Hay quien a estas alturas, sigue creyendo que lo que le sucede en la vida es fruto de la casualidad, de buena o mala suerte, o de los insondables designios de la providencia…

Que piensan que la vida es injusta con ellos, que no se les valora en la medida de sus méritos, que nadie les ha dado las oportunidades que se merecen y que a los demás todo les ha resultado mucho más fácil.

Personas para quienes la "culpa " de cualquier situación personal o profesional, que les afecta negativamente, obedece siempre a causas o razones ajenas a su voluntad y a su comportamiento.

Sin embargo todo buen " buscador " sabe que la casualidad no existe y que casi nada de lo que nos acontece en la vida es fruto del azar, otra cosa es que desconozcamos a nivel consciente las causas profundas que determinaron en el tiempo y en el espacio que vivenciáramos una experiencia u otra.

Todo " buscador " sabe igualmente que la forma de afrontar la vida (con alegría o pesimismo) atrae a nuestro alrededor situaciones de similares características.

Porque en la vida en suma se recoge lo que se siembra y es importante que sepamos que esa siembra se realiza tanto con nuestro pensamiento como con nuestros actos ya que no en vano estos no son sino un simple reflejo o consecuencia de los primeros.

Y así acabaremos siendo conscientes de que en la obra de la vida participamos todos día a día siendo co-creadores de la misma, escribiendo nuestra propia historia y contribuyendo a escribir la de los demás, creemos pues el sendero que nos conduzca al futuro, que será no lo dudes, como tú quieras que sea.



ESTEBAN PEREZ