Mal de amores, problemas en la escuela o el trabajo, caos familiar... en fin ¿todo parece sucederte sólo a tí?
Detenerte por lo menos cinco minutos para escuchar lo que le dices a los demás, es un ejercicio que bien vale hacer para darte cuenta si lo único que sale de tu boca son quejas sobre la mala suerte que te acompaña.
Cambiar el estilo de tus comentarios requiere de constancia pero los resultados son muy efectivos.Si puedes graba con tu celuar una de tus conversaciónes y notarás el estado de ánimo que tienes.
Pensar positivo no es suficiente, también requieres de hablar en positivo y eso implica pensar una, dos o las veces que sea necesario antes de comunicarte.
Procura que tus expresiones sean optimistas y notarás los resultados.