Aumentó
el índice de reciclado de plásticos en Argentina, factor fundamental
en la economía circular
241.000 toneladas de plástico fueron reciclados y recuperados en Argentina durante 2018, lo que representa un 26% del
total de reciclado y valorización sobre los envases, embalajes y packaging plásticos.
Ecoplas, Asociación Civil sin fines de lucro, presentó el nuevo índice de reciclado plástico donde reveló que en 2018 se
recuperaron 251.000 toneladas de plástico, en las que 241.000 toneladas son de reciclado mecánico y 10.000
toneladas como recuperación energética en hornos de cemento, dando como resultado un 26% de valorización
sobre envases, embalajes y packaging plásticos. Este volumen se ha cuadruplicado en los últimos 15 años.
Este resultado favorable, corresponde con el trabajo de capacitación y educación que Ecoplas viene desarrollado a
través de sus planes educativos, amplificando el contenido científico que imparte tanto en escuelas y universidades
como también a recuperadores urbanos y a la sociedad en general para promover el consumo responsable y el reciclado
del plástico que, tras su separación, se puede convertir en múltiples productos: bancos de plazas, bolsas de consorcio,
caños, madera plásticas, piedras plásticas, postes de viñedos, durmientes de ferrocarril, entre otros.
En este contexto, cobra más importancia una ley nacional de Gestión de Residuos de Envases o
de Responsabilidad Extendida del Productor, que acompañe los desafíos que poseen los plásticos y
los otros materiales que se encuentran en la corriente de residuos, a lo largo de su cadena de valor y
ciclo de vida, ya que “la misma colaboraría en aumentar las tasas de reciclado y la disminución de material
que es depositado en rellenos sanitarios, desperdiciando la oportunidad de que entren en la economía
circular. Más aún, si consideramos que la industria plástica recicladora tiene un 60% de capacidad
ociosa, por la falta de política pública y la baja separación de residuos que existe en el país”.
Para que estas cifras sigan siendo aún más significativas, hay que continuar por el camino de
potenciar la economía circular, promoviendo una gestión inteligente de los residuos y el uso del
recurso plástico post consumo a través de las 4R: reducción, reciclado, reutilización y recuperación
mediante la revalorización del recurso.