** Deshacer Errores **
Nosotros nos mostramos incapaces de poder corregir nuestro propio error en el nivel fundamental en que éste es cometido. ¿Cómo pues íbamos a poder corregir a otros?
Podemos, no obstante, ver a los otros verdaderamente en su sentir luminoso, puesto que nos es posible vernos a nosotros mismos verdaderamente en el nuestro. Nuestra función no es cambiar a los otros, sino simplemente aceptar Aquello que de ellos emana tal como es. Sus errores no proceden de esta sublime Verdad que mora en ellos, y sólo lo que es Verdad en ellos es Verdad también en nosotros. Ni sus errores ni los nuestros pueden cambiar esto, ni tener efecto alguno sobre la Verdad que mora en todos y en todo.
Percibir errores y reaccionar ante ellos como si fueran reales, es hacer que sean reales para nosotros. Y no podremos evitar las consecuencias de esto, no porque vayamos a ser castigados por ello, sino porque estaremos entonces siguiendo al guía equivocado, y, por lo tanto, nos extraviaremos peligrosamente.
Los errores que los demás cometen no son ellos quienes los cometen, tal como no somos nosotros, los que cometemos los nuestros. Consideremos reales los errores y nos habremos hecho un gran daño a nosotros mismos.
Si deseamos en verdad encontrar el camino y seguirlo, hemos de ver sólo la Verdad a nuestro lado, pues Ella camina siempre junto a nosotros. El luminoso Espíritu en nosotros nos permite pasar por alto tanto los errores de ellos como los nuestros, pues, la Verdadera Corrección, procede del Amor, y el Amor jamás opera aislada o parcialmente, sino que nos incluye a todos y a todo.
Del Granero de las Grandes Obras de Luz… (UCDM)