Tema anterior
EL DINERO Y LA ESPIRITUALIDAD... ¿COMBINAN?
Esta es la gran pregunta que todos los seres-humanos de bien nos hacemos ¿Cómo llevar nuestras vidas, el trabajo, nuevas ideas de la mejor manera sin que esta energía nos domine y seamos esclavos de ella?
Debemos partir de varios puntos, conceptos y observaciones para entenderlo, si los tenemos muy claros dentro de nosotros, podremos sentirnos muy tranquilos con respecto a la energía dinero, ella no nos dominará haciéndonos caer en la Ambición, porque seremos nosotros y no ella, la que manejará nuestra vida y nuestras necesidades.
“El dinero es una necesidad pero no es un fin”. Por lo menos partiendo de este concepto ya habremos dado el primer paso y el más importante. Si tenemos el equilibrio para colmar nuestras necesidades y sabemos sopesar en una balanza la importancia de ellas, entonces trabajaremos adecuadamente para conseguirlo, porque ganaremos el sustento midiéndolo en la proporción a la necesidad requerida. En pocas palabras, lo que deseo expresar, no es que debemos ser conformistas, si no, que tengamos el equilibrio adecuado a la necesidad dentro del sistema donde vivimos.
Pero la necesidad es diferente en los seres humanos – Ustedes dirán y se preguntarán - ¿Cómo sabemos cuál es la necesidad equilibrada y correcta? ¿Cómo sabemos si un servicio espiritual debe ser cobrado o no?
Si debemos o no cobrar por los “Servicios Espirituales” es algo que cada uno deberá analizar detenidamente en el fondo de su alma. El Ser espiritual tendrá que buscar las respuestas en su corazón y tener la seguridad, que su obra, acción y pensamiento, no perjudique las “Buenas Intenciones de la Espiritualidad”, puesto que muchas veces las buenas intenciones son mal entendidas y pésimamente canalizadas por el transmisor. El ser que quiere dedicarse a la transmisión de la espiritualidad, deberá preguntarse si su servicio espiritual es de: Donación por Amor o de Transmisión por Ganancia. Solo él y nada más que él, encontrará sus respuestas y dependiendo de ellas, se responsabilizará de su propia Causa y Efecto.
La energía dinero es un torrente muy fuerte y muy sutil, está ligado a nuestra naturaleza-ambición. Y es por esta razón que la espiritualidad no puede mezclarse con esta energía, pero si la puede controlar y equilibrar. El Ser que realmente se considera “Espiritual” debe escuchar su voz interior en lo más profundo de su alma y sentir realmente si su camino está correcto o no.
Por otro lado el gran problema de este planeta es el desequilibrio. Vemos necesidades, hambre y miseria y también demasiada exuberancia y despilfarro, lo cual nos hace pensar, que infinidad de necesidades son vanas y superfluas. Lo ideal sería que todos los seres humanos tuviéramos abundancia, mejor dicho, que todas nuestras necesidades básicas se encuentren cubiertas, así viviríamos en equilibrio y si vivimos con esta cualidad, podemos decir que estamos conviviendo lado a lado con nuestra espiritualidad.
Los seres humanos no podemos uniformizarnos, no es de nuestra naturaleza, ya que muchos de nosotros somos emprendedores, inteligentes, capaces y trabajadores. Por estas cualidades y por nuestro esfuerzo, merecemos cubrir nuestras necesidades básicas y si somos competentes, capacitados y hábiles, merecemos obtener ciertas compensaciones que nos harían vivir confortablemente. El problema no consiste en que tengamos más o menos dinero que los otros, el verdadero problema es: Cómo se obtiene el dinero y como se utiliza.
El verdadero desafío de todos los seres que estamos despertando, encaminándonos hacia la espiritualidad de nuestras vidas y que queremos ser personas conscientes, responsables, profundas y más, es confrontarnos cara a cara con experiencias y vivencias tan distorsionadas y desequilibradas, que terminan confundiéndonos y afectándonos interiormente. Tenemos que vivir dentro de un sistema y de un planeta que a muchos no nos agrada y a veces por este motivo, no sabemos cómo lidiar con el, ya que queremos ser justos con nosotros mismos y con todo lo que nos rodea.
