Interpretación de Mundos Múltiples, una teoría que te hará un nudo en el cerebro
Según lo estipulado en la teoría de la Interpretación de Mundos Múltiples (IMM) de la física cuántica, existimos en una red infinita de líneas de tiempo alternativas. Obviamente se trata de una afirmación de mucho peso con un montón de implicaciones de índole científico, filosófico y existencial. Para entender todo este bagaje que trae la teoría a cuestas, a continuación reunimos ocho de las más extrañas implicaciones posibles que surgen de esta engañosa postura.
La IMM
Según lo planteado en la hipótesis de Hugh Everett, habitamos en un universo – más precisamente en un multiverso – donde cronogramas se ramifican constantemente dando origen a mundos distintos y coherentes, cada uno experimentado por una versión de ti.
Los físicos cuánticos han venido usando la IMM para echarle tierra a un pozo bastante incómodo que dejó la “Interpretación de Copenhague”, una afirmación que sostiene que un fenómeno no observado puede existir en estados pares. Así, en lugar de decir que el gato de Schrödinger está vivo o muerto, los defensores de la IMM optarían por decir que el gato simplemente se “ramificó” en dos mundos diferentes: uno en el que sigue vivo y otro en el que murió.
A casi seis décadas de haber sido concebida por vez primera, la IMM continúa siendo un tema de mucha controversia. En un censo entre físicos cuánticos llevado a cabo en 2013, solo una quinta parte de los entrevistados dijeron apoyar la IMM (en comparación con un 43% que prefirió la Interpretación de Copenhague).
Aclarado esto, la lista de pensadores que se manifiesta a favor de la Interpretación de Mundos Múltiples es apabullante, y entre ellos se incluyen a algunas eminencias como el físico cuántico David Deutsch, el científico de la computación Scott Aaronson y el físico Sean Carroll.
Independientemente de la aceptación de esta teoría, ciertamente resulta interesante analizar sus implicancias. Sin embargo, esto apenas comienza…
1 – Viviríamos en un multiverso de proporciones colosales
Muchas veces los cosmólogos dan por sentado que el mundo que observamos es único – de ahí el “uni” en universo.
Las ramificaciones de multiversos ya han sido consideradas una herejía científica, pero aparentemente es cada vez más probable que resulte cierto. De hecho, la sugerencia de que existe una multiplicidad de universos fue hecha por un número de científicos y metafísicos de renombre.
La afirmación principal de la IMM es que toda la existencia está compuesta por una superposición cuántica de un número incontablemente grande – o si se le quiere, infinito – de universos. Si esta interpretación de la existencia es verdad, entonces debe existir un número absolutamente sorprendente de mundos alternos.
Y, en consecuencia, más posibilidades de que exista la vida allí afuera.
2 – El relato único de tu vida es una ilusión
La IMM también perturba nuestra noción de individualidad. Todos experimentamos la vida como un viaje coherente y discreto a través de lo que parece ser el espacio y el tiempo. Sin embargo, según la IMM, ese viaje es un conjunto de expansión exponencial de casos que se ramifican a cada momento. Como resultado, no debemos pensar en nosotros mismos como individuos, sino como multiplicidades.
La razón para esta ilusión es que las demás experiencias no pueden ser observadas, por eso nos quedamos con la impresión de que somos apenas una única persona. Ahora, esto no quiere decir que nuestras experiencias de realidad no son de alguna forma reales o verdaderas. Lo son completamente. Pero tenemos que reconocer – vía la IMM – que nuestras vidas no son precisamente lo que parecen ser.
Y así, de la nada, pasas a sentirte como el personaje protagonista de la película Interestelar.
3 – Existen incontables versiones de ti
Si la IMM fuera correcta, entonces debe existir un número casi infinito (o infinito, como mejor convenga) de versiones tuyas, y cada una experimenta el mundo como un individuo distinto y ajeno a ti y a los otros.
Consecuentemente, la cantidad de caminos alternativos de la vida tiene que ser inconmensurable. Desde el nacimiento, tú – o lo que crees que eres tú – te has ramificado en mundos diferentes, con cada superposición de pasaje. El conjunto complejo de “ti” es una especie de sistema radicular masivo que crece de forma exponencial, de manera que cada nueva raíz representa un nuevo cronograma.
Dado que la IMM implica una variabilidad constante con base en probabilidad, cada nueva instancia de ti debe ser diferente, observándose en un mundo en que un resultado alternativo ha acontecido.
Hay versiones de ti que aún están con tu ex. Muchas de tus versiones alternas son más felices y exitosas que tú, y viceversa. También debe haber versiones de ti que ya murieron, o que sufrieron la muerte de un ser querido que aún está vivo en tu realidad. Incluso puede haber versiones “malvadas” de ti, al estilo Star Trek. Las posibilidades prácticamente son infinitas, siempre que los fundamentos que rigen a la física no sean violentados.
4 – Conservas el libre albedrío
Si tomamos en cuenta que todas las posibles decisiones serán hechas por diferentes versiones de ti, la IMM complica mucho el tema del libre albedrío. ¿Si todas las opciones de elección son tomadas en mundos alternos, entonces por qué pasar por todos los problemas de analizar todas las evidencias antes de elegir? El destino colectivo de nuestra totalidad existencial, aparentemente, ya fue determinado.
Sin embargo, como explica el especialista Michael Clive Price, mientras todas las decisiones son hechas, algunas son electas con más frecuencia que las otras. En otras palabras, cada ramificación de una decisión tiene su propio “peso” para cumplir las leyes usuales de la estadística cuántica.
Además, la IMM implicaría una cierta indeterminación de la existencia, aunque de forma intuitiva. Siempre nos preguntamos: “¿Podría haber elegido un camino diferente en la vida?”. La IMM implica que la respuesta es definitivamente SÍ.
Además, no solo podrías haber elegido un curso de acción diferente, como una versión alternativa de lo que realmente hiciste. Cuándo o porqué eliges de forma diferente, o porqué abandonaste de una cierta forma una prueba o lo que sea, todo se resume a la forma en como los eventos cuánticos en la escala clásica son afectados – incluidos los pensamientos en tu cerebro.
5 – Debe existir un mundo extraño allí afuera
La IMM necesariamente nos conduce a posibilidades muy extrañas.
Una vez más, todas las ramificaciones de esa idea son teóricamente posibles, siempre que sean probables y no violen las leyes de la física. Sin embargo, es importante precisar que, dado el espacio de todos los mundos posibles, es mucho más posible que te encuentres en los más probables y aparentemente racionales de los mundos, porqué aparecen con mucha mayor frecuencia (y por varias órdenes de magnitud).
Pero habrá algunos mundos en que cosas altamente improbables deben acontecer. Por ejemplo, si una persona tira una moneda 1,000 veces, debe existir un mundo en que esa persona saca “cara” 1,000 veces seguidas. Además, debe existir un mundo allá afuera donde alguien siempre apuesta correctamente en los resultados deportivos, por ejemplo.
De forma más radical, una persona sin formación musical alguna podría sentarse frente a un piano e inmediatamente comenzar a tocar el 3º Concierto de Rajmáninov de inicio a fin, incluidas todas las dinámicas necesarias.
En dicho escenario, cada resolución de resultados de superposición en un determinado estado cerebral produce los movimientos correctos. Las probabilidades de que esto suceda, sin embargo, están más allá de una escala astronómica e implicaría un terriblemente pequeño subconjunto de todos los universos posibles.
Es aquí que muchos escépticos trazan la línea de esa interpretación, argumentando que este tipo de escenarios son tan ridículos que casi por sí mismos prueban que la IMM no es verdad.
6 – La comunicación entre mundos paralelos puede ser posible
En 1995, el físico cuántico Rainer Plaga propuso una prueba experimental de la IMM en el que describe un procedimiento para el intercambio de información y energía “entre mundos”, es decir, “acoplamiento débil”.
Al emplear un dispositivo óptico cuántico estándar, un solo ion puede ser aislado de su ambiente en una trampa de iones. Entonces, una medición de mecánica cuántica sería hecha con dos resultados separados realizados en otro sistema, lo que resultaría en la creación de dos mundos paralelos.
Dependiendo del resultado, un ion debe ser excitado solamente en uno de estos mundos paralelos antes de que el ion curse a través de su interacción con el ambiente.
Plaga argumenta que deberíamos ser capaces de detectar esta excitación en otro mundo paralelo, lo que posteriormente fortalecería las pruebas para corroborar la IMM – en un camino potencial para enviar información a una realidad paralela.
Es difícil saber que tan detallada podría ser esta información, o si significaría alguna cosa para el receptor. Es una idea fascinante y espectacular sobre las potenciales implicaciones de la comunicación entre mundos.
7 – No existen paradojas sobre los viajes en el tiempo
Muy simple: la existencia de mundos alternos significa que no hay una única línea del tiempo a ser recorrida.
Si una persona quisiera regresar al pasado, simplemente detonaría una nueva red de cronogramas. La IMM sugiere que las paradojas del viaje en el tiempo – como volver en el tiempo para asesinar a alguien – no son nada que deba preocuparnos.
8 – Todo ya sucedió, y volverá a suceder de nueva cuenta.
La cosa más curiosa sobre el conjunto completo de mundos infinitamente variables es que todo ya sucedió.
Y no solo eso: todo lo que ya fue volverá a ser un número infinito de veces. Así como Bill Murray en El Día de la Marmota (“Groundhog Day”) de 1993, este día será experimentado por ti mismo algunas veces más. Incalculables veces más. Con información de io9
10 partículas teóricas que pueden explicar todo en el universo
Durante toda la historia conocida, la humanidad ha tratado de desentrañar la composición exacta del universo. Los griegos fueron los primeros en intuir la existencia de los átomos, que se creía eran las partículas más pequeñas del universo, los “bloques de construcción” del todo.
Durante 1,500 años, no hubo nada nuevo en el tema, hasta el descubrimiento en 1897 del electrón, que hizo temblar las estructuras del mundo científico. De la misma manera que la matería estaba hecha de átomos, los átomos parecían tener sus propios ingredientes.
Pero incluso los protones y los neutrones, los elementos que componen al átomo, también están hechos de partes más pequeñas – los quarks. Cada nuevo descubrimiento trae consigo nuevas preguntas. ¿Será que el tiempo y el espacio son tan sólo grupos de migas minúsculas cargadas, demasiado pequeñas para ser vistas? Tal vez estaspartículas teóricas pueden explicar todo, aunque primero habría que encontrarlas encontrarlas.
10. Strangelets
Hay seis tipos de quarks, los más comunes son los quarks “up” y “down”, que conforman a los protones y neutrones. Los quarks “Strange” por el contrario, no son tan comunes. Cuando los quarks “Strange” se combinan con los quarks “up” y “down” en igual número, la partícula resultante se denomina strangelet, que forman los componentes de la materia “extraña”.
De acuerdo con la hipótesis de la materia extraña, los strangelets se crean en la naturaleza cuando una estrella de neutrones posee una presión tan alta que los electrones y protones en su núcleo se fusionan, colapsando en una especie de burbuja densa de quarks, lo que llamamos materia extraña. Y cómo teóricamente pueden existir strangelets fuera del entorno de alta presión del centro de una estrella, es probable que ellos floten fuera de estas estrellas y acaben entrando en otros sistemas estelares, incluido el nuestro.
