Romero o tomillo, repelentes naturales de insectos
Los aceites esenciales encapsulados controlan la proliferación de
microorganismos, son antimicrobianas y actúan como repelente de
insectos.
Ingredientes naturales como el romero, el tomillo, el limoneno, el
clavo o la canela podrían utilizarse como agentes activos
antimicrobianos y repelentes de insectos más sostenibles y saludables en
las industrias de alimentación, calzado y plástico.
Estos principios activos
naturales con propiedades antimicrobianas y/o repelentes de insectos han
sido seleccionados con la finalidad de obtener microcápsulas multifuncionales
de elevada resistencia mecánica y térmica, que puedan ser usadas en
procesos industriales de extrusión de alimentos, plásticos y de calzado.
Los
aceites esenciales y sus componentes tienen una gran relevancia como
agentes potenciales para controlar la proliferación de microorganismos,
debido a sus propiedades tanto antimicrobianas, frente a hongos, levaduras y bacterias, como repelentes de insectos y por su baja toxicidad.