Primero vamos a hacer un ejercicio de ducha Reiki, entonces, digo empiezo ducha Reiki ahora, extiendo los brazos lo más arriba que puedo, los estiro, me conecto con la plenitud de la energía Reiki, trato de sentir en las palmas de las manos esa energía. Ni bien la siento, empiezo a llevar las manos hacia mi coronilla; como si ingresara esa energía mientras inhalo, paso las manos por la frente en tanto retengo el aire, por la garganta y, cuando llego al corazón, muy despacito voy exhalando lentamente, hasta llegar a la zona del ombligo donde separo las manos y hago como que la energía va a las plantas de los pies, a través de las piernas.
Descanso un momento y luego, nuevamente voy hacia arriba, a la plenitud de la energía Reiki, me conecto, ahí inhalo, llevo las manos hacia el cuerpo, cuando llego a la altura del corazón simplemente empiezo a exhalar, dejando deslizar esta energía por las piernas. Por último, inhalo, nuevamente, cuando llevo las manos hacia la cabeza, dejando todo a la altura del corazón y ahí exhalo hasta que salga por la planta de los pies. Ahí vuelvo a la posición gassho. Trato de llevar la atención a los dedos medios y comienzo el envío de Reiki a distancia.