Y ahí es donde las cosas se ponen locas. Si existe, una gran strangelet puede convertir un núcleo atómico en otro strangelet sólo al chocar con este. El nuevo strangelet chocará con más núcleos, convirtiéndolos en más strangelets en una reacción en cadena hasta que toda la materia en la Tierra se convierte en materia extraña. La comunidad científica se toma en serio esta amenaza, tanto que los investigadores del Gran Colisionador de Hadrones, el acelerador de partículas más grande del mundo, en un comunicado de prensa dijeron que era poco probable que ellos crearan strangelets que pudieran destruir accidentalmente el planeta (básicamente, la naturaleza crea colisiones de partículas mucho más potentes. Si fuera el caso de crear strangelets en la Tierra por la colisión de partículas, esto ya habría ocurrido hace mucho tiempo).
9. S-partícula.
La teoría de la supersimetría establece que todas las partículas en el universo tiene una partícula opuesta gemela, conocida como partícula supersimétrica o s-partícula. Luego, para cada quark hay una s-quark en perfecta simetría con él. Para cada fotón, un fotino. Lo mismo ocurre con todas las 61 partículas elementales conocidas. Pero si son tantas, ¿por qué hasta ahora no hemos descubierto ninguna de ellas?
En la física de partículas, las partículas más pesadas se deterioran más rápido que las partículas más ligeras. Si una partícula es lo suficientemente pesado, desaparece casi en el mismo instante de su creación. Suponiendo entonces que las s-partículas son muy pesadas, dejarían de existir en un abrir y cerrar de ojos, mientras sus superparejas, las partículas que observamos en la naturaleza, seguirían existiendo. Esto también explicaría por qué hay tanta materia oscura: la s-partículas podrían constituir la materia oscura y existir en un campo que es, hasta ahora, no observable.
8. Antipartículas.
La materia está hecha de partículas y de antimateria, antipartículas. Tiene sentido, ¿no? Las antipartículas tienen la misma masa de las partículas normales, pero carga y momento angular (espín) opuestos. Se parece con la teoría de la supersimetría, pero de diferentes partículas, las antipartículas se comportan exactamente como las partículas, incluidos los anti-elementos, tales como anti-hidrógeno. Básicamente, toda la materia tiene su correspondiente antimateria.
O al menos debería. Y ahí está el problema. Hay bastante materia por ahí, pero la antimateria no aparece en ninguna parte excepto en el Gran Colisionador de Hadrones. Durante los primeros momentos del Big Bang, había cantidades iguales de partículas de materia y antimateria. La idea es que toda la materia del universo se produjo en ese punto. Así que, por defecto, toda la antimateria tendría que surgir junta.
Una teoría dice que hay otras partes del universo dominadas por la antimateria. Todo lo que podemos ver, incluso las estrellas más distantes, se compone de materia. Pero nuestro universo visible puede ser sólo una pequeña parte del universo, los planetas, las estrellas y las galaxias de antimateria estarían en otra parte de este universo.
7. Gravitones.
En este momento, las antipartículas son un gran problema para los teóricos de la física de partículas. Otro problema, sin embargo, es la gravedad. En comparación con otras fuerzas, como el electromagnetismo, la gravedad es débil. Y parece que cambiar su naturaleza basada en la masa de un objeto – es fácilmente observable en los planetas y las estrellas, pero cuando se va al nivel molecular, no hay gravedad. Por otra parte, el fenómeno no tiene una partícula de soporte, tales como los fotones que son portadores de la fuerza electromagnética.
Ahí es donde entra el gravitón. Es una partícula teórica que permitiría que la gravedad fuera encajada en el mismo modelo de otras fuerzas observables. Cómo ella ejerce una atracción débil en todos los objetos, independientemente de la distancia, debe ser sin masa. Esto en teoría no debería ser ningún problema – los fotones no tienen masa y fueron encontrados. La física ha avanzado hasta el punto de definir los parámetros exactos que un gravitón debe tener, por lo que encontrar una partícula – cualquier partícula – que coincida con la descripción, confirmaría la existencia del gravitón.
Encontrar el gravitón es importante porqué, de la forma en son hoy en día, la relatividad general y la física cuántica son incompatibles. Más a un cierto nivel preciso de energía, conocida como la escala de Planck, la gravedad deja de seguir las leyes de la relatividad y obedece a las leyes cuánticas. Resolver el problema de la gravedad puede ser la clave para una teoría unificada.
6. Gravifotón.
Esta es otra partícula gravitacional teórica. El gravifóton es una partícula que sería creada cuando un campo gravitatorio fuera excitado en una quinta dimensión. Se predice por la teoría Kaluza Klein, que propone que el electromagnetismo y la gravitación se pueden unificar en una sola fuerza bajo la condición de que haya más de cuatro dimensiones del espacio-tiempo. Un gravifóton tendría las características de un gravitón, y también las propiedades de un fotón, y crearía lo que los físicos llaman una “quinta fuerza” (en la actualidad hay cuatro fuerzas fundamentales).
Otras teorías dicen que el gravifóton ser un super-compañera (como las s-partículas) de los gravitones, que atraen y repelen al mismo tiempo. Al hacer esto, los gravitones teóricamente crearían antigravedad.
5. Preón.
El núcleo de un átomo de oro tiene 79 protones. Cada protón está hecho de tres quarks. El diámetro del núcleo del átomo de oro es de aproximadamente ocho femtômetros u ocho millonésimas de un nanómetro, y un nanómetro es la milmillonésima parte de un metro. Los quarks son pequeños y los preones, que serían las partículas sub-quark, sería tan infinitamente pequeños que en la actualidad no existe una escala para medir su tamaño.
Hay otras palabras para describir los bloques que formarían los quarks, como primons, subquarks, quinks y tweedles, pero el Preon es el más aceptado. Y plos reones son importantes porque en la actualidad los quarks son partículas fundamentales – no hay forma de llegar a algo más pequeño. Si los quarks están formados de otra cosa, esto abriría la puerta a miles de nuevas teorías. Por ejemplo, una teoría afirma que la antimateria del universo esta contenida en los preones, y que todas las cosas han atrapado antimateria dentro de si. De acuerdo con esta teoría, usted es en parte antimateria, pero no se puede ver porque los bloques de materia son mucho más grandes.
4. Los taquiones
Nada se acerca más a romper las leyes de la relatividad que los taquiones. Es una partícula que se mueve más rápido que la luz, y si existe, esto significaría que la barrera de la velocidad de la luz ya no es una barrera, sino un punto central. Al igual que las partículas normales pueden moverse a infinitamente baja velocidad, un taquión podría moverse a velocidades infinitamente rápidas.
Y, curiosamente, la relación con la velocidad de la luz sería reflejado. Cuando una partícula normal acelera, aumenta su energía. Para romper la barrera de la velocidad de la luz, necesitaría una energía infinita. Por un taquión, cuanto más lento viaja, más energía precisa. Conforme se hace lento y se aproxima a la velocidad de la luz desde el otro lado, va necesitando cada vez más energía. Y cuando se acelera, necesitan cada vez menos energía, hasta que no necesita energía para recorrer la velocidad infinita.
Si realmente existen los taquiones, estos quedarían atrapados para siempre en el lado opuesto de la barrera que nosotros también no podemos pasar. Una lástima, porque los taquiones teóricamente se podrían utilizar para enviar mensajes al pasado.
3. Cuerdas.
Hasta ahora, de casi todas las partículas que hablamos son llamadas partículas puntiformes. Los quarks y fotones existen como un punto – un punto minúsculo, si usted quiere – con cero dimensiones. La teoría de las cuerdas sugiere que estas partículas no son puntos, sino cuerdas, o cables que tienen una dimensión. En su esencia, la teoría de cuerdas es una “Teoría del Todo”, que logra juntar la gravedad y la física cuántica (por lo que vimos hasta ahora, no pueden coexistir – la gravedad no funciona en la escala cuántica).
En un sentido más general, la teoría de las cuerdas es una teoría cuántica de la gravedad. Las cuerdas sustituirían a los preones como los bloques de construcción de quarks, y en un nivel superior todo permanecería igual. Y en la teoría de cuerdas, la cuerda puede convertirse en cualquier cosa dependiendo de su forma. Si fuera una línea abierta, se convertiría en un fotón. Si las puntas estuvieran conectadas en un bucle, la cuerda se convierte en un gravitón – de la misma manera que una pieza de madera puede convertirse en un hogar o una flauta.
Existen, en física, muchas teorías de las cuerdas y cada una prevé un número de diferentes dimensiones. La mayoría argumenta que hay diez u once dimensiones, y la teoría bosónica de cuerdas (o la teoría de las supercuerdas) apuesta por veintiséis. Estas otras dimensiones, la gravedad es una fuerza igual o superior a las otras fuerzas fundamentales, lo que explicaría por qué es tan débil en nuestras tres dimensiones espaciales.
2. Branes.
Quién quiera una explicación de la gravedad tiene que echar un vistazo a la Teoría M o Teoría de las membranas. Las membranas, o branes son partículas que son capaces de envolver varias dimensiones. Por ejemplo, un 0-membrana es una membrana puntiforme que existe en cero dimensiones, tales como un quark. Una 1-membrana tiene una dimensión – una cuerda. Una 2-membrana es una membrana de dos dimensiones y así sucesivamente. Las branes de dimensiones superiores pueden ser de cualquier tamaño – los que conduce a la teoría de que nuestro universo es una gran membrana de cuatro dimensiones. Esta “superbrane” – nuestro universo – es sólo una parte de un espacio multidimensional.
Acerca de la gravedad, nuestra membrana de cuatro dimensiones no puede contenerla, y la “filtra” a otras branes con forme pasa por ellas en el espacio multidimensional. Sólo nos quedamos con las sobras, lo que explicaría por qué es tan débil en comparación con otras fuerzas.
Extrapolando, tiene sentido tener muchos branes moviéndose a través del espacio – infinitas branes en un espacio infinito. Y a partir de ahí tenemos la teoría de muchos mundos y universos cíclicos. Las teorías de universos cíclicos afirman que el universo se repite en ciclos, expandido a partir de la energía del Big Bang, y después reducido debido a la atracción gravitatoria que termina en un Big Crunch. La energía de la compresión causaría otro Big Bang, lanzando el universo a otro ciclo.
1. Bosón de Higgs.
El bosón de Higgs tuvo su descubrimiento confirmado el 14 de marzo de 2013, en el Gran Colisionador de Hadrones. Se había predicho teóricamente en la década de 1960 como la partícula que daría masa a otras partículas.
Básicamente, el bosón de Higgs se produce en el campo de Higgs y ha sido propuesto como una manera de explicar por qué algunas partículas que deberían tener masa en realidad no la tienen. El campo de Higgs, que no ha sido observado, tendría que existir en todo el universo y proporcionar la fuerza necesaria para que las partículas tengan masa. Y si esto es verdad, sería llenar grandes lagunas en el modelo estándar, que es la explicación básica de casi todo (excepto, como siempre, la gravedad).
