Bueno corazón, vamos por partes…

Primero que nada me preguntas qué conozco yo sobre el astral y cómo se involucra en nuestros procesos.

Creo que antes de eso, he de hacerte saber cómo funciona todo esto y tal vez entiendas parte de lo que están viviendo esos chicos y porqué…

 

Verás, a través de los miles y miles de años que hemos experimentado tantas cosas, hay una parte de nuestro Ser que ha asumido cosas que no eran suyas. En cada instante de nuestras aventuras estelares de todo tipo, hemos acaparado infinidad de situaciones, que como energía que son, han pasado a formar parte de nuestro modo de sentir. Es un bagaje que algunas veces resulta incómodo de llevar, porque portamos una carga no resuelta. Para que me entiendas mucho mejor, sería algo así como si nosotros fuéramos una especie de gusano gigante, que se arrastra por varios caminos diferentes y en cada uno de esos caminos se le pegan al cuerpo diferentes materiales que se hallan en el suelo o en a su alrededor.

Se va mojando, va pasando calor, otras veces se enfría en demasía… Poco a poco eso va minando su carácter y su personalidad cambia. Ese enorme gusano ahora ya no es el mismo, y si a eso le añades que las ramas y hojas, piedras, telarañas y otros objetos que se le han pegado al cuerpo, le dan un aspecto feroz, se diría que ese enorme gusano ahora parece un dragón horrible y malencarado.

Ha pasado tanto tiempo, que ya ni el mismo recuerda cómo fue en su principio al empezar a caminar por esos lugares que ha visitado.

Ahora imagina que tiene un momento de lucidez y sueña que una vez no fue así como es ahora, pero no sabe precisar en qué momento, ni dónde…

Sin embargo se encuentra con un gusano que comienza y que no está todavía muy ducho en las experiencias que él ha atravesado. Ese gusano novato le recuerda a algo pero no sabe exactamente a qué ni a quien. Sin embargo se acerca a él movido por la curiosidad. Y aunque sus aspectos externos son diferentes. A medida que camina  juntos, se dan cuenta de que sus sonidos, sus pensamientos y sus gestos son casi idénticos, excepto como digo su aspecto exterior. Lo único que les diferencia a parte del aspecto y de la experiencia vivida, es que el viejo tiene en la frente una extraña figura que son tres círculos que contienen dentro un triángulo. Ninguno de los dos sabe lo que significa, uno porque lo ha olvidado y el otro porque apenas si sabe de nada de lo que le rodea.

Pronto se hacen amigos. El joven e inexperto gusano porque entiende que necesitará la experiencia del gusano-ogro que camina junto a él; y el gusano-ogro porque entiende que si sigue la marcha dejándose acompañar por el imberbe es posible que éste le ayude a recordar alguna cosa que le sea crucial para su estabilidad emocional; pues lleva mucho tiempo solo y no ha encontrado una alegría por la que vivir.

Te cuento este relato inventado para que me sigas y entiendas a dónde quiero ir a parar.

El gusano novato poco o en casi nada puede ayudar al viejo y cansado gusano ya que carece de vivencias; pero le sirve como referencia de lo que una vez fue y apenas recuerda de sus inicios.

El viejo gusano en cambio ahora que camina con el novato, observa cómo cada día absorbe lo que le se le va pegando y comienza a revivir lo que él ha experimentado.

Así que ahora se ocupa de decirle al novato lo que tiene o no tiene que hacer para que nada que no es suyo se le pegue. Así que con la ayuda de la experiencia, el novato no solo va adquiriendo sabiduría, si no que permanece inalterable en su aspecto externo, porque se cuida muy mucho de que algo se le pegue.

Una mañana después de despertarse, a la salida del sol, el que era el gusano novato ve que está solo y no entiende qué ocurre. Rápidamente se ocupa de buscar por el camino a su amigo y compañero, pero no responde a sus llamadas…

Cuando decide volver sus pasos atrás en busca de alguna pista que le aclare lo sucedido con su amigo, observa que ahí tirado en el camino hay un fardo de material extraño. Al acercarse a ver qué es, reconoce la piel y el pelo lleno de materiales de basura que había pertenecido a su viejo amigo. Así que rápidamente comienza a sospechar que alguien lo ha devorado y solo ha dejado sus deshechos exteriores no digeribles.

Durante algunos días llora la ausencia de su amigo, pero al final decide que debe seguir adelante aunque sea a solas. Se ha convertido en un gusano sabio pero también impecable en su aspecto y eso se lo debe a haber estado acompañado un tiempo, de alguien que aunque no ofrecía la mejor de las caras, al menos sí que fue un gran instructor.

La tristeza dejó paso al agradecimiento y a la aceptación de todo lo vivido.

Y así durante un espacio de tiempo sin precisar fue adquiriendo fundamentos para que un día señalado empiece a emprender el camino de vuelta hacia lo que siente que fueron sus inicios.

Una vez que regresa, todos los gusanos de la región de donde partió un día lo saludan y lo vitorean reconociendo en él, al joven que un día se alejó a vivir la vida que quería vivir. Celebran una fiesta de bienvenida y le dicen que será homenajeado por todos y que el Gran Gusano Maestro le hará una condecoración para que sea siempre admirado como un ser digno de servir de ejemplo.