Hoy en día nos tocó vivir en este tiempo y en esta realidad. Cada uno de nosotros tendrá que discernir, escoger y vivir, de acuerdo a sus habilidades psíquicas e intuitivas, formadas con nuestro propio discernimiento e inteligencia espiritual, debemos tomar cuidado con lo que escojamos o en qué dirección nos encaminamos. Por esta razón estamos recibiendo tanta información, porque nos encontramos en el límite de la razón y será nuestro Libre Albedrío que nos ayudará a seleccionar lo correcto o incorrecto de nuestra vida.
Si debemos lidiar con la energía dinero, hagámoslo lo más justo, razonable, equilibrado, íntegro, honesto, incorruptible y decente que podamos, ésta sería una forma de ir transformando nuestra realidad, de los otros y finalmente del planeta. Esta será nuestra fuerza espiritual, porque es el verdadero desafío que hoy nos pide el camino del espíritu, saber vencer las vicisitudes de una sociedad corrupta, alucinante y distorsionada como la que vivimos.
A pesar de todas las precauciones que tomemos, debemos estar atentos, porque la energía dinero muchas veces es: el lobo disfrazado de oveja, la mezquindad disfrazada de altruismo, la codicia disfrazada de bondad, la avaricia disfrazada de conocimiento, la energía ambición disfrazada de sabiduría… Solo el Conocimiento, Entendimiento, Amor, Equilibrio, Cordura, Sentido Común, Madurez y nuestra auténtica y verdadera “Espiritualidad Interior”, nos mantendrá alertas y despiertos para no caer en sus trampas sutiles…
Conversando con una amiga mía muy querida me dijo una gran verdad: “La vida me ha enseñado que hoy en día tener nuestras necesidades cubiertas lo podemos llamar… Abundancia… todo lo demás es exceso”.
Debemos partir de varios puntos, conceptos y observaciones para entenderlo, si los tenemos muy claros dentro de nosotros, podremos sentirnos muy tranquilos con respecto a la energía dinero, ella no nos dominará haciéndonos caer en la Ambición, porque seremos nosotros y no ella, la que manejará nuestra vida y nuestras necesidades.
“El dinero es una necesidad pero no es un fin”. Por lo menos partiendo de este concepto ya habremos dado el primer paso y el más importante. Si tenemos el equilibrio para colmar nuestras necesidades y sabemos sopesar en una balanza la importancia de ellas, entonces trabajaremos adecuadamente para conseguirlo, porque ganaremos el sustento midiéndolo en la proporción a la necesidad requerida. En pocas palabras, lo que deseo expresar, no es que debemos ser conformistas, si no, que tengamos el equilibrio adecuado a la necesidad dentro del sistema donde vivimos.
Pero la necesidad es diferente en los seres humanos – Ustedes dirán y se preguntarán - ¿Cómo sabemos cuál es la necesidad equilibrada y correcta? ¿Cómo sabemos si un servicio espiritual debe ser cobrado o no?
Si debemos o no cobrar por los “Servicios Espirituales” es algo que cada uno deberá analizar detenidamente en el fondo de su alma. El Ser espiritual tendrá que buscar las respuestas en su corazón y tener la seguridad, que su obra, acción y pensamiento, no perjudique las “Buenas Intenciones de la Espiritualidad”, puesto que muchas veces las buenas intenciones son mal entendidas y pésimamente canalizadas por el transmisor. El ser que quiere dedicarse a la transmisión de la espiritualidad, deberá preguntarse si su servicio espiritual es de: Donación por Amor o de Transmisión por Ganancia. Solo él y nada más que él, encontrará sus respuestas y dependiendo de ellas, se responsabilizará de su propia Causa y Efecto.