El bosón de Higgs es fundamental, ya que demuestra que existe el campo de Higgs, y explica cómo la energía en el campo puede manifestarse como una masa. También es importante porque establece un precedente. Antes de ser descubierto, el bosón de Higgs era sólo una partícula teórica. Tenía modelos matemáticos, parámetros físicos de su existencia, como debería ser su spin, todo. Sólo faltaba la evidencia de su existencia. Pero en base a estos modelos y teorías, hemos sido capaces de localizar una partícula específica, la cosa más pequeña en el universo conocido, que era consistente con esta hipótesis.
Si podemos hacer esto una vez, ¿quién puede decir que cualquiera de estas otras partículas no puede ser real?
Explicar las teorías del origen del universo nunca es fácil, sobretodo a aquellas mentes que apenas empiezan a descubrir el dulce mundo de la ciencia. Sin embargo, esta lección en video creada por TEDEducation es una verdadera maravilla (como todo lo que hacen) que explica de una manera sencilla, en un argot popular y con imágenes muy precisas cómo es que los científicos creen que se origino el universo, que están haciendo para demostrarlo y cómo llegaron a esa conclusión.
Video: “El comienzo del universo, para principiantes.” Si lo deseas, activa los subtítulos y la traducción al español.
El universo es enorme y extremadamente complejo, pero eso no quiere decir que los seres humanos no estamos tratando de entenderlo.
Y, por lo tanto, surgió la rama de la cosmología, que estudia la estructura, evolución y composición del universo. Sus investigadores analizan lo que pasó, lo que está sucediendo y lo que sucederá en el universo, todo para averiguar cómo se produjo en un primer momento.
Edwin Hubble fue el primero en descubrir que el universo se estaba expandiendo, y señaló que las galaxias parecen estar alejándose más y más. Esto implicaba que todo debería haber comenzado con una explosión monumental de un punto infinitamente caliente y pequeño. A la vez, este fenómeno fue llamado, irónicamente, el Big Bang. La broma se puso seria cuando la evidencia para tal evento se acumuló, y desde entonces el nombre se quedó.
Después de la explosión, que literalmente comenzó todo, el universo se enfrió para formar las estrellas y galaxias. Los cosmólogos tienen varias ideas de cómo sucedió, pero hoy en día, nuestra mejor oportunidad de demostrar lo que realmente pasó es con la física de partículas, que tratan de recrear las condiciones del universo temprano en el laboratorio.
Esta rama de la física estudia los materiales y las fuerzas a energías cada vez más altas, antes con los rayos cósmicos, y ahora con los aceleradores de partículas, al chocar las partículas subatómicas. Cuanto mayor sea la energía del acelerador, mayor es el tiempo que los científicos son capaces de “ver” y entender las condiciones.
Hoy en día, las cosas en su mayoría están hechas de átomos, pero cientos de segundos después del Big Bang, el espacio era demasiado caliente para que los electrones y protones se unieran y formaran núcleos y átomos – la alta temperatura superaba las fuerzas que normalmente las mantienen juntos. En cambio, el universo consistía en un mar de partículas subatómicas.
Más que eso, microsegundos después del Big Bang, los protones y los neutrones estaban empezando a formarse a partir de quarks, uno de los pilares fundamentales del Modelo Estándar de la física de partículas.
Incluso antes de eso, la energía era muy alta como para que los quarks se unieran. Los físicos creen que probando subpartículas en energías aún más altas, pueden tener una idea de cómo fue ese momento inicial en el que todas las fuerzas eran iguales, lo que haría la comprensión del origen del universo mucho más fácil.
Pero para lograr tal hazaña, se necesitan construir grandes aceleradores, y trabajar duro para combinar todo el conocimiento humano de las cosas enormes del universo con las más pequeñas cosas en él. Y vamos a estar esperando con impaciencia el siguiente paso para desentrañar este misterio colosal.
Existe otra teoría, una de las más aceptadas en la actualidad, llamada Big Rip o Gran Desgarramiento, en la que la energía oscura, la misteriosa fuerza opuesta a la gravedad.
Una de las hipótesis más populares sobre el destino final del Universo es la denominada Big Crunch o Gran Implosión, por la que el cosmos en expansión se va frenando poco a poco hasta que todos los objetos (las galaxias, las estrellas, los planetas…) se acercan de nuevo y vuelven al punto original en el que comenzaron en el Big Bang. Pero existe otra teoría, una de las más aceptadas en la actualidad, llamada Big Rip o Gran Desgarramiento, en la que la energía oscura, la misteriosa fuerza opuesta a la gravedad y que se considera responsable de que el Universo se expanda cada vez más deprisa, juega un papel fundamental.
Aunque este escenario es igualmente trágico, aquí se propone exactamente lo contrario; el Universo no se contrae, sino que se expande tanto que llega a un punto en el que todo lo que existe se desgarra, como si fuera un pañuelo en manos de dos niños que tiran con fuerza cada uno hacia el lado contrario. Cinco científicos de la Universidad de Ciencia y Tecnología de China, el Instituto de Física Teórica de la Academia China de Ciencias y la Universidad de Pekín han calculado recientemente cuánto queda para este trágico final. Podemos estar tranquilos: ninguno de nosotros lo verá dentro de casi 17,000 millones de años.
Si el Universo contiene suficiente energía oscura, si la densidad energética (w) de la energía oscura es <-1 en algún momento del futuro, se desgarrarán todos los objetos del Universo
Durante milenios, dicen los investigadores, los seres humanos han reflexionado acerca de dos preguntas fundamentales: «¿De dónde venimos?» y «¿Hacia dónde vamos?», preguntas que han estimulado el debate teológico y filosófico. «Gracias al rápido desarrollo de la cosmología moderna, en las últimas tres décadas los científicos han obtenido algunas pistas importantes para responder a estas preguntas», afirman. Los investigadores creen que la misteriosa energía oscura, que conforma el 74% del Universo (solo el 4% es materia ordinaria y otro 22% materia oscura), jugará un papel importante si se quiere pronosticar la duración de los tiempos.
En concreto, los científicos creen que las propiedades de la energía oscura decidirán qué es lo que ocurrirá. Si el Universo contiene suficiente energía oscura, si la densidad energética (w) de la energía oscura es <-1 en algún momento del futuro, se desgarrarán todos los objetos del Universo. Eso es el Big Rip. Una de las cuestiones más intrigantes es cuándo llegará ese día del juicio final. Según los cálculos de los investigadores, el tiempo que queda para el Universo termine es 16, 7 Giga años (es decir, 16,700 millones de años). Pero, ¿qué pasará con las galaxias y estrellas? La repulsión gravitatoria de la energía oscura aumentará de forma continua hasta superar todas las fuerzas que sostienen los objetos entre sí y estos serán destrozados. Ningún objeto podrá escapar de este destino. De nuevo según sus cálculos, -si todo permaneciera entonces milagrosamente como hasta ahora y presumiendo que el Sol y la Tierra todavía existieran, se trata tan solo de un juego teórico-, la Vía Láctea quedaría hecha añicos 32.9 millones de años antes del Big Rip; dos meses antes del día del apocalipsis la Tierra sería arrancada de la órbita del Sol. Cinco días antes, la Luna nos sería arrebatada y el Sol se destruiría 28 minutos antes del final de los tiempos. Finalmente, 16 minutos antes de que todo acabase, la Tierra explotaría. Al menos, por lo que los científicos saben sobre la energía oscura, todavía tenemos un futuro muy largo por delante.
Nada es eterno en la vida, ¿cierto? Hasta donde la ciencia ha podido deducir, el universo tampoco lo es. Y, aunque suponemos que terminará algún día, no sabemos (exactamente) cómo. Los científicos han elaborado varias hipótesis, y tres de ellas son las más aceptadas actualmente para explicar lo que podría acontecer en el fin del universo: el Big Rip (Gran Ruptura), el Big Freeze (Gran Congelamiento) y el Big Crunch (Gran Colapso).
Big Rip
Debes saber que nuestro universo se está expandiendo. Sin embargo, por ahora las galaxias no se están apartando mucho unas de otras como resultado de esta expansión debido a que la gravedad mantiene a los objetos espaciales juntos. En el escenario del Big Rip, la aceleración de expansión es tanta que la gravedad ya no puede mantener todo junto. El resultado sería una gran ruptura y laceración del universo.
Big Freeze
En este escenario, también conocido como muerte térmica, mientras el universo crece y se expande, la materia se desintegra y se extiende – gracias a una cosa llamada entropía. Poco a poco, las estrellas y agujeros negros van muriendo, y no queda nada para substituirlos. Solo gas y partículas de luz aún estarán por aquí, pero eventualmente estas también se desintegraran. En cierto punto, toda la actividad en el universo cesará, la entropía llegará a su máximo, y el mundo estará muerto para siempre.
Big Crunch
Si existe menos energía oscura (la misteriosa fuerza que los científicos aún intentan comprender) en el universo de lo que imaginamos, la gravedad será la fuerza dominante algún día. Así, la expansión debe desacelerar y parar. Y entonces, sucederá lo contrario: las galaxias se fundirán, y el universo será un lugar cada vez más compacto y caliente. Todo lo que existe colapsará en una masa única, y un gigantesco agujero negro devorará todo, incluso a sí mismo.
Si quieres saber más detalles de cada teoría y de sus consecuencias, un equipo de diseñadores de información de Alemania hizo un video en YouTube que describe las tres hipótesis.
“¿Qué es el Universo?”, hay una pregunta a la que el hombre desea la respuesta desde que comenzó a andar sobre la Tierra. Sabemos muy poco sobre la naturaleza del universo y no somos capaces de responder a esa pregunta… o ¿lo somos? En Marcianos queríamos saber la opinión de los internautas sobre el tema y nada que una búsqueda por foros de discusión en general y en algunas redes sociales no pueda resolver. De todo lo que encontramos, separamos unas cuantas, que en nuestra opinión son las que atraen la mayor atención y permiten la posibilidad – aunque en algunas, muy remotas – de ser la respuesta a nuestra eterna duda.
Hay que recordar que son divagaciones y no estamos, en momento alguno, afirmando estas teorías sean correctas. Lógicamente, se espera que algunas de estas explicaciones no tengan sentido para ti, sin embargo, la intención es realizar una especie de lluvia de ideas y conocer la opinión de los lectores, por lo que si tienes una “visión del universo”, por ridícula que parezca, asegúrate de dejarla en los comentarios.
Así que sin más preámbulos ….
Uno entre tantos.