Cuando llega el momento de la ceremonia, el gusano homenajeado observa con  gran emoción que el Gran Gusano Maestro lleva en su boca a su oído y le dice: ¿cómo ha ido tu aventura hijo mío?

Éste responde sin pensárselo mucho: “Maestro, estoy muy agradecido por todo cuanto he podido vivir, pero no logro reponerme de un suceso que no termino de comprender. ¿Cómo es posible que habiendo caminado junto a alguien de tanta experiencia, se haya dejado matar y me haya dejado abandonado”

El Gusano Maestro, sonriendo con ternura, se quitó su sombrero de ceremonias y le mostró algo que tenía en su frente: tres círculos con un triángulo en el centro de ellos. Luego éste casi emocionado, le abraza con ternura y le dice al oído, ¿creías a que iba a dejarte solo siempre?, nunca te he abandonado…

El novato repuesto de la sorpresa y lleno de alegría le preguntó: “¿entonces tú eras quien me acompañó por tanto tiempo? ¿Acaso no decías que no recordabas quién eras? ¿Me has estado engañando todo este tiempo?”…

No hay engaño hijo mío, eso solo existe en tu mente. Ni tu ni yo hemos abandonado nunca este lugar; esta ceremonia se debe a que has despertado del sueño de la dualidad y por ende la duda. Nada de que lo que crees haber vivido fue real, sino que ha sido proyectado desde lo que somos, mientras estabas sanando de la fiebre que te atacó cuando sentiste la duda y el miedo en ti.

“¿Y eso cuándo sucedió Maestro?”

Cuando no bastándote lo que eres y lo que representas aquí, quisiste sentir que podías ser otra cosa que te hiciera diferente…

“¿Y eso es algo prohibido Maestro?”

No amado hijo, eso es algo que ninguno de nosotros nos hemos atrevido a hacer, porque eso significaba manchar nuestra energía y vivir cosas que no nos atrevíamos a afrontar. Por eso este homenaje amado, porque si no hubiera alguien como tú en la Creación, ni tú ni nosotros estaríamos completos.

Afrontar la dualidad significa aceptar las reglas de un juego que nunca es fácil de jugar, porque se requieren muchos tableros y muchas reglas que nadie conoce.

En nuevo para todo Ser y por ende uno de los mayores peligros que tiene es quedarse atrapado en alguno de los tableros. El triunfo corresponde a quienes logren saber estar en perfecto equilibro, no dejando que aquello que no es suyo ni forma parte de su naturaleza les cambie, pero al mismo tiempo les suministre la suficiente experiencia como para poder contarlo.

Lo Neutro, el equilibro, es lo que produce la sabiduría en cada Ser. Identificarse con lo que te rodea en cada viaje, solo te conduce al espejismo de ti mismo.

Camuflarse, involucrarse, mientras vives y aprendes está bien; pero tienes que saber permanecer impermeable a todo cuando ha pasado por ti… ese es el Secreto.

 

La garantía de estos chicos que han puesto en tu camino, es que tú permaneces despierta y sabes discernir que nada, ni el astral, ni lo terreno forma parte de vosotros. Ellos necesitan resolver algunas cuestiones que dejaron pendientes en el astral. Te expliqué muchas veces que en el astral cumplimos procesos que aquí resultarían imposibles. Os puse el ejemplo de dos vecinos que estando casados y con familia, ambos se dan cuenta de que cada vez que se encuentran en el ascensor necesitan mirarse a los ojos y ya no ocultan lo que sienten. Pero ambos saben que en sus vidas cotidianas no pueden dar rienda suelta a su enamoramiento porque ambos tienen procesos y responsabilidades contraídas con otros. Sus respectivas familias. Y les necesitan. Así que hace uso de un privilegio que da el libre albedrío y las múltiples aulas de aprendizaje que ha dispuesto el Padre: El Astral.

Allí puedes recrear cosas pendientes que no van a marcar tus cuerpos emocionales, pero que le van a permitir a tu cuerpo mental comprender situaciones.

Así que ambos enamorados tienen allí su relación, aunque sea esporádica y dan rienda suelta a lo que deseaban vivir y no podían. Una vez satisfecha su curiosidad y experimentado su deseo, se dan cuenta de que es más fuerte el proceso de encarnación y karma, que un sentimiento repentino, que no era otra cosa que el amor de unos lazos anteriores que les hicieron “reconocerse” en la tercera.

Cuando te enamoras de alguien en la tercera tenga la edad que tenga en ese momento, en realidad ocurre que las auras se reconocen en su frecuencia vibratoria y quieren sentir y recuperar un momento de sus vidas anteriores que un día les hicieron interactuar juntos. Y eso es bueno, pero eso no detiene el karma o proceso elegido en esta estadía en las que estamos.

