JEERANG es un poblado tibetano, en Orissa, India. En el Sureste de Orisa, la costa central este del Estado, en el área
de Chandragiri del distrito de Gajapati, está ahora el hogar de
cerca de 4000 tibetanos que fueron desplazados por la ocupación
china del Tibet, a quienes el gobierno indio dio categoría de
refugiados al llegar aquí en 1966.
La vida no es fácil para ellos en una tierra tan diferente a la
suya, donde las temperaturas son a menudo 20 grados centígrados más
cálidas de las de su país de origen. Aún así, se las han arreglado
para hacer un lugar habitable para ellos.
Hay cinco principales poblados tibetanos en el área, en la que
Jeerang es el cuarto. Está situado a 7 km de la carretera principal
y conectada con ella por un camino bastante bueno para camiones y
autobuses, pero no circula por ahí ningún autobús de línea por no
ser rentable.
Jeerang es un pueblo remoto que se las arregla para proveer de
hogares a la gente y luchar en la adversidad con la ayuda de Rigon
Thupten Mindrolling, una institución monástica budista bajo los
auspicios del Terton Namka Drime Rimpoché, cuyo monasterio fue
inaugurado por Su Santidad el Dalai Lama. Su hijo mayor Yetrul Jigme
Rimpoché también juega un creciente e importante papel en el
desarrollo del monasterio y en los medios de subsistencia del
poblado. Ello ha merecido los elogios de las autoridades indias
locales y del gobierno tibetano en el exilio. Su éxito en el
proyecto de llevar agua al interior de las casas ha traído como
consecuencia mejores medios sanitarios y, consecuentemente, la
mejora de la salud, lo cual ha beneficiado a la comunidad de toda el
área.
En muchos sentidos, el pueblo es un lugar importante porque ayuda a
preservar una herencia cultural que está amenazada, sirviéndose de
muchos medios como, por ejemplo, las danzas monásticas anuales por
las que la gente de los alrededores del área, de otras partes de
India y del extranjero visita el lugar para ver lo que es una muy
desarrollada forma de arte.
Jeerang está abriendo sus puertas a visitantes extranjeros, algunos
de los cuales vienen a ayudar a la comunidad. Más personas podrían
venir para ayudar, por ejemplo en la escuela, que no funciona aún a
pleno rendimiento. Por esta razón los niños tibetanos no pueden ser
educados adecuadamente; de ahí que hay planes para construir una
casa de huéspedes donde acomodar a la gente dispuesta a ofrecer sus
conocimientos y habilidades.
También se necesita ayuda para construir un hospital para el
tratamiento de enfermos y para la erradicación de enfermedades,
tales como la malaria, una de las más severas que golpea esta área,
cobrándose muchas vidas.
Los habitantes de Jeerang, al igual que Yetrul Jigme Rimpoché piden
a hombres y mujeres que ofrezcan su ayuda para que Jeerang pueda
sobrevivir.
Ayudar, ¿cómo?El apadrinamiento es una forma de compartir no sólo los bienes
materiales que otros precisan, sino también de establecer una
relación personal entre el benefactor y la persona a quien se
ayuda. Mediante la correspondencia, en un inglés muy básico, se
puede llegar con el tiempo a desarrollar una amistad que resulte
gratificante y enriquecedora para ambos.
de niños
Cuando las necesidades básicas de vida son precarias, la educación de niños y niñas se resiente y tiene graves carencias por falta de medios: maestros cualificados, locales adecuados, material pedagógico, actividades deportivas, transporte escolar...
El fin que se persigue con este original sistema de apadrinamiento de un niño o niña es que éstos puedan aportar una cantidad que les permita recibir una educación de calidad dentro del pueblo, gracias a la asignación económica que el padrino o madrina le envíen periódicamente.
La cantidad mínima calculada para mejorar la situación individual del niño que lo necesite, y que pueda colaborar con la mejora de la escuela es de 23 € al mes. |
de ancianos
Si los niños son el futuro de un pueblo, los ancianos son su memoria viva. Ellos tienen la experiencia, la sabiduría. Ellos vivieron la tragedia de la ocupación de su país y guardan en su retina las atrocidades cometidas en aquellos años, y la muerte de padres, hijos, esposos, hermanos, amigos... Y todavía, después de tantos años de soportar el clima caluroso y húmedo del sudeste indio, sienten la nostalgia del aire fresco y puro de los Himalayas acariciándoles el rostro.
Muchos ancianos en los poblados de refugiados no tienen familia, están enfermos, tienen pocos recursos y algunos viven en unas condiciones de pobreza extrema. Necesitan ayuda.
