GRACIAS, SEÑOR DIOS Gracias Padre porque eres en mí, Presencia de Vida Perpetua. Desde mi silencio siento como mi Amor te busca y se funde con el Tuyo, y en este maravilloso todo y uno, la luz, la paz y la armonía nos acercan infinitamente. "Sé que no hay nada que pueda separarnos porque soy parte de Ti, esa parte que siempre cuidas y velas con esmero, paciencia, sabiduría, perdón y misericordia. ¡Cuántas veces he sentido tus manos levantándome cuando he estado caído! Y sé, que habrás de levantarme cuantas veces sean necesarias, porque confías en mí y en que saldré siempre adelante. Gracias por el Amor-Hijo hecho carne, por el Espíritu que nos cubre, envuelve y alimenta con Tu Verdad a cada instante. Humilde y rendido ante Tu Presencia recibo con fe lo que en mis manos pones. Acepto lo que debes darme y es así en mí, Tu Voluntad, ahora y siempre. Amén |