Poder ayudar a quienes aún tienen sucesos que resolver en el astral es algo que te viene dado porque posees herramientas que te permiten hacerlo. Pero debes de ser como ese Maestro sellado en su frente dice: “Neutro, equilibrado, sabiendo en todo momento que nada, ningún decorado de aquella obra en la que intervienes es real ni te pertenece. Permanecer inalterable o como hacen los delfines, cuya piel está “engrasada” para que todo les resbale incluida el agua donde viven. Por eso ellos solo entienden una cosa: jugar mientras se vive y se aprende”…

Tienes que estar ahí donde se te necesite como maestra, pero siempre sabiendo que tú ya has pasado por todo eso antes y que no eres sino la garantía de que ellos no se quedarán aprisionados por sus elecciones. Si tienen “batallas virtuales” que resolver adelante, que disfruten y que lo hagan en libertad.

Y si me preguntas ¿por qué hay ahora otros que se añaden a tal experiencia?, es porque entienden sus Seres que es “un gran atajo” que han de aprovechar. Pues dentro de escasos meses, días, años (no entraré en fechas), se habrá terminado esta forma de aprender. Ya no será necesaria, ni requerida, porque el astral tampoco será lo que ahora creemos que es…

Respecto a los pactos de los que me hablas, son pactados entre los Seres. No hay nada real en ningún conflicto entre razas, civilizaciones, o entidades…

El único conflicto que verdaderamente se da es el que tiene cada Ser consigo mismo porque le asaltan las dudas, el miedo y el afán de experimentar la separación. Sin embargo es un conflicto sagrado porque permite hacerse sabios y trascender al amor incondicional.

El único conflicto es la resolución del YO SOY…  pero eso solo se entenderá cuando nuestra consciencia se abra del todo, no ahora mientras “jugamos”.

A tu pregunta de si pueden intervenir otros en cualquier aventura astral por supuesto que sí. Se puede hacer por empatía, se puede hacer por pedido expreso, se puede hacer por karma, se puede hacer por lo que te digo ahora, porque no da tiempo a resolver karmas aquí que requieren de una vivencia que aquí ahora mismo no puede darse. Por ejemplo: una batalla entre dos reinos que defienden distintos polos que sea rápida y que traiga un aprendizaje. No, no da tiempo ya…

Hay una cosa que sí que es cierta y no hicimos. Nosotros como grupo quisimos comprometernos a “pasar almas errantes” del astral a la luz, porque sabíamos que cuando se atraviese el cinturón de fotones, sus energías si no han logrado pasar, se convertirán en “remanente sideral” porque es energía que volverá al Padre Creador, y por ende perderá su identidad individual. Pero no lo hicimos. No nos hemos tomado esa actividad en serio. No hay tanto amor incondicional en nosotros. Preferimos seres de luz que digan cosas lindas, a seres perdidos, asustado o que se olvidan que ellos también son luz  y amor. No lo hicimos y ya no hay tiempo casi…

Cuando me preguntas si todo esto es ego, te diré que habrá que tener claro de una vez por todas que el intervenir en estas actividades de aprendizaje sea en el astral, en la tercera o en la estadía que sea, siempre ha de poder intervenir necesariamente el ego. El ego es un disfraz necesario. El ego también forma parte del Ser. Lo que ocurre es que el ego se potencia en estos juegos porque es necesario que se crea el protagonista ¿por qué? Pues porque si cada ser tuviera consciencia de quien verdaderamente Es, el ego no tendía razón de ser y por ende el juego perdería eficacia, ya que es como “conocer las respuestas del examen”…

El ego es una herramienta sagrada, tiene que estar ahí en cada experiencia y no debe ser eliminado como muchas filosofías propone, sino amado y enseñado.

Una vez que el ego cumple su función de disfrazarte en cada juego, luego hay que explicarle que debe apartarse porque ya no es necesario. Por desgracia, esa es la parte que más trabajo nos ha costado resolver jajajajaja…

Cuando te piden ayuda, estos u otros chicos, no es cuestión de que les dejes de lado y te apartes; eres una maestra aunque te cueste aceptarlo. Y tu obligación puesto que ya pasaste por ello aunque no lo recuerdes antes, es prestar auxilio espiritual a quienes requieren de tu sabiduría.

Y como dice tu amado Ramtha, “déjense de falsa modestia y pónganse a trabajar de una vez en aquello que son y que han venido a hacer. Y si no lo recuerdan o no quieren recordarlo, no se preocupen, ya iremos dejándoles sin nada que les distraiga, ya verán como “se ponen las pilas” de una vez.

Una última cosa que quiero decirte es que efectivamente muchos vienen del astral cansados, “heridos”, disgustados… pero eso no es malo; cuando eso ha sucedido es porque el ego ha perdido parte de lo que creía suyo y ahora se queja. ¿Conoces a los que están dejando de fumar recientemente? ¿Y a los que hacen dieta? ¿Sabes de alguno que sonría o no se encuentre mal?

Alguno habrá, pero esos son los menos. La gran mayoría nos sentimos estafados, aquí casi no tenemos ni trabajo y el que lo tiene lo está perdiendo. Y de allí venimos todas las noches cansados de trabajar y sin cobrar ningún sueldo.

¿Seguro que el Plan del Padre Creador Es Perfecto?