George Ivanovitch Gurdjieff (1877-1949)
Gurdjieff nació en Alexandropol, provincia de Kars (Rusia) el 1 de enero de 1877. El padre Borsch, deán de la catedral de Kars se encargó de su educación con miras a que fuera sacerdote y médico. Mientras se preparaba para estas carreras, el muchacho adquirió destreza en varios oficios. Durante el período siguiente, que abarca unos veinte años, Gurdjieff prácticamente “desapareció”, recorriendo Asia Central con un grupo de compañeros. Estos años fueron cruciales en la formación de su personalidad y en su obra “Meetings with remarkable men”, que puede ser considerada una autobiografía psicológica, se refiere a sus peregrinajes y nos hace conocer algunos de sus acompañantes en esta singular aventura.
También habla de su incesante búsqueda de un real y universal conocimiento aunque nunca revela el secreto de las verdades descubiertas
Reapareció en Rusia en 1913 y se dedicó a enseñar sus teorías a varios grupos de discípulos en Moscú, San Petesburgo y Tiflis. De esta época data su encuentro con el matemático ruso P.D.Ouspensky, quien llegó a ser su principal discípulo y el más lúcido exponente de sus doctrinas.
Posteriormente, huyendo de la revolución rusa, se refugió en Constantinopla, y en 1922, después de visitar Inglaterra, fundó en Avon (Fontainebleau), cerca de París, el Instituto para el Desarrollo Armonioso del Hombre, que fue visitado por muchas personalidades deseosas de conocer al extraño filósofo.
Viajó después a Estados Unidos para difundir sus teorías y organizar una filial para el instituto. A su regreso, en 1924, sufrió un serio accidente automovilístico que le hizo abandonar sus planes de impartir enseñanzas personales. Redujo entonces la actividad del Instituto y se dedicó a escribir algunos trabajos.
Su sistema, llamado el “Cuarto Camino” (para distinguirlo de los tres caminos de desarrollo que considera tradicionales: el fakirismo, el monástico y el yoga), pretende actuar simultáneamentesobre los aspectos físico, emocional y mental. En su parte práctica comprende métodos psicológicos rudos y penosos entrenamientos que incluyen danzas derviches del Asia Central, pruebas de respiración y difíciles posturas.
El ocultista más extraño del siglo XX falleció el 29 de octubre de 1949 en París, Francia. |