Eolo era el dios de los vientos en la antigua
Grecia y tenia el poder de utilizar los vientos todos
juntos o de uno en uno para hacer el bien o causar
desastres en la tierra. El viento influye en la meteorología
de cada región pues puede aumentar o disminuir
la temperatura, la humedad y las lluvias.Pero el
viento no solo influye en la meteorología, también influye en nuestra
salud pues los días de fuerte viento todos nos volvemos
un poco irritables y un poco depresivos.
Hipócrates, que es el padre de la medicina,
asoció la meteorología a las enfermedades y aseguró que existía
un tipo de viento denominado Austro que podía
provocar pérdida de audición, de vista y de estado de ánimo.
En las regiones del planeta donde el viento sopla muy fuerte,
las personas suelen tener problemas de circulación,
problemas de ansiedad, problemas respiratorios y
problemas cardiovasculares.
El viento sanea la atmósfera, remueve el aire, dispersa
humos y reduce el poder calorífico de los rayos del sol.
Pero los efectos del viento son distintos según
la dirección en que sople.