Cuando la teoría de los Mundos Múltiples de Everett llegó en 1954 y más tarde la teoría-M de Edward Witten, en 1995, los astrofísicos, físicos teóricos y cosmólogos encontraron respuestas a algunas preguntas que hasta entonces hacían pedazos la cabeza mucha gente, tales como “¿por qué diablos las constantes fundamentales del Universo tiene sus valores establecidos en una inmensa perfección que causa el orden?” ¿No entiendes? Lo explico de otra manera: las constantes fundamentales de nuestro universo que expresan, por ejemplo, los valores de las fuerzas fundamentales son absurdamente precisas, ya que ante cualquier alteración, por pequeña que sea, causarían un colapso tan grandes que haría que el Universo sucumbiera en sí, evento que probablemente ocurra un día, el llamado el Big Crunch. El equilibrio entre la fuerzas es perfecto. Este hecho dejó a muchos científicos vueltos locos, ya que las estadísticas y sus números absurdamente pequeños sugerirían que una “inteligencia ” estaba detrás de la creación Universal. Y para un hombre de ciencia – especialmente aquellos que son ateos – era difícil engullir una explicación orientada a la metafísica. Ahora bien, esto conduciría directamente a la idea de la existencia de deidades y causaría que muchos científicos vivos se retorcieran en sus tumbas mentales. Sin embargo, analizando las dos teorías las posibles respuestas a esta pregunta aparecen.
De acuerdo con estas teorías nuestro universo sería como una membrana tridimensional flotando en un “espacio” (que no sabemos a ciencia cierta lo que es, por eso hemos adoptado la palabra “espacio” pero también puede ser llamado “el nada cósmico” que daría lo mismo ya que nadie sabe mucho al respecto), junto con una infinidad de otros universos. Se cree que los “Universos” en las branas son estáticos y que “el nada cósmico” no está dotado de las mismas leyes de la física tal como la conocemos, sin embargo, es cierto que las branas Universales se “agitan” violentamente, una vibración que viene de la inestabilidad natural de toda brana. Estas vibraciones generan oscilaciones gigantescas que con el tiempo terminan por aproximar una membrana de otra y cuando se acercan demasiado y chocan, un nuevo Universo Brana aparece. Así nacerían los universos.
Ahora, volvamos al comienzo de nuestra “conversación ” nada convencional. ¿Recuerdas el tema de las constantes fundamentales y su inquietante perfección? La respuesta a esta pregunta sería que los universos, como el nuestro, ordenados hasta cierto grado, serían los únicos sobrevivientes de una serie de choques de branas. Sólo los choques que generan universos con fuerzas fundamentales con la intensidad que conocemos serían capaces de permanecer lo suficientemente estables como para no sucumbir en sí. (También existe la hipótesis de que estos universos branas con fuerzas fundamentales de diferente intensidad no sucumbieren en sí mismos y el resultado serían universos deformes, completamente desordenados, o tal vez equilibrados por un orden diferente del que conocemos…. bueno, entonces es mejor abandonar este idea, ya que abre muchas puertas y no queremos un artículo con lo equivalente a 900 paginas, ¿verdad?)
Conceptos difíciles de entender, ¿no es así? Pero espera, se pondrá peor. La teoría de cuerdas es como un tipo excéntrico que los físicos tuercen para que no se aparezca en la fiesta porque no saben cómo explicar exactamente por qué se comporta de esa manera. Y para no dejar esta situación aún más confusa, volvamos un poco atrás, hacia el nacimiento del Universo.
Nacer, crecer, reproducirse y morir.
Si nuestro universo chocó una vez contra otro, ¿Cómo podríamos ser capaces de ver la evidencia de eso en los confines del cosmos? Se preguntan los astrofísicos.
Por lo que sabemos, el universo tiene unos 93 mil millones de años luz de tamaño y menos de 13.73 ± 0.12 mil millones de años de edad.
Esto es algo que ha hecho que los cosmólogos se rasquen la cabeza. En 14 mil millones de años luz pueden viajar no más de 14 mil millones de años luz. Entonces, ¿cómo se produjo un universo tan grande de una forma tan “rápida”?
La mejor explicación que tenemos hoy es el misterioso proceso llamado “inflación cósmica”. La idea general detrás de esto es que poco después de su nacimiento, el universo aumentó rápidamente su tamaño por muchos órdenes de magnitud en una pequeña fracción de tiempo, un instante cósmico A los cosmólogos les encanta pensar en cual fue el gatillo que detonó la inflación universal. Respuesta corta: no se sabe en realidad, hasta ahora la especulación es continua y fuerte.
Un problema menos conocido y explorado es “lo que podría haber detenido la inflación”. ¿Por qué entonces el cosmos no siguió en expansión a este ritmo exponencial? Una de las respuestas más curiosas es la siguiente: queel universo se sigue expandiendo y vivimos en una pequeña región de estabilidad, una burbuja cósmica en medio de una tormenta gigantesca universal.
Obviamente, nuestra burbuja cósmica sería sólo una de las innumerables burbujas (Y aquí entra la historia de las branas, ya que por los cálculos matemáticos de la teoría M, el universo no podía ser esférico como pensábamos, aunque visualizarlo de esa manera no vuelve las cosas muchos más fáciles)
Los curiosos se preguntaron ¿cómo podríamos ver alguna cosa más allá de estas “burbujas ” si se encuentran del otro lado de una frontera infranqueable (de nuestros instrumentos de medición) del universo visible? Este punto es donde Anthony Aguirre hace su aparición.
Anthony Aguirre de la Universidad de California en Santa Cruz y su colega Matthew Johnson del Caltech revisaron este escenario propuesto y dieron una respuesta enérgica a un artículo publicado el 21 de septiembre de 2009: ” Un informe de status sobre la observabilidad de las colisiones de burbujas cósmicas” . Escribieron en abstracto:
“En este contexto de inflación eterna guiada por una potencia escalar de mínimos múltiplos, nuestro universo observable reside dentro de una serie de burbujas formadas por las transiciones de un falso vacío. Estas burbujas necesariamente chocan entre sí, alterando la homogeneidad y la isotropía de nuestra burbuja interior y posiblemente dando lugar a firmas detectables en la parte observable de nuestra burbuja cósmica, potencialmente una radiación cósmica de fondo de microondas (CMB – Cosmic Microwave Background) u otras de alta precisión. Esto constituye una prueba experimental directa de la teoría de la eterna inflación y del escenario del vacío de la teoría de cuerdas. Una forma simplificada de abordar esta posibilidad se puede resumir respondiendo a tres preguntas: ¿Qué sucede en una colisión genérica en burbujas cósmicas? ¿Cuáles son los efectos observacionales que cabría esperar? ¿Cómo podríamos observar tal colisión ? En esta revisión se presenta el progreso actual en cada uno de estos temas, hemos mejorado algunos de los resultados existentes y tratamos de establecer direcciones para futuras investigaciones” .
Así que los científicos Aguirre y Johnson proponen que la única forma de poder ver la evidencia de otra burbuja cósmica está en el pasado remoto, y si otra burbuja hubiera chocado con nuestro Universo (burbuja) en el pasado distante. Es una idea interesante, pero con algunos problemas. El principal problema es que en la mayoría de los casos, las colisiones entre “universos burbuja” destruyen el tejido del espacio – tiempo de ambos burbujas, garantizando así que nosotros, como observadores cosmológicos, no podamos estar aquí para verificar tales consecuencias.
Sin embargo, Aguirre y Johnson han identificado una posible familia de colisiones cósmicas que podrían preservar las tres dimensiones del espacio y una de tiempo que necesitamos para nuestra existencia. Sin embargo, lo que se ha propuesto no se parece mucho a una colisión cósmica en el sentido literal, el evento sería más como un “rozón” entre los “universos burbuja” .
Entonces, ¿cuál sería la consecuencia de tal “rozón cósmico”? Aguirre y Johnson dicen que la evidencia de una curvatura negativa del universo sería compatible con la idea de que vivimos en una burbuja cósmica mientras que una curvatura positiva descartaría esta hipótesis. Además de eso, este choque cósmico habría dejado su huella en forma de diversas facetas simétricas de radiación cósmica de fondo de microondas (CMB – Cosmic Microwave Background). Esto es algo que podríamos ver en los datos de sondas espaciales como el nuevo y poderoso observatorio Planck.
Todo esto es muy tentador. Sin embargo, el problema es que nada de esto probaría de forma definitivamente, efectiva e inequívoca evidencia de una colisión. De esa manera, esto significa que nunca sabríamos la verdad con absoluta certeza.
Pero los cosmólogos no se rinden fácilmente, este es el tipo de especulación que les encanta.
Aguirre y Johnson termina con esta frase: “Con algo de suerte, el descubrimiento de ‘otros universos’, un concepto que aparentemente salió de la ciencia ficción, puede estar a la vuelta de la esquina”
Mejor nos detenemos aquí antes de que alguien salga lastimado seriamente.
8 grandes preguntas filosóficas que nunca resolveremos
Aunque estemos plenamente instalados en el siglo XXI, nuestra mente colectiva arrastra preguntas que parecen no tener solución definitiva: ¿la realidad es real? ¿La libertad existe? ¿Será posible percibir algo objetivamente? La mente humana, imperfecta como es, fue capaz, sin embargo, de generar callejones sin salida del pensamiento, proposiciones de naturaleza metafísica que parecen residir en los límites de nuestra capacidad intelectual, aunque, paradójicamente, por estas mismas lleguemos a ellas.
En seguida te presentamos 8 de estos supuestos muros que, tal vez, en el fondo no sean más que trampas de nuestra abstracción, la forma en que histórica, y quizás inevitablemente, construimos nuestra forma de pensar.
1. ¿Por qué hay algo en vez de nada?
Parece justo que la existencia sea el primero de estos grandes enigmas. ¿Por qué algo existe cuando parece perfectamente posible que la nada fuera la norma? ¿Qué impulso secreto del universo físico fue decisivo para que la nada se convirtiera en algo?
2. ¿Nuestro universo es real?
Una de las preguntas más recurrentes del pensamiento humano: la duda constante sobre la realidad de este mundo. De los textos sagrados del hinduismo a Jean Baudrillard, parece que no hay un recurso mental que nos permita discernir la verdadera realidad de nuestra realidad (así tan redundante y tautológico como puede ser nuestro pensamiento). Y, sin embargo, en algún momento de su desarrollo intelectual, Wittgenstein afirmó que en el dolor sería posible encontrar el fundamento de la realidad, la cuestión aun sigue abierta. Por más compleja que sea la noción de dolor, por más subjetiva y personal, ¿no podría una inteligencia superior que nos mantenga eneste mundo simulado también simular, con todos los detalles, estas sensaciones?
3. ¿Tenemos libre albedrío?
“El hombre ha nacido libre y, sin embargo, por todas partes se encuentra encadenado.”, escribió famosamente Rousseau. La paradoja de la libertad es que, incluso si una condición es supuestamente posible, tiene lugar en un contexto contingente en el cual la condición depende de muchos factores. A veces pensamos que cuando tomamos una decisión plenamente conscientes, considerando sus causas y sus consecuencias y las razones por las que la tomamos, esta decisión es una decisión libre. Pero, ¿es esto cierto? ¿O se trata solamente de un autoengaño de quien anhelan creer en la libertad? ¿Son los otros, los que piensan que la libertad es absolutamente imposible, quienes tienen la razón a este dilema?
4. ¿Dios existe?
