Yo... yo te he dado esta tierra quiero que veles por ella que la cuides que protejas su corazón Yo solo te pido que vivas respetando la vida esta será tu misión esta será tu misión No... no evadas más tu destino debes seguir el camino para el que el hombre nació Si en tu desdicha abrazas la fuerza del corazón aunque te tienten hara tu fe fuerte a tu gran valor Si en tu desdicha abrazas la fuerza del corazón aunque te tienten hara tu fe fuerte a tu gran valor No... no caigas en el olvido porque tú has sido elegido y esta sera tu misión Si en tu desdicha abrazas la fuerza del corazón aunque te tienten hara tu fe fuerte a tu gran valor Si en tu desdicha abrazas la fuerza del corazón... Hoy en ti debe imperar la razon aunque agotes la llama de tu vida ten valor se fuerte en tu corazón No... no pierdas la esperanza y veras cumplir tu promesa y podras de nuevo ver la luz Volveras a ver la grandeza de esta tierra y de su cielo azul
A mí en cambio, no me importa mucho el ritmo sino la letra. Y esta
canción me marcó mucho porque me mostraba el mundo en el que vivo. Y como una
madre no hay nada…
LETRA: HIJO DE RAMERA
(MANOLO GALVÁN)
Madre hoy no me levanto, no quiero ir a la escuela
que estas diciendo mi niño y a santo de que te niegas
ayer Pedro el del alcalde me llamó hijo de ramera.
La madre queda pensando
en recuerdos y en vergüenzas
sabía que pasaría lo sabía con certeza.
Hijo debo contarte una historia que pasó
hace unos años muy cerca.
En un pueblo junto a este hubo una hermosa doncella
que tenía 15 años y una belleza muy fresca
se bañaba junto al río en el rincón de la alberca.
Un día tres mozos llegan para sin ser vistos verla
se excitan ante esa flor rebosante de pureza
y entre los tres y a la fuerza destruyeron en la niña
la más grande de sus prendas.
Y de aquel salvaje acto lleno de horror y violencia
saliste tú mi buen niño para alegrar mi tristeza
sólo viví para ti, no me entregue fue a la fuerza
y si eso es una ramera que venga Dios y lo vea
vete a la escuela mi niño, pero vete sin vergüenzas
con la cabeza bien alta y subidito a la acera.
Sí madre voy a la escuela y si a Pedro se le ocurre
le escupiré en la cara.
Madre muchas gracias por ser una madre entera.