En un corazón puro existen cosas buenas; pero en un corazón confuso sólo existen malas cosas. En un corazón puro hay amor y cariño; pero en un corazón confuso hay odio y rencor. En un corazón puro hay compasión y caridad; pero en un corazón confuso sólo existe coraje y envidia. En un corazón puro hay bondad y humildad; pero en un corazón confuso hay maldad y soberbia. En un corazón puro hay sólo verdad y fidelidad; pero en un corazón confuso sólo hay mentira y traición. Un corazón puro está limpio y libre de culpas; pero un corazón confuso está sucio y lleno de culpas. En un corazón puro sólo Dios existe y gobierna; pero en un corazón confuso sólo lo acosa el maligno. Así es que; ¿quieres tener un corazón puro o un corazón confuso? sólo tuya es la elección.
Un corazón puro siempre será bienaventurado; pero un corazón confuso siempre perverso será.
Un corazón puro se llena de las cosas de Dios; pero un corazón confuso se llena de cosas que hacen daño.