La intuición es la sensación de saber algo pero ignorar cómo lo sabemos. Es una capacidad que todos poseemos. La práctica ayuda a desarrollarla.
Actúa en 4 planos:
1. Voz interior. Escuchamos una voz interior que se comunica con nosotros de manera amorosa y compasiva. Para estimularla conviene preguntar ¿qué debo hacer en este momento?. Quedarse en silencio y escuchar. Una vez recibida la respuesta, escribir en el registro diario 3 pasos en esa dirección.
2. Sueños. En el momento del sueño nos liberamos de inquietudes y ansiedades pero la mente sigue funcionando. Es un momento ideal para recibir intuiciones, pero como el que trabaja es el hemisferio derecho del cerebro, la respuesta viene en la forma de símbolos. Para responder una pregunta mediante la intuición del sueño conviene formular una pregunta antes de dormir (por escrito y verbalmente). A la mañana, preguntarse ¿cuál fue la respuesta a mi pregunta?, el primer sueño que llega a nuestra memoria es el que responde.
3. Emociones. Muchas veces la mejor manera de decidir entre varias alternativas de respuesta es aquella que nos hace sentir mejor. ¿Está bien si hago esto? Y verificar las sensaciones a la altura del corazón.
4. Sensaciones físicas. El estómago, el sistema nervioso, la garganta, son áreas que reflejan la respuesta de la intuición. Muchas veces decidimos no ir a un lugar porque nos hace sentir mal físicamente. Eso está bien, es la respuesta de la intuición. Pero atención, porque también podría ser un miedo producido por el ego. Antes de tomar una decisión partiendo de sensaciones físicas conviene hacer alguna meditación o visualización.
CLAVES PARA DESARROLLAR LA INTUICION
1. Cada mañana tómate un tiempo para meditar. Esto prepara tu conciencia para recibir información
2. Cuando sientas que no sabes hacia donde ir, cambia tu rutina. Da un paseo, llama a alguien a quien hace mucho que no ves, come algo fuera de lo habitual, etc.
3. Juega con los sentidos. Ante una situación de decisión difícil, prueba preguntándote "a que huele?", "que gusto tiene?", "que sonido hace?", etc.
4. Aprende a identificar como se siente un SI en el cuerpo, y como se siente un NO
5. Imagina como se siente en el cuerpo la situación.
6. Evalúa el nivel de satisfacción que te proporciona cada decisión.
7. En caso de tener que decidir entre dos opciones imagina que son dos puertas. Trata de ver como son las puertas y que hay detrás.