Una entidad omnisciente y todopoderosa gobernante este mundo desde su creación hasta su destrucción, compensando y retribuyendo, castigando o manteniendo el margen, pero igualmente con un plan secreto que de todos modos terminará por acontecer. Un entidad metahumana que da orden y sentido a lo que vemos y vivimos, a todo lo que existe, incluso cuando este orden toma la forma del caos y de lo incomprensible. Una vez imaginado, ¿es posible demostrar su existencia o no existencia? Y una paradoja lógica para incrementar la confusión: ¿Puede Dios crear una piedra tan pesada que ni siquiera él pueda cargar? Si no, entonces no es omnipotente, pero si puede tampoco es omnipotente, por qué no tendría la fuerza para cargarla. Esta reducción al absurdo nos muestra, en todo caso, que no es con el lenguaje humano o la razón con lo que se distingue a un Dios. En pocas palabras, no podemos saber si Dios existe o no. Tanto los ateos y los creyentes estarían equivocados en sus proclamas, mientras que los agnósticos tendrían la razón. Y, como se mencionó anteriormente, podríamos vivir en una simulación donde los dioses hackers controlan todas las variables. ¿Quién va a saber?
5. ¿Hay vida después de la muerte?
Es muy posible que el miedo a la muerte, o el hecho de que no entendamos su significado, haya dado lugar a la creencia de que la vida no termina con esta. Tal vez, en este caso, antes de contestar si hay o no vida después de la muerte -una vida que, además, imaginamos esencialmente idéntica a la que tenemos ahora-, tendríamos que responder en primer lugar a ¿por qué hemos de morir?. La ciencia moderna considera a la muerte como un agujero negro, un horizonte de sucesos del que nada se puede decir, ni ninguna información extraer, ya que, a saber, nadie volvió de este estado para contarlo. El Budismo Tibetano en cambio cree que todos volvemos de la muerte, en un ciclo kármico de la existencia, e incluso crearon un manual para escapar de la reencarnación.
6. ¿Hay algo que realmente se puede experimentar de forma objetiva?
La dualidad entre sujeto y objeto es uno de los pilares del pensamiento humano, al parecer heredado de las filosofías orientales a los primeros grandes pensadores de Occidente. En esencia se trata de un conflicto con nuestra percepción, de la cual obtenemos una versión de la realidad que, al mismo tiempo, intuimos que no coincide exactamente con lo que podríamos llamar la realidad real, la realidad objetiva. Si tuviéramos la capacidad visual de los halcones o las olfativas de los perros, ¿cómo cambiaría la realidad que percibimos? O, sin incurrir en estas fantasías, pensemos cuán limitado puede ser el mundo para alguien que ha nacido ciego o sordo. Sabemos que hay una realidad absoluta más allá de nuestros sentidos, pero al mismo tiempo parece que estamos condenados a no ser capaces de discernir esa realidad.
7. ¿Cuál es el mejor sistema moral?
La moralidad, esa serie de costumbres y normas que, de alguna manera, nos permitieron sobrevivir colectivamente como especie, ha cambiado considerablemente con el tiempo, aunque hay algunos elementos más o menos comunes a todas las culturas y épocas. Por ejemplo, el incesto, ampliamente estudiado por el antropólogo Claude Lévi-Strauss. Sin embargo, también está la posibilidad de que la moralidad sea una pantalla que las narrativas históricas se encargaron de sobreponer a determinadas épocas, para mayor comodidad discursiva, pero que no necesariamente han sido la norma y, en la práctica, en la vida cotidiana, el ser humano no es tan liberal o tan reprimido, tan relajado o tan estricto, tanto en la época victoriana como en la Edad Media o en la época en que ahora vivimos.
8. ¿Qué son los números?
Uno de los inventos más ingeniosos de la mente humana son los números, de naturaleza esencialmente incomprensible. Indispensables en el uso diario, y sin embargo, inexplicables y casi enigmáticos. ¿Qué es el 2? ¿Qué es el 5? Una vez más nos vemos obligados a tomar la tautología como único recurso. Parece que sólo podemos decir que 2 es 2 y aceptar que estamos en un callejón sin salida (¿o es una cuestión de semántica? ¿un problema nada más que lingüístico?). Las estructuras matemáticas se componen de números, conjuntos, grupos y puntos, pero ¿son objetos reales o simplemente describen las relaciones que necesariamente existen en todas las estructuras? Platón sostenía que los números eran reales (no importa si no se pueden ver), pero los formalistas insistieron en que no eran más que sistemas formales (estructuras bien definidas de pensamiento abstracto basadas en las matemáticas). Esto es esencialmente un problema ontológico, donde quedamos confundidos acerca de la verdadera naturaleza del universo y qué aspectos son construcciones humanas y que son en realidad tangible.
Los átomos cuánticos que se congelan al ser observados
La popular paradoja del gato de Schrödinger enuncia que un gato cuántico encerrado en una caja se encuentra vivo y muerto al mismo tiempo hasta que alguien abre la caja, momento en que sucede una u otra cosa, así de rara es la mecánica cuántica. Pero si un simple acto de observación resulta determinante para el resultado de un experimento, ¿qué sucedería si nunca dejáramos de mirar? La respuesta, por muy loca que parezca, es que el tiempo se detiene.
Así lo concluyó un nuevo estudio ejecutado por un grupo de físicos de la Universidad de Cornell, en los Estados Unidos. Idearon un experimento destinado a comprobar que intentar una serie de mediciones rápidas de átomos – lo que equivaldría a observar el sistema sin pestañear – esencialmente resulta en el congelamiento del sistema en el lugar. Un concepto parecido al de los ángeles llorosos de la serie de televisión Doctor Who, donde aquellas atemorizantes estatuas se encontraban “cuánticamente bloqueadas”, siendo libres de moverse siempre y cuando no las estuvieran observando directamente, o como los fantasmas Boo que aparecieron en Super Mario Bros 3.
Zenón de Elea era un antiguo filósofo griego al que le encantaba jugar con las suposiciones de las personas y entre sus paradojas es posible encontrar una que se parece bastante a lo que descubrieron en este experimento. Funciona así: para que una de las estatuas ya mencionadas se traslade de un punto a otro, primero debe recorrer la mitad de la distancia hasta dicho punto. Pero, para alcanzar esa mitad, primero debe recorrer la mitad de dicha mitad, y a continuación la mitad de la distancia para esa otra mitad, y así sucesivamente, ad infinitum. Zenón dedujo que esto “demostraba” que el ángel nunca podría trasladarse el punto A al punto B y, en consecuencia, el movimiento era irrealizable.
Pero en un mundo subatómico, donde la mecánica cuántica gobierna como dictador, algo muy parecido a la paradoja de Zenón realmente tiene lugar. Si dividimos el tiempo en trozos lo suficientemente pequeños, todo realmente se congela en un punto. Esto se conoce como “efecto Zenón cuántico”.
En la teoría de Schrödinger, lo importante es el deterioro de los átomos radiactivos, toda vez que esto conduce al envenenamiento – o no – del animal. Aquí existen dos estados plausibles: 1 (los átomos no se deterioran) y 2 (los átomos se deterioran). Si nunca mirásemos dentro de la caja, a medida que el tiempo avanza, surge una superposición de los estados 1 y 2. Y solo cuando miramos dentro de esta extraña superposición se encuentra 1 o 2.
En la década del 70 los físicos llegaron a sugerir que si se hacían mediciones en intervalos tan cortos que prácticamente se consideran una medición continua (en palabras simples, si no se dejara de ver continuamente a la caja) no habría tal deterioro, pues el sistema no tiene tiempo para evolucionar a una superposición. En lugar de esto, se mantiene colapsando de regreso a su estado inicial. Es decir, si observamos continuamente una olla cuántica, esta nunca hierve, de la misma forma que los Boo en Super Mario.
Y no solo se trata de teorías. El experimento conducido en Cornell no es más que uno de los últimos de una serie que confirma que el efecto Zenón cuántico realmente tiene lugar. Aunque también existe un efecto anti-Zenón cuántico, en el que observar continuamente una olla cuántica hace que hierva más rápido. Esta teoría también se confirmó en el campo experimental.
El equipo en Cornell empleó láseres para interceptar un gas de rubidio refrigerado a temperaturas extremadamente bajas. Gracias a las peculiaridades de la mecánica cuántica, cada cierto tiempo un átomo lograba escapar por un túnel fuera de la trampa. Pero cuando electrocutaron repetidamente los átomos con pulsos láser en intervalos cada vez más cortos – el equivalente a mirar la caja de Schroedinger una y otra vez –, descubrieron que esto hacía más difícil que los átomos atrapados salieran por el túnel. Cuando los intervalos se hicieron lo suficientemente cortos, simplemente los átomos se congelaron en el lugar. Vía gizmodo
¿Qué es el tiempo? 10 Teorías que intentan explicarlo
El tiempo es una cosa sumamente extraña. No todos parecen experimentarlo de la misma forma, pues para algunos pasa muy rápido mientras que para otros es muy lento. Eso sí, parece haber cierto consenso en que, a medida que la persona se hace vieja, más rápido experimenta el paso del tiempo. Muchas teorías han intentado ofrecer un concepto fácilmente comprensible al tiempo y, aunque sean verdaderas o no, cumplen su misión se sembrarnos la curiosidad y hacernos reflexionar algunos instantes.
10 – La teoría de San Agustín entre la relación del tiempo y la mente.
El filósofo cristiano San Agustín creía que el tiempo no era absolutamente infinito. A pesar de que creía que el tiempo había sido creado por Dios, también estaba convencido de que era imposible crear algo que fuera infinito.
También llegó a afirmar que el tiempo solo existe en nuestra mente, llegando a la extraña conclusión de que todo tiene que ver con la forma en que interpretamos esa grandeza. Podemos afirmar que algo duró “mucho” tiempo o “poco” tiempo, pero San Agustín decía que no existe ninguna forma real de cuantificar esto.
Cuando algo se encuentra en el pasado, ya ni siquiera posee las propiedades de ser alguna cosa, pues ese algo ya no existe, y cuando afirmamos que alguna cosa demoró mucho tiempo, simplemente significa que lo estamos recordando de esa forma. Dado que solo medimos el tiempo basándonos en la percepción que tenemos de él, entonces solo debe existir en nuestra mente. El futuro aún no existe, de modo que es imposible tener cantidades medibles de él.
La única cosa que existe es el presente.
9 – La topología del tiempo.
¿Con qué tiene parecido el tiempo? Si intentas imaginar al tiempo, seguramente lo verás como una línea recta que dura para siempre. Peor hay quienes lo ven como una espiral, que gira y gira sin parar. Antes de que te quemes el cerebro intentando deducir alguna respuesta, te ahorraremos el tiempo: evidentemente, no existe una respuesta certera. Pero tenemos algunas ideas intrigantes como respuesta a la pregunta.
Según Aristóteles, el tiempo no puede existir como una línea, por lo menos no con un inicio y un final, aunque probablemente haya existido un tiempo en que bueno… el tiempo comenzó. Para que exista un momento en el que el tiempo inició, tuvo que haber algo antes que marcó su inicio. Según Aristóteles, lo mismo aplica para el final de los tiempos.