El cálculo que se ha hecho para cubrir las necesidades de un anciano es de 23 € al mes. ¿Quieres apadrinar y hacerte amigo de un anciano o anciana? |
de monjes
Objetivos del apadrinamiento
El objetivo del apadrinamiento es garantizar los medios de subsistencia de los monjes durante su vida en el monasterio. Vuestra contribución ayudará a los monjes del monasterio de S.E. Namkhar Drimed Rinpoché y Gyetrul Yigme Rinpoché a hacer frente a los gastos de comida, alojamiento, ropa, material escolar y gastos sanitarios. De esta forma podrán consagrarse a la práctica espiritual sin tener que preocuparse de los aspectos prácticos de la existencia.
La importancia de la vida monástica en la comunidad tibetana La vida monástica desempeña un papel de vital importancia para el desarrollo del Budismo. Gracias al estudio cotidiano de los textos de práctica y de las oraciones, los monjes garantizan la preservación de la cultura y de la lengua tibetanas. Esta labor inestimable asegura la continuidad de las transmisiones que el maestro excelente, Padmasambhava, llevó al Tíbet y de esta forma, la preservación del profundo patrimonio espiritual tibetano.
Los beneficios de apadrinar un monje Los efectos benéficos de este tipo de apadrinamiento van más allá del buen karma acumulado gracias a una acción virtuosa; ayudar a un monje es como arrojar una piedra a un estanque tranquilo: la onda crece y se expande de forma ilimitada. Os comprometéis a ayudar a una persona que ha dedicado su vida entera al Dharma y al servicio de los demás; los beneficios de un tal acto son inconmensurables.
Además, gracias a este apadrinamiento, establecéis un vínculo con la comunidad monástica que hace que vuestra vida, tanto en el plano espiritual como material, sea receptiva a los efectos positivos de las prácticas y los rituales del monasterio.
La situación actual El monasterio de Rigon Thupten Mindrolling en Orissa, India, recibió en octubre 2002 a un centenar de monjes provinientes de la región del Himalaya . Las familias y personal docente, al constatar el tremendo desarraigo cultural y espiritual que sufre actualmente la nueva generación debido a la ausencia de un polo cultural cercano, pidieron ayuda al monasterio de S.E. Namkhar Drimed Rinpoché y Gyetrul Yigme Rinpoché en Orisa, India.
Sin embargo, los medios del monasterio son escasos y la infraestructura inadecuada para hacer frente a la llegada repentina de la nueva generación de monjes.
Por esta razón, Gyetrul Yigme Rinpoché ha pedido a los centros de Padma Ling en Europa que se establezca un programa de apadrinamiento de monjes. Vuestra contribución mensual de 23€ permitirá a la comunidad monástica de Rigon Thupten Mindrolling en Orisa, India, crecer y desarrollarse de la mejor forma posible para el beneficio de todos los seres.
Palabras de S.E. Namkhar Drimed Rinpoché sobre la vida monástica « El Buda-Dharma es la fuente última de felicidad y de ayuda para todos los seres; para preservarlo, debemos practicar y conservar el valioso linaje de sabiduría viva. Para ello, la vida monástica es imprescindible. Un santuario tal tiene la virtud de irradiar energía positiva y de fomentar la paz, la armonía, la felicidad y la libertad en el universo entero. El monasterio es un lugar privilegiado para experimentar la « tradición viva » del Budismo Tántrico; quienquiera que entre en contacto con ese lugar gozará instantáneamente de un sentimiento de paz, de serenidad, de compasión y de sabiduría y será capaz de invocar en su interior los recursos espirituales innatos y necesarios para el establecimiento de una base espiritual auténtica ».
Namkhar Drimed Rinpoché
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Padma Ling coordina los apadrinamientos de niños ancianos y monjes y
establece el primer contacto entre el padrino y su ahijado. Una vez
la relación está creada, se hacen los trámites para que la
asignación llegue por vía postal o bancaria directamente a la
familia del niño/a, al anciano/a o al monasterio al que el monje/a
pertenece. Para evitar en lo posible los elevados gastos bancarios,
las asignaciones deberán hacerse trimestral, semestral o, mejor aún,
anualmente.
S.E. Yetrul Jigme Rimpoché supervisa y tutela el conjunto del
proyecto y el seguimiento de los contactos.
Los que deseen aportar una asignación para las instalaciones y
necesidades generales de los poblados o deseen apadrinar a un
niño/a, anciano/a o monje/a, pueden dirigirse por correo electrónico
a: