y también más "directa", aunque implica un mayor grado peligrosidad, por lo que requiere mayor atención y experiencia; ya que el paciente revive las experiencias pasadas con la misma intensidad que si fueran reales.

- Recordemos que está suficientemente comprobado por la práctica totalidad de las distintas escuelas psicoterapéuticas, que la mayoría de los desequilibrios psíquicos y emocionales, se originan en la infancia, sobre todo en las primeras etapas de ésta, ya que es, cuando nuestra personalidad está en formación. Y por supuesto también, en el estado de gestación, dónde el feto percibe ya sensaciones a través de su futura madre.

- Para recurrir a la terapia de regresión, es conveniente que nos pongamos en manos de un psicólogo o psiquiatra, o cuanto menos, ante alguien que posea amplios conocimientos de Psicología y Psicopatología; y conozca en profundidad como se originan y evolucionan los contenidos que hacen posible el desarrollo de las alteraciones psicológicas. Hay que saber distinguir qué es una Neurosis y qué es una Psicosis, ... qué es una Neurosis obsesivo-compulsiva y una Neurosis de Ansiedad, etc... Por ello, nunca temamos preguntarle al hipnoterapeuta sobre su formación. Hay que cuidarse de aquel terapeuta que quiera aparentar ser portador de un cierto don especial o sobrenatural.

- También debemos llevar sumo cuidado, de aquel hipnoterapeuta, que esté arraigado a un tipo de filosofía o creencia esotérica o religiosa; y practique la terapia regresiva bajo unos conceptos que estén al margen de la hipnosis clínica. Conozco a bastante gente que efectúa regresiones, haciendo invocaciones a guías espirituales, médicos del cielo, incluso a espíritus de familiares y amigos ya fallecidos del paciente. Y aunque bien es verdad, que el efecto placebo puede producir curaciones aparentemente extraordinarias, también es cierto, que en otras, puede resultar altamente peligroso.

- Recordemos que la mente actúa en forma de scanner y cuando se le induce a un paciente a que nos relate cosas pertenecientes a una vida anterior, su mente enseguida busca información. Por ello debemos ser muy cautos, en nuestros comentarios o apreciaciones, ya que cualquier cosa que le sugiriésemos, puede influenciarle y condicionar dicha búsqueda.

- El paciente no debe obsesionarse en cuestiones que pertenezcan a otra vida anterior. Vivimos aquí y ahora y hemos de centrarnos en los problemas que nos envuelven dentro de nuestra vida actual. Muchas veces una vida insatisfecha, aburrida o desdichada, da pie a que nos queramos evadir de ella, y la convicción de que lo que recordamos bajo la regresión hipnótica pertenece a una vida anterior más reconfortante, es la excusa perfecta para escapar de todo lo que nos angustia en ésta.

- Durante algún tiempo, se creía que se podía neutralizar y hacer desaparecer los síntomas neuróticos más graves sugestionando de una forma perentoria al hipnotizado en el sentido deseado. Pero los hipnotizadores ignoraban entonces (a veces parece que también lo ignoran los de hoy en día) la noción del conflicto psíquico inconsciente. Se descuidaba, y todavía insisto, se descuida, el hecho de que la mayor parte de las neurosis y de las perturbaciones psíquicas tienen una estructura que sumerge sus raíces en la oscuridad del inconsciente. Querer evitar los aspectos aparentes de esta estructura dejando intactas sus raíces, sería tan perjudicial como querer arrancar la hierba mala de un campo sin tener en cuenta su parte vital, que continua proliferando sobre el suelo. Más de una vez se ha podido comprobar que si la sugestión hipnótica puede hacer desaparecer un síntoma psiconeurótico, otro tipo de perturbación, a veces más grave (o una afección psicosomática) se presenta al cabo de cierto tiempo en el paciente. Por ello, un buen hipnoterapeuta debe guardarse muy bien de practicar la hipnosis de forma superficial e ingenua como se hacía años atrás.

- Cuando se realiza una regresión hipnótica, siempre conviene tener cerca una libreta y bolígrafo para tomar nota de todo cuanto el sujeto hipnotizado te va relatando; principalmente cuestiones características y específicas de la época histórica en la que dice haber vivido. Luego, debemos cotejarlo con alguien que conozca bastante de Historia y comprobar si tales datos coinciden con las peculiaridades - ropa, alimentos, arquitectura, costumbres, etc. - de dicho contexto histórico. Si son correctos, por lo menos, la hipótesis de la Fabulación Inconsciente ya podemos rechazarla.
Puede haber dado la impresión que con todo lo anterior, hemos querido restar credibilidad a una creencia tan arraigada en las religiones orientalistas - y hoy en día cada vez más en Occidente -, como es la de la reencarnación. Nada más lejos de la realidad. Ante algunos casos que he realizado de regresión hipnótica, la posibilidad de que hayan sido testimonios de reencarnación reales, me ha parecido la más coherente. Me apoyo en que en tales narraciones, la dramatización que hace el sujeto hipnotizado de posibles existencias anteriores, se representan de modo muy vivo, hasta el punto de quienes los observamos como testigos solemos declarar: "si esto es una actuación, ningún actor de cine o teatro lo haría mejor".

No descarto en absoluto que la reencarnación exista y con ello, que una persona reviva acontecimientos de una vida pasada, por medio de la regresión. Pero hace tiempo, decidí conservar una amplitud de miras con respecto a este tema. Personalmente tengo mis propias creencias pero recordemos que una creencia no es una verdad empírica basada en la constatación y experimentación de unos hechos. Considero la reencarnación como una alternativa más, pero no la única.

Y sobre todo, cuando nos decidimos a practicar la "Terapia Regresiva", observamos que muchas veces no es necesario recurrir a otras vidas para encontrar el foco del conflicto existente. Si comenzamos nuestra búsqueda por el trayecto más corto, es decir "buceando" primero en la vida actual, tal vez nos ahorraremos mucho camino por recorrer.

Si no hallamos nada especial, en el pasado de nuestra vida... entonces, siempre tendremos tiempo para rebuscar impresiones de posibles vidas anteriores. Y cierto es, que si dichas sensaciones encajan a la perfección para explicar nuestros conflictos actuales, habrá que considerarlas como se merecen. Entonces, sin obsesionarnos en ello, podemos aceptar la posibilidad, de que cuanto nos sucede hoy, fue algo generado en un pasado que transciende a nuestra vida presente. Un pasado que se pierde en la profundidad de la mente humana y sobre todo, en la lejanía de "otras dimensiones" perdidas en el espacio y en el tiempo