También está el problema sobre cuántas líneas de tiempo existe. ¿Acaso existe una línea del tiempo en lo que todo evoluciona junto, o existen varias líneas de tiempo que se cruzan de forma alterna o corren paralelas unas a otras?, ¿el tiempo es una única línea con multitud de ramificaciones? O, ¿acaso en esta corriente hay momentos que existen independientemente de otros momentos?
Existe abundancia de opiniones, aunque ninguna comprobada como verdadera.
8 – La teoría del presente ilusorio.
La idea de los presentes ilusorios aborda la cuestión de cuánto tiempo dura realmente el presente. La respuesta habitual, que dice algo sobre el ser o “ahora”, no es muy descriptiva. Por ejemplo, cuando estamos en medio de una conversación con alguien y decimos una frase, el inicio de la frase ya es pasado, pero la conversación en sí aún tiene lugar en el presente.
Entonces ¿cuánto tiempo dura realmente el presente?
R. Clay y William James refieren a esta idea como el presente engañoso – es decir, el periodo de tiempo que percibimos como presente. Ambos sugieren que este momento puede ser tan corto como unos cuantos segundos y, probablemente, no más que un minuto. De cualquier forma, ellos definen como “presente” a la cantidad de tiempo en la que estamos inmediatamente conscientes.
Entre todo esto, todavía existe un poco de espacio para discutir. En teoría, el presente podría tener algo que ver con la cantidad de memoria a corto plazo que una persona posee. Entre más memoria a corto plazo tiene una persona, mayor es el presente para ella.
También tenemos la idea de que esto no es más que un asunto de percepción instantánea, un segundo pasa y estás confiando en tu memoria a corto plazo un momento que ya no es parte del presente.
Luego tenemos el problema del presente y del presente prolongado, que es justamente donde entra el presente ilusorio. El presente no debe tener una duración de tiempo real, pues si la tuviera parte de ese tiempo estaría en el pasado y parte en el futuro, contradiciéndose a sí mismo. Entonces, el presente ilusorio intenta explicar el presente como un intervalo de tiempo que tiene una duración, aunque sea una cosa totalmente aparte del presente objetivo.
7 – Las personas de baja estatura experimentan el “ahora” más rápido que otras.
Parece extraño, pero tiene sentido. Esta teoría fue presentada por un neurocientífico llamado David Eagleman, y es llamada “conexiones temporales”. Gira en torno a la idea de que experimentamos el mundo en paquetes de información que son reconocidos por nuestros sentidos y procesados por el cerebro.
Diferentes partes del cuerpo, incluso si reciben esa información al mismo tiempo, demoran ligeramente diferentes cantidades de tiempo para transportarla al cerebro.
Imagina que te estás mensajeando con alguien, de repente te golpeas la cabeza con un poste al mismo tiempo que tropiezas con una piedra. En teoría, la información recogida en la herida de tu cabeza llegará más rápido que la información del dolor enviada por el dedo de tu pie, pero tú crees que las sientes al mismo tiempo.
Esto se debe a que existen ciertos patrones cerebrales para una especie de organigrama sensorial que ordena las cosas de forma que hace a las personas sentir por etapas. Ese atraso en el procesamiento de la información es el que hace que las personas de baja estatura sientan el “ahora” un poco más rápido.
Por decirlo de alguna forma, una persona más baja realmente vive una versión más precisa del tiempo, ya que hay menos atraso en la transmisión de información al cerebro.
6 – El tiempo se hace cada vez más lento – y podemos percibirlo.
Desde hace mucho tiempo uno de los problemas más grandes de la física ha sido la existencia de la energía oscura. Podemos notar sus efectos, pero aún no tenemos idea de qué es exactamente. Un equipo de profesores de la Universidad del País Vasco, en Bilbao, y de la Universidad de Salamanca, en España, han sugerido que todos nuestros esfuerzos por encontrar y definir a la energía oscura han sido en vano, simplemente por qué no existe.
En lugar de eso, afirman, todos los efectos de la energía oscura pueden explicarse por la idea alternativa de quelo que realmente vemos es al tiempo disminuyendo su velocidad, y preparándose para una eventual parada.
Véase, por ejemplo, fenómeno astronómico de la dispersión refractiva. Cuando vemos estrellas que tienen una longitud de onda de luz que es roja, sabemos que están acelerando. El grupo de profesores españoles ahora intenta explicar el fenómeno de la aceleración del universo no como el resultado de la presencia de energía oscura, sino simplemente como una ilusión creada por el tiempo en proceso de desaceleración.
A la luz le toma una buena cantidad de tiempo llegar hasta nosotros. A medida que pasa el tiempo, se va haciendo más lenta, proporcionando la ilusión de que todo está acelerando a la distancia. El tiempo es extremadamente lento pero, dado la inmensidad del espacio, se amplía a través de la cantidad incomprensible de distancia, lo que significa que podemos ver eso cuando vemos hacia las estrellas.
También dicen que de forma gradual el tiempo continuará disminuyendo hasta que simplemente se detenga por completo. Momento en que el universo se congelará para la eternidad. Pero no te preocupes, estamos a salvo. Esto sucederá en miles de millones de años, y la Tierra ya no estará aquí.
5 – El tiempo simplemente no existe.
Cuando las personas no logran explicar alguna cosa, esa parece la respuesta más fácil. Pero, de hecho, existe un raciocinio muy interesante tras esta afirmación.
Fue dada a conocer al mundo por primera vez en 1900 por el filósofo J. M. E. McTaggart. Según McTaggart, existen dos formas diferentes de analizar el tiempo.
La primera, llamada Teoría A, dice que el tiempo tiene un orden y fluye a través de un camino; en esta versión del tiempo es posible organizar las cosas según acontecen. Hay una progresión de eventos del pasado para el presente y el futuro.
Por otra parte, con la Teoría B, se afirma que el paso del tiempo en sí es una completa ilusión, y no existe forma de atribuir objetivamente un orden particular para las cosas que acontecen.
Esta versión del tiempo aparentemente está apoyada en nuestra memoria, que tiende a recordar eventos de forma aleatoria. Tomando estas dos teorías en cuenta, el filósofo entiende que el tiempo no existe. Para que exista, sería necesario un cambio continúo de eventos, en el mundo o en las circunstancias. Las teorías A y B, por definición propia, no son una referencia para el paso del tiempo, y no existe cambio comprendido por ellas. Por tanto, el tiempo no existe.
Si la Teoría A por si sola fuera correcta, esto también sugiere que el tiempo no puede existir. Por ejemplo, pensemos en tu primer cumpleaños. En algún momento, este fue un evento en el futuro, pero ahora solo existe en el pasado. Como un momento no puede ser pasado, presente y futuro, McTaggart dice que la teoría es contradictoria e imposible, como cualquier idea del tiempo.
4 – Teoría de la cuarta dimensión y el universo de bloque.
La teoría de la cuarta dimensión y la teoría del universo de bloque se relacionan con la idea del tiempo como una dimensión real. En la cuarta dimensión, todos los objetos (evidentemente) existen en cuatro dimensiones en lugar de tres, y la cuarta dimensión, el tiempo, puede pensarse en términos de las otras tres dimensiones.
La teoría del universo de bloque imagina al universo entero como un bloque dimensional conformado por rebanadas de tiempo. Tiene largo, ancho y alto. Todo y cada evento tiene una medición cuantificable, dado que existen capas de tiempo que forman su todo.
Según esta teoría, cada persona es un objeto tetradimensional que existe en capas de tiempo. De esta forma existen capas de tiempo para la primera infancia, la infancia, para la adolescencia y así sucesivamente.
Así, esta teoría entiende que el tiempo, por sí solo, no existe. Pero sí hay un pasado, presente y futuro, y cada punto dentro de un bloque es cualquiera de estas tres cosas en referencia a otros puntos del tiempo.
La teoría del universo en bloque también deja espacio para la idea del tiempo infinito, pasado y futuro, diciendo que el bloque bidimensional puede extenderse hasta el infinito en cualquier dirección. Esto no deja espacio para un cambio en el futuro, toda vez que el suceso de los eventos en el bloque de tiempo ya existe, y lo que llamamos futuro ya fue decidido.
3 – El tiempo no tiene “velocidad”.
Ocasionalmente conocemos relatos de personas que, estando en una situación de muerte inminente, afirman que el tiempo pasó más lento (otros dicen que toda su vida pasó frente a sus ojos). Muchas veces esto tiene lugar cuando nos vemos frente a una gran decisión, o cuando algo completamente inesperado acontece.
Es un fenómeno tan difundido que ha existido mucha discusión sobre si estamos permitiendo al tiempo ir más despacio para procesar toda la información a la que nos estamos enfrentado.
Los investigadores intentaron entender el significado. Según su conclusión, seríamos capaces de ver las cosas con una mayor claridad, y de elegir más detalles a medida que las imágenes pasan por nosotros.
El cerebro tiende a mezclar estímulos a medida que las cosas suceden, de forma que la información se recibe con menos de 80 milisegundos de intervalo. Por lo tanto, si el tiempo desacelera, la expectativa es que las personas pasen a reconocer estímulos como eventos separados.
Tras varios experimentos, los investigadores llegaron a la conclusión de que una experiencia que “desacelera” el tiempo sugiera que no es el momento el que pasa más lento para nosotros, sino nuestro recuerdo del tiempo.
2 – Chronos, Cronos y el padre del tiempo.
Antes de que los filósofos griegos pensaran en una forma de explicar el tiempo, había una explicación mitológica que incluía a una figura llamada el “Padre del Tiempo”. Antes de que existiera cualquier otra cosa, estaban los dioses Ananké y Chronos.
Chronos era el dios del tiempo, y lo imaginaban como parte hombre, parte león y parte toro. Sin lugar a dudas una figura fascinante. Ananké, una serpiente enrollada en torno al huevo del mundo, se veía como el símbolo de la eternidad.
Chronos también aparece en la mitología grecorromana, donde se encuentra representado dentro de la rueda del zodiaco. Como a esta rueda no la gobierna el tiempo, puede ser joven o viejo. Chronos era el padre de dos titanes y muchas veces mencionado como sinónimo de Cronos, que también fue asociado con el tiempo. Cronos fue el responsable por castrar a su padre, y más tarde muerto a manos de su propio hijo, Zeus.
Chronos también era responsable por la progresión del tiempo a través de las estaciones y a través de los años, desde el inicio, pero las cosas que sucederían con los hombres y mujeres dentro de ese tiempo eran comandadas por otras figuras.
Generalmente nos referimos al tiempo a través de las cosas que suceden a medida que van pasando. Crecemos y, en seguida, no hacemos viejos. Este ciclo de vida del hombre no fue dominado por el dios del tiempo, sino porlas Moiras, Cloto se convirtió en el hilo de la vida, comenzando el ciclo para todo. Láquesis midió durante cuando tiempo duraría el tiempo, mientras que Átropo cortaría ese hilo. Las Moiras predecirían eventos futuros, así como el destino que ya habían escrito.
1 – No somos buenos en percibir el tiempo.
El tiempo parece ser un asunto implícito para todos. Es lo que es. Pero la gran verdad es que es un dolor de cabeza en los primeros segundos de discusiones sobre temas como la física y el espacio, dimensiones y todos los asuntos periféricos posibles.