La energía dinero es un torrente muy fuerte y muy sutil, está ligado a nuestra naturaleza-ambición. Y es por esta razón que la espiritualidad no puede mezclarse con esta energía, pero si la puede controlar y equilibrar. El Ser que realmente se considera “Espiritual” debe escuchar su voz interior en lo más profundo de su alma y sentir realmente si su camino está correcto o no.
Por otro lado el gran problema de este planeta es el desequilibrio. Vemos necesidades, hambre y miseria y también demasiada exuberancia y despilfarro, lo cual nos hace pensar, que infinidad de necesidades son vanas y superfluas. Lo ideal sería que todos los seres humanos tuviéramos abundancia, mejor dicho, que todas nuestras necesidades básicas se encuentren cubiertas, así viviríamos en equilibrio y si vivimos con esta cualidad, podemos decir que estamos conviviendo lado a lado con nuestra espiritualidad.
Los seres humanos no podemos uniformizarnos, no es de nuestra naturaleza, ya que muchos de nosotros somos emprendedores, inteligentes, capaces y trabajadores. Por estas cualidades y por nuestro esfuerzo, merecemos cubrir nuestras necesidades básicas y si somos competentes, capacitados y hábiles, merecemos obtener ciertas compensaciones que nos harían vivir confortablemente. El problema no consiste en que tengamos más o menos dinero que los otros, el verdadero problema es: Cómo se obtiene el dinero y como se utiliza.
El verdadero desafío de todos los seres que estamos despertando, encaminándonos hacia la espiritualidad de nuestras vidas y que queremos ser personas conscientes, responsables, profundas y más, es confrontarnos cara a cara con experiencias y vivencias tan distorsionadas y desequilibradas, que terminan confundiéndonos y afectándonos interiormente. Tenemos que vivir dentro de un sistema y de un planeta que a muchos no nos agrada y a veces por este motivo, no sabemos cómo lidiar con el, ya que queremos ser justos con nosotros mismos y con todo lo que nos rodea.
Hoy en día nos tocó vivir en este tiempo y en esta realidad. Cada uno de nosotros tendrá que discernir, escoger y vivir, de acuerdo a sus habilidades psíquicas e intuitivas, formadas con nuestro propio discernimiento e inteligencia espiritual, debemos tomar cuidado con lo que escojamos o en qué dirección nos encaminamos. Por esta razón estamos recibiendo tanta información, porque nos encontramos en el límite de la razón y será nuestro Libre Albedrío que nos ayudará a seleccionar lo correcto o incorrecto de nuestra vida.
Si debemos lidiar con la energía dinero, hagámoslo lo más justo, razonable, equilibrado, íntegro, honesto, incorruptible y decente que podamos, ésta sería una forma de ir transformando nuestra realidad, de los otros y finalmente del planeta. Esta será nuestra fuerza espiritual, porque es el verdadero desafío que hoy nos pide el camino del espíritu, saber vencer las vicisitudes de una sociedad corrupta, alucinante y distorsionada como la que vivimos.
A pesar de todas las precauciones que tomemos, debemos estar atentos, porque la energía dinero muchas veces es: el lobo disfrazado de oveja, la mezquindad disfrazada de altruismo, la codicia disfrazada de bondad, la avaricia disfrazada de conocimiento, la energía ambición disfrazada de sabiduría… Solo el Conocimiento, Entendimiento, Amor, Equilibrio, Cordura, Sentido Común, Madurez y nuestra auténtica y verdadera “Espiritualidad Interior”, nos mantendrá alertas y despiertos para no caer en sus trampas sutiles…
Conversando con una amiga mía muy querida me dijo una gran verdad: “La vida me ha enseñado que hoy en día tener nuestras necesidades cubiertas lo podemos llamar… Abundancia… todo lo demás es exceso”.
Y como dice nuestro amigo el Maestro Ramtha:
¿De verdad creéis que si hay alguien espiritual, se olvida de serlo, solo porque la vida le sonría?
Porque a ver, ¿quién es más espiritual que quién? ¿Podéis decirlo? Hay que amar siempre todo lo que recibes y si la vida te da un respiro, será porque tiene que ser así y no por ello olvidas lo aprendido...
Primer 