Esa vibración divina que emite alegría, paz y vida y que lo abarca todo. Reiki te abre al amor, la energía sanadora por excelencia, y te conduce hacia él. Reiki ha sido definido como una energía semejante a las ondas de radio, pudiéndose aplicar con eficacia, en contacto directo o a distancia. Es una energía inofensiva, sin efectos secundarios, es práctica, segura, eficiente y compatible con cualquier otro tipo de terapia.
También es definido como energía-Luz, que penetra en el organismo a través de los siete chakras principales, localizados desde la base de la columna a la parte superior de la cabeza, y que la distribuyen a todo el organismo, reequilibrándolo.
En una sesión de Reiki, el practicante de Reiki impone sus manos sobre el cuerpo del receptor (que no ha de sacarse la ropa) y deja fluir. La cantidad de energía recibida por el paciente está determinada por el propio paciente, el terapeuta reikiano se limita a dirigir la energía haciendo de intermediario entre éste y el proveedor -el Cosmos- que la entrega de forma ilimitada.
¿Qué nos aporta el Reiki?
La falta de salud no se muestra sólo en nuestro nivel físico (enfermedades); también se refleja en el nivel emocional, mental y espiritual.
Reiki alivia los dolores físicos pero considera a la persona de forma global en los cuerpos físico, emocional, mental y espiritual, de manera que, no solamente se dirige a suprimir la patología, sino también a recuperar el estado natural de equilibrio que produce bienestar y felicidad. Esto resulta esencialmente importante para poder lograr un cambio en tu interior y en tu entorno más inmediato. La vida nos pone a prueba cada día y el Reiki nos ayuda a afrontarla con mayor equilibrio.
La poderosa Fuerza Vital Universal “REIKI” fomenta tu propia individualidad y te ayuda a encontrar tu propio camino de evolución; pero siempre eres tú mismo quien debe recorrerlo. El REIKI, las técnicas de meditación o relajación, como así también tantas otras formas de medicina natural, solamente pueden ayudarte a VIVIR MEJOR, pero no pueden sustituir a la vida misma; es por eso que quien no acumule su propia experiencia, no podrá transformarse jamás, ni crecer, ni evolucionar.
EFECTOS DEL TRATAMIENTO DE REIKI
Es por todo ello que el objetivo final consiste en que el hombre, desde la esencia de su propio ser, se acerque cada vez más a su propio Dios Inmanente y de esa manera encuentre el equilibrio, la paz interior, la armonía, la salud perfecta y el bienestar general.
La historia del REIKI es la historia del redescubrimiento de la aplicación práctica de esta todopoderosa Energía Divina en los tiempos que corren. Es una historia de personas normales, comunes y corrientes, cada una con sus respectivos problemas, preocupaciones e interrogantes, pero cada uno contribuye a su manera para que la Luz y el Amor Divino tengan mayores posibilidades de expandirse y llegar a todos los habitantes del planeta. Cada uno da lo mejor que tiene dentro de sí mismo; y de ese modo hacen posible que este saber milenario sea transmitido de unos a otros.
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