No somos realmente nada buenos en hablar sobre el tiempo, sin embargo, tenemos parámetros pare medirlo y probarlo.
Por un lado, existe un tiempo sideral, que es el tiempo medido por la posición de las estrellas y de la rotación de la Tierra. Esto, evidentemente, varía un poco, por eso tenemos también el día solar. Este se basa en la cantidad de tiempo que le toma a la Tierra hacer una única rotación sobre su propio eje, lo que también es muy variada.
Es por eso que, para contar un año solar, requerimos de la medida de las rotaciones para llegar a nuestro sistema de tiempo.
Sin embargo, a comienzos del siglo XX, científicos y astrónomos notaron que la rotación de la Tierra se hacía más lenta. Crearon el tiempo de efemérides para cubrir posibles variaciones, pero el parámetro quedó obsoleto en 1979.
A continuación llegó un tiempo dinámico terrestre, que fue más preciso. Esta métrica se vio interrumpida en 1991, cuando se rebautizó técnicamente como “tiempo terrestre”.
Si crees que mantener un par de husos horarios parece complicado, eres un inocente que no tiene ni idea. Aún en nuestros días, las posiciones de las estrellas y otros cuerpos solares son usadas en conjunto con el tiempo dinámico terrestre, pero como el resto del mundo no tiene un estándar de tiempo universal, se requiere una forma de convertir los dos para que todos se ubiquen.
En resumen, simplemente no tenemos idea de qué hacer con el tiempo, incluso siendo sus esclavos todos los días. Hasta la cuestión más simple relacionada con esa variable es una gran incógnita, capaz de quemar a los cerebros más inteligentes. listverse
Son las enemigas de los viajes en el tiempo, y también algunas de las excusas que usan los científicos para no meter sus narices en este asunto. Hay muchas paradojas implicadas con viajar en el tiempo, aquí te presentamos 10 de esas paradojas que ponen en evidencia la complicación que tiene la existencia de unamaquina del tiempo.
1) Paradoja del abuelo: Sin duda, la paradoja temporal más famosa. Supongamos que un viajero en el tiempo vuelve al pasado para matar a su propio abuelo cuando aun es joven, entonces el padre del viajero no tendría porque nacer, mucho menos el viajero. Pero, ¿qué pasaría con el viajero? Dejaría de existir? Y las leyes de la conservación de la masa / energía serían violadas?
2) La paradoja de la acumulación: Imagina que alguien regresa de nuevo a un punto determinado en el pasado, donde, originalmente, era él. Entonces, encuentra a su propia copia (o más bien su estado original pasado). Si vuelve a este punto en la historia en otras ocasiones, entonces estaría viendo múltiples copias de si mismo.
3) La paradoja de los desplazamientos en tránsito: los viajeros en el tiempo llevan consigo su propio tiempo – el momento exacto en el que emprendieron su viaje – y no puede ser afectado por los cambios que se produjeron después de su partida. ¿Qué pasa con el tiempo después de su viaje y de que forma lo afectan estos cambios, que supuestamente no pueden producirse?.
4) La paradoja final: Creada por un viajero del tiempo que cambia la historia para que el viaje en el tiempo no se inventara.
5) La paradoja de la historia hacia atrás: Cuando la gente del futuro que no han nacido en el momento de los acontecimientos ya ocurridos y registrados históricamente, y terminan convirtiéndose en protagonistas de los acontecimientos pasados.
6) Paradoja de los bucles de información: ocurre cuando la información se envía desde el futuro hacia el pasado para convertirse en la fuente inicial de la misma información, tal como existía en el futuro.
7) Bucle de la paradoja sexual: Ocurre cuando un viajero vuelve en el tiempo para tener relaciones sexuales con un antepasado y convertirse en un ancestro de sí mismo.
8 ) La paradoja del Fraude: Cuando alguna acción en el pasado, causada por un viajero del tiempo desde el futuro, afectará a la línea de tiempo, y luego la última versión del mismo viajero decide no realizar la acción, al llegar a ese punto en el futuro.
9) La paradoja de las alternativas de línea de tiempo: De acuerdo con esta paradoja, el pasado no puede ser modificado, y cualquier intento de cambiarlo terminará en la creación de una línea temporal alternativa, la existencia paralela a la línea del tiempo original desde el punto de cambio. La sola llegada del viajero en el pasado podría provocar una línea temporal paralela.
10) La paradoja de Causa y Efecto: Si alguien viaja en el pasado, para modificar un evento o la causa de este en el presente, el motivo o la razón del viaje dejaran de existir en el presente. Esta paradoja se basa en la película “La máquina del tiempo”.
Una posible explicación a toda esta pesadilla la ofrece Frank Tipler: “si alguien viaja al pasado se vuelve parte del pasado por esto no puede cambiar ni el pasado ni el futuro”.
El tiempo es relativo, y no solamente desde el punto de vista del espectador como mencionó Einstein en su teoría de la relatividad espacial. El tiempo también suele ser relativo desde la lógica humana, nuestra forma de aprender la historia sigue la cronología de una línea del tiempo que muchas veces se ve interferida por lo preceptos y derivaciones que nos sugiera la lógica.
¿Creerías que la universidad de Oxford es más antigua que los aztecas? O ¿Qué la Warner Bros fue fundada cuando aún existía el Imperio Otomano? Dale un vistazo a estas 10 serendipias temporales que te harán repensar la noción que tenemos del tiempo.
1. Cleopatra vivió más cerca de la construcción de la primera Pizza Hut que de las pirámides.
La Gran Pirámide de Guiza fue construida en las proximidades del año 2,560 a.C, mientras que Cleopatra VII vivió alrededor del año 30 a.C. El primer restaurante de Pizza Hut abrió sus puertas en el año 1958, unos 500 años más próximo a la existencia de la emperatriz.
2. La Universidad de Oxford es más antigua que el imperio azteca.
Las enseñanzas en Oxford iniciaron en el año 1096, y en 1249 la Universidad era fundada de forma oficial. Mientras que la civilización azteca como la conocemos, comenzó con la fundación de Tenochtitlán hacia el 1325.
3. John Tyler, el décimo presidente de los Estados Unidos, aún tiene dos nietos con vida.
John Tyler cumplió su mandato como presidente de los Estados Unidos entre los años 1841 y 1845. A la edad de 63 años tuvo a su hijo Lyon. Lyon a su vez se convertiría en padre de Lyon Jr y Harrison a los 71 y 75 años, respectivamente. Ambos se encuentran aún con vida con más de 80 años de vida.
4. Francia aun ejecutaba a las personas en guillotinas cuando Star Wars fue estrenada.
Star Wars se estrenó en los cines estadounidenses en mayo de 1977. La última ejecución por guillotinaconocida en Francia tuvo lugar el día 10 de septiembre del mismo año, el último desgraciado en morir de esta forma en aquel país fue un hombre llamado Hamida Djandoubi.
5. Cuando la Warner Bros fue fundada, el Imperio Otomano aún existía.
Los hermanos Harry, Albert, Sam y Jack Warner fundaron la W.B en el año de 1903. El Imperio Otomano existió entre 1299 hasta el 1923, cuando Turquía se convirtió en una nación independiente.
6. Si tienes más de 45 años, la población mundial se duplico durante tu existencia.
En el año de 1968, la población mundial era de 3 557,000 000. Actualmente, la población mundial se aproxima a los 7 220,292 000 y crece a un impresionante ritmo de 200,000 unidades por día.
7. Si la historia de la Tierra fuera representada en apenas un año, los humanos modernos aparecerían el día 31 de diciembre a las 23h58.
Historiadores y científicos afirman que los seres humanos han vivido en la Tierra un apenas un 0.004% de su historia.
8. Existe más poder de procesamiento en una calculadora TI-83 que en la computadora que llevó al hombre a la Luna.
El computador responsable de los sistemas de la Misión Apolo 11 funcionaba a 1,024 MHz, cerca de una sexta parte del poder de procesamiento de una calculadora TI-83 de Texas Instruments.
9. Cada dos minutos, tomamos más fotos de las que toda la humanidad tomó durante los años de 1800 y 1900.
La fotografía de la izquierda fue la primera tomada en el año de 1826, y retrata la vista de Le Gras, Francia, desde la la ventana del Inventor Joseph Nicéphore Niepce. La foto de la derecha muestra a un gato que accidentalmente tomó una foto de sí mismo en 2013. Se estima que en 2014 los humanos tomarán un total de 880 mil millones de fotografías.
10. Hay ballenas vivas que nacieron antes de que Moby Dick fuera escrita.
La ballena de Groenlandia o ballena boreal que viven cerca de Alaska pueden alcanzar hasta los 200 años de edad. Algunas de ellas nacieron antes que el clásico de la literatura, Moby Dick, fuera escrito en 1851.
Desde que adquirimos las primeras nociones sobre números en nuestra vida, cuando apenas eramos unos niños, ciertamente supimos que un minuto tiene 60 segundos, una hora 60 minutos y un día 24 horas. Pero, ¿alguna vez te preguntaste porqué es así? Probablemente nunca lo hayas hecho.
La historia de porqué nuestro tiempo se divide así
En nuestra vida diaria usamos de forma cotidiana el sistema decimal (basado en el 10), que surgió y se estableció por la facilidad que suponía contar con las manos. Pero en el pasado, algunas civilizaciones utilizaban el sistema duodecimal (basado en el número 12), pues utilizaban el número de ciclos de la luna en un año que es igual el mismo número de articulaciones en los dedos de una mano, excluyendo al pulgar que es utilizado para contarlas.
Por esa razón, cuando surgieron los primeros relojes solares – que eran postes clavados en el suelo marcando el tiempo según el tamaño de la sombra – aproximadamente en el año 1500 a.C, los egipcios desarrollaron un sistema más avanzado y como utilizaban el sistema duodecimal, terminaron por dividir el día en 12 partes.
Pero había un problema: ¿Cómo medir el tiempo por la noche? La cosa era más complicada de lo que parece, ya que ellos no establecían una conexión entre el día y la noche, consideraban ambas cosas como entes separados, como cosas diferentes.
Así que basaron la división del tiempo nocturno en las estrellas, y señalaron que 18 de ellas aparecieron y se movían en el cielo de la noche, seis de ellas fueron puestos a un lado, tres para representar a la tarde o el inicio de la noche, y otras tres que significaban la salida del sol, ese período en que las estrellas son difíciles de ver. Así,las doce restantes marcaron las horas de la noche, lo que curiosamente daba el mismo número de divisiones en el periodo en que había sol. Así nuestros días terminaron teniendo 24 horas.
Pero el sistema era impreciso, la duración del día y la noche cambiaba conforme a la época del año. Fue sólo hasta el período helenístico cuando se establecieron las medidas más correctas. Dividieron el día en 24 horas, pero basados en el día del equinoccio, cuando el día y la noche tienen la misma duración, creando así un patrón.
