Despertando el Corazón de la Humanidad
Por Kate A. Spreckley
“Nuestro miedo más profundo no es ser inadecuados. Nuestro miedo más profundo es ser poderosos más allá de toda medida. Es nuestra luz la que más nos asusta. Nos preguntamos a nosotros mismos, ‘¿quién soy yo para ser brillante, hermoso, talentoso, fabuloso?’ En realidad, ¿quién eres para no serlo? Tú eres un hijo de Dios. Fingirte pequeño no sirve al mundo.”
Marianne Williamson
Traducción: Margarita López
Edición: El Manantial del Caduceo
www.manantialcaduceo.com.ar/libros.htmAgosto señala un período de grandes despertares y gran cambio a medida que experimentamos la energía del Eclipse Solar, el Portal Estelar 8:8 y el Eclipse Lunar.
Los eclipses siempre han sido indicadores de cambio y evolución, cambiando el inconsciente colectivo y trayendo esa conciencia más cerca de la superficie de nuestras mentes conscientes. Durante el momento de un eclipse hay un intercambio igual de energía que ocurre entre nosotros y nuestro Creador, fortaleciendo el vínculo entre los reinos Espiritual y físico.
La intensa energía de estos eclipses está creando una transformación de energía, profundo dentro de cada uno de nosotros. A través de esta transformación, el Corazón de la humanidad está despertando y estamos atravesando otro velo más de ilusión y alcanzando otra etapa de nuestra evolución cósmica. El aspecto Espiritual de la humanidad ahora está siendo liberado. Nuestras Almas están siendo purificadas, nuestras energías amplificadas, nuestros bloqueos revelados y limpiados todos los escombros de nuestro ser, lo que permite una rápida transformación, cambio radical, renovación y renacimiento. Es vital permanecer arraigados, concentrarnos en crear estructura y orden en nuestras vidas físicas y aún mantener nuestra apertura a nuestro Creador, el Gran Espíritu.
Este proceso de transformación es extremadamente poderoso y a medida que emerjamos de nuestras viejas heridas ganaremos una comprensión más amplia de nuestro futuro, liberando los patrones opresivos de nuestro pasado y, por tanto, haciendo posible para nosotros rendirnos suavemente a nuestro presente.
La alta energía de este momento está iniciando en nosotros un recuerdo y resonancia con la fuente de toda vida, amor y luz, nuestro Creador. A medida que empezamos a integrar esta conciencia en nuestra experiencia consciente, damos a luz un despertar de nuestro Cuerpo de Luz y nos reunimos con nuestro amado yo.
El amor por uno mismo es necesario si vamos a cumplir con nuestras responsabilidades y completar nuestro proceso de transformación y renacimiento. De niños nos amábamos a nosotros mismos, creíamos que éramos inteligentes, hermosos y merecedores de todo el amor y abundancia que este mundo tiene para ofrecer. Al crecer, la mayoría de nosotros aprendimos que estábamos equivocados y que éramos malos, nuestra inteligencia y belleza no fueron reconocidas. Se nos dijo que para sobrevivir esta realidad teníamos que ser como todo el mundo. Por tanto, cambiamos nuestras creencias y límites innatos y adoptamos los de nuestras familias, nuestras sociedades y nuestras culturas. Dejamos de amarnos y creer en nosotros mismos y permitimos que otros influyeran en nuestro camino.
Para nosotros deshacer este aprendizaje es fundamental que cambiemos nuestra relación con nuestro yo. Pues reconocer que nuestros patrones de creencias y disfunciones adoptadas son las que nos impidieron sentirnos conectados, aceptados, honrados y respetados, y reconocer y sanar estos aspectos heridos, es el viaje de regreso al amor por uno mismo.
Siempre encontraremos desafíos en nuestras vidas, lo que hace más fácil enfrentar esos desafíos es cómo los enfocamos. Cuando entendemos que la responsabilidad por los acontecimientos de nuestra vida recae sobre nosotros como individuos, estamos en condiciones de considerar nuestras acciones y cómo pueden afectarnos a nosotros mismos y a quienes nos rodean. Esta comprensión nos permite ser receptivos al Creador moviéndose dentro de nuestras vidas, abriéndonos a nuevas formas de pensar y permitiendo que viejos patrones de pensamiento se alejen.
Tenemos la capacidad para utilizar todos los recursos que están a nuestra disposición, nuestro potencial es ilimitado. Nuestra energía es ilimitada y nuestra capacidad para dominar nuestros recursos interiores nos permite continuar en nuestra misión con pasión, fe y esperanza.
Los paisajes de nuestras vidas están cambiando radicalmente y mientras poderosos mensajes de verdad, luz y amor emanan de nuestro Creador, se nos obliga a realizar una revisión y examinar nuestras vidas. El ritmo de la vida se está acelerando y todos tenemos la capacidad para actuar en estos niveles más altos pues la velocidad de nuestros pensamientos, hechos y acciones aumenta. Hay una tremenda fuerza e impulso a nuestra disposición, apoyándonos para lograr nuestros objetivos y seguir nuestra verdad.
Si vamos a tener éxito en cambiar nuestra realidad y en sanar nuestro mundo, necesitamos trabajar en equipo y apoyarnos entre nosotros. Al tener compasión por todos los seres vivos podemos reavivar la fuerza en nosotros mismos, nuestras comunidades y nuestras familias. Este es un momento de sanación bendita y un tiempo para compartir nuestra belleza en servicio a nuestro mundo.
El horizonte se está expandiendo ante nosotros y la verdad y claridad surgirán mientras tomamos un tiempo para contemplar y permanecer quietos dentro de los enormes cambios que se están produciendo. La comprensión del poder de nuestro propósito y nuestra capacidad de estar plenamente presentes pero aún infundidos con nuestro Espíritu Divino se está revelando. Antiguas enseñanzas están aportando nuevos niveles de estudio, iluminación y comunicación. Al dedicarnos a embellecer nuestra Tierra podemos explorar las enseñanzas de sabiduría que irradian desde el corazón y el alma de nuestra Madre Tierra.
Estamos aquí para tejer plenamente lo Espiritual junto con lo físico y es el momento de elegir seguir el camino de nuestras enseñanzas interiores y abrirnos a los misterios que están contenidos dentro. Se nos ofrecen formas superiores y más refinadas de comprender las leyes que rigen los misterios de nuestras vidas. Ya no estamos en manos de las limitaciones que anteriormente tenían control de nuestras almas y ahora podemos perdonar y sanar las heridas de nuestro pasado, liberando nuestros juicios y los puntos de vista limitados que tenemos.
Hemos sido iniciados y despertados y ahora es el momento de absorber la conciencia iluminada que está fluyendo a través de nuestras vidas. A medida que siguen el sendero de su caminar por la Tierra, sean conscientes de la luz que llevan dentro, vayan más despacio y abran la puerta a su destino.