He de permitirte cometer una falta tras otra en la vida,
pero cuando las reconoces y buscas Mi ayuda,
YO ESTOY siempre dispuesto a ayudarte y a mostrarte el camino.
Pero no haré el trabajo por ti.
Debes aprender a hacerlo por ti mismo/a.
Esta vida no es para los/as debiluchos/as sino para las almas que son fuertes
y están seguras de sí mismas,
y para los/as que quieren encontrar las respuestas y están dispuestos/as a llegar
al final hasta obtener las respuestas correctas, sin importarles el precio.
¿Tienes miedo de cometer errores?
¿Tienes miedo de adentrarte hasta donde no haces pie?
No aprenderás a nadar hasta que tus pies dejen de tocar fondo.
No crecerás espiritualmente hasta que te sostengas por ti mismo/a.
No temas nada y camina con absoluta fe y confianza haciendo lo que sabes
que está bien, e ignora toda oposición.
Déjate guiar por ese conocimiento interno que procede de Mí.
Yo soy el espejo en el que has de mirarte y te devolveré aquello
que tienes que conocer de una manera más certera.
Incluso admito que tengas que quejarte; pero por favor,
no dejes de caminar en este proceso, porque sin ti, yo no SOY.
Ahora ve y levanta la cabeza ante los conflictos que te entrega la vida; por más que te duelan,
no olvides que esto es algo que te pone a prueba. ¡Aguanta!
Pero no te resistas, deja que el viento y los demás elementos te lleven donde quieran,
pues todo, está ya pensado, aunque tú no lo creas.
Aquí estoy... aquí me tienes y me tendrás ¡siempre!