La división de las hora y los minutos se atribuye a los griegos, que utilizaron técnicas astronómicas creadas por los babilonios, quienes utilizaron el sexagesimal (base 60) para hacer sus cálculos, por lo que determinaron que las horas y los minutos se dividían por 60, según la tradición babilónica. Pero lo que nadie sabe es por qué este número fue escogido por los babilonios en el pasado, alrededor de 2000 a.C, pero se cree que es debido a que el número sesenta es el más pequeño que es divisible por las seis primeras cifras (1, 2, 3, 4, 5 y 6), además de también ser divisible por 10, 12, 15, 20 y 30.
Esa es la historia de porqué nuestro tiempo se divide de esta manera.
¿Qué es el tiempo? ¿Acaso el movimiento del segundero del reloj, el nacimiento y la puesta del Sol, el despertador sonando, la arena que cae del bulbo, las estaciones del año cambiando, las hojas del calendario? Parece fácil pero en realidad no lo es y, de hecho, hablar sobre el tiempo puede ser mucho más complicado de lo que imaginas. En seguida te presentamos algunos misterios sobre el tema.
1. El tiempo y la meditación.
El proceso de meditación no es para cualquiera. Lo cierto es que casi todo el mundo puede mantener una determinada posición y cerrar los ojos, tan cierto como que eso no es la meditación. Se trata del mayor reto para quien intenta conseguir controlar su propia mente y mantener el pensamiento enfocado en los sentimientos del presente.
Las técnicas de meditación incluyen la búsqueda de la comprensión de propio cuerpo, cuando la persona debe prestar atención a factores como la respiración, los latidos del corazón y todo lo que siente en aquel momento. Ahí es cuando tú, ciudadano promedio, lo intentas y después de un minuto ya estás recordando todo lo que pasó la semana anterior e imaginando el viaje de las vacaciones a fin de año.
Por eso es tan difícil meditar: porque nuestra mente no se encuentra condicionada a vivir en el momento presente. Por el contrario: gusta de recordar el pasado y planear el futuro. Ahí es cuando todo se vuelve tan difícil.
Uno de los principios del budismo, ya defendido por pensadores como William James y por figuras como George Harrison, es insistir en los intentos de vivir el ahora. Y por no vivir en el ahora o por vivir en un ahora siempre de la misma forma parece que el tiempo pasa tan rápido. Se ha comprobado que la meditación, por otro lado, tiene el poder de dejar nuestra percepción del tiempo un tanto más demorada.
La meditación es una herramienta de mucha utilidad para personas ansiosas y depresivas. Por eso, por más difícil que parezca, intenta meditar de vez en cuando. Puede ser que al comienzo te sientas ridículo, pero es sólo cuestión de práctica. La regla es intentar vivir el ahora.
2. El año bisiesto.
Cada cuatro años al mes de febrero se le incrementa un día más de lo habitual. Esto sucede porque un año, al contrario de lo que acostumbramos a creer, no tiene exactamente 365 días: en realidad, el valor más aproximado es de 365 días, 5 horas, 49 minutos y 12 segundos. Por lo que, para compensar ese “sobrante”, cada cuatro años se inserta un día.
Si este ajuste no fuera hecho, después de 30 años, el año pasaría a tener una semana menos y, después de algunos siglos, esta diferencia sería de meses, lo que tiraría al caño el esquema de las estaciones del año, por ejemplo. Si quieres conocer un poco más sobre los años bisiestos puedes hacerlo justo aquí.
Los años bisiestos no son tomados en cuenta en varios países. Muchas personas no pueden renovar su licencia de conducción o abrir cuentas en bancos el día 29 de febrero, toda vez que algunos sistemas de computadoras simplemente no reconocen la fecha como un día legítimo. Incluso Google llega a confundirse: hay muchos bloggers que no pueden actualizar sus perfiles en esa fecha.
3. Percepción.
Ya hablamos de cómo la meditación puede cambiar la forma en que percibimos el tiempo. Esta cuestión de relatividad es tan verdadera que el presentador de televisión estadounidense, Johnny Carson, llegó a llamar “minuto Nueva York” al tiempo que transcurre entre el momento que la luz del semáforo se pone en verde y el momento en que la persona que viene atrás toca la bocina.
La idea de Carson era precisamente llamar la atención de las personas sobre la velocidad a la que transcurren las cosas en la Gran Manzana, donde todo parece ir más rápido en todo momento. Por otro lado, en ciudades muy grandes y con mucha información, es común que las personas a veces tengan la sensación de que el tiempo se detiene durante algunos segundos.
Eso sucede, por lo general, cuando la cabeza realiza un movimiento brusco. La explicación para esto es que cuando la velocidad es lo suficientemente alta, el cerebro termina por perder algunas informaciones que debería recibir, por eso la persona experimenta la sensación de que el tiempo demora más en transcurrir.
4. Musicalmente hablando.
Si cuando escuchas aquella canción favorita, con el volumen al máximo y auriculares al oído, tienes la sensación de que te transportas a otro lugar o de perder la noción del tiempo, tienes que saber que no estás solo en el mundo.
Ya se sabe, por ejemplo, que cuando la música desencadena una experiencia de gran intensidad, el cerebro humano tiene reacciones diferentes en su córtex sensorial, desencadenando una sensación de atemporalidad.
Si escuchas música clásica – especialmente esta– tu cerebro no logra interpretar las pulsaciones por minuto, gracias a que éstas son intencionalmente erráticas y se alternan en todo momento. Estas irregularidades promueven en el cerebro una sensación de que el tiempo no está transcurriendo. El inicio de la música es lento, después acelera y, finalmente, se vuelve muy animado y lleno de energía. Si te concentras en la pista, tal vez ni te des cuenta que pasaron 30 minutos hasta el final de la composición.
Esta capacidad de distorsionar nuestra percepción del tiempo hace de la música una herramienta manipuladora del comportamiento. Es gracias a esto, por ejemplo, que las escuelas de gimnasia eligen música electrónica y, al contrario, los restaurantes música más tranquila y relajante. Lo mismo sucede con algunas tiendas, que apuestan por la música para volver el ambiente más atractivo y agradable.
Algunos estudios recientes comprobaron que la música relajante provoca que los consumidores permanezcan más tiempo al interior de algunas tiendas, lo que nos lleva a la conclusión de que las canciones relajantes no hacen perder la noción del tiempo en repetidas ocasiones.
5. El tiempo y la edad.
¿Recuerdas aquel ataque terrorista de 2001? Pareciera que fue ayer, ¿verdad? Pero están a punto de cumplirse 13 años. Y es que a medida que el tiempo pasa, las personas van envejeciendo, y la sensación de que “parece que fue ayer” es cada vez más común.
A esto también se le conoce como “efecto telescópico”, y es responsable por la ilusión de que los años pasan más rápidamente cuando nos hacemos más viejos. Este “tiempo telescópico” es fruto de una discrepancia entre la medida de tiempo tradicional y la noción del tiempo de cada individuo, algo con una base muy subjetiva.
Pero si no compartes la idea de la subjetividad, ¿qué tal abordar el asunto desde una perspectiva matemática? Por ejemplo: cuando tienes 10 años, un año de tu vida representa el 10% de esta. Ahora, cuando llegas a los 60 años, un año pasa a representar el 1.67% de la vida. La cantidad de tiempo es la misma, pero la proporción, definitivamente no lo es.
Aunque existe otra explicación para la sensación de que “los años pasan volando”: cuando caemos en una rutina adulta sin muchas novedades y aventuras, nuestra sensación del tiempo pasa a ser más acelerada. Esto sucede porque nuestro cerebro simplemente tiende a saltarse la información conocida y concurrente, causándonos la impresión de que el tiempo pasa a mayor velocidad.
¿Te has dado cuenta como un viaje de ida parece mucho más largo que el de vuelta? Eso sucede justamente porque el cerebro ya conoció el camino y, a la hora de volver, terminas por ignorar muchas cosas, por lo que el tiempo parece pasar más rápidamente.
Este concepto es preocupante si pensamos en él. Significa, básicamente, que hacer siempre las mismas cosas ayudará a que el tiempo pase más rápido. Si esa no es tu intención, estás a tiempo de vivir nuevas experiencias.
Una vez que veas los números que se generan automáticamente en este post, pronto te darás cuenta de quetodos tenemos edades diferentes en diferentes planetas. Esto nos lleva a la cuestión de cómo definir los intervalos de tiempo que medimos. ¿Qué es un día o qué es un año? La tierra, como todos sabemos, está en constante movimiento. En realidad, son varios movimientos diferentes, todos a la vez. Sin embargo, hay dos principales y concretos que nos interesan: rotación y traslación.
La rotación de la tierra es la hace girar el planeta alrededor de sí mismo, es decir, en torno a su propio eje, como un trompo. Este movimiento ocurre en sentido anti-horario, de oeste a este, y dura aproximadamente 24 horas. Gracias a este movimiento, luz del sol gradualmente ilumina diferentes áreas del mundo, lo que resulta en una sucesión de días y noches en diferentes puntos de la superficie terrestre.
Mientras que el movimiento de traslación es el que lleva a la Tierra alrededor del Sol junto con los otros planetas del Sistema Solar. En este movimiento la tierra recorre un camino -también conocido como órbita-, que tiene la forma de una elipse, viajando a una velocidad media de unos 107,000 km por hora, y el tiempo requerido para completar una vuelta completa es de 365 días, 5 horas y 48 minutos, o un año.
Todos aprendimos en la escuela que los planetas se mueven a diferentes velocidades alrededor del sol. Mientras que la Tierra tarda 365 días para hacer un circuito, el planeta más cercano, Mercurio tarda sólo 88 días. El pobre, lejano y gélido Plutón tarda 248 años en completar su deslumbrante traslación. A continuación se muestra una tabla con los índices de rotación y tasas de traslación de todos los planetas.
Planeta
Rotación (días)
Traslación (años)
Mercurio
58.6
0.24
Venus
243
0.62
Tierra
1
1
Marte
1.03
1.88
Júpiter
0.41
11.86
Saturno
0.45
29.46
Urano
0.72
84.01
Neptuno
0.67
164.79
Plutón
6.39
248.59
Para conocer tú edad en otros planetas, simplemente introduce la fecha de tu nacimiento (Ten en cuenta que debes introducir el año como un número de 4 dígitos) Y haz clic en el botón Calcular. Su edad en días y años aparece automáticamente, así como la fecha de su próximo cumpleaños:
Imagínate que hay un banco que cada mañana te da un crédito por 86,400 pesos, la cantidad no varia de un día a otro es la misma cada mañana, no te pide que mantengas ningún saldo mínimo y cada noche cancela cualquier parte de la cantidad que no hayas podido utilizar durante el día. ¿Qué harías?, obviamente retirar hasta el ultimo centavo, ¿verdad?. Bueno, cada uno de nosotros tiene una cuenta en ese banco, se llama tiempo. Todas las mañanas nos acredita con 86,400 segundos. Cada noche hace una baja, y da como perdido, cualquier cantidad que no hayas invertido en un buen propósito. No permite sobregiros y cada día se abre una cuenta nueva para ti. Si no has podido utilizar la cantidad del día, entonces la perdida es tuya, no del banco. No hay vuelta atrás, no se permite pensar en el mañana. Debes vivir el presente con el deposito de hoy. Inviértelo de forma que obtengas salud, éxito y felicidad.