VALIO LA PENA

Quizás yo envejezca demasiado rápido. Pero lucharé para que cada día haya valido la pena.

Puede ser que yo sufra innumerables desilusiones en el correr de mi vida, pero haré que pierdan importancia ante los gestos de amor que encuentre.

Tal vez yo no tenga fuerzas para realizar todos mis ideales, pero jamás me consideraré derrotada.

Tal vez en algún instante yo sufra una terrible caída, pero no me quedaré por mucho tiempo mirando hacia el suelo.

Tal vez un día el sol deje de brillar, pero entonces, me iré a bañar en la lluvia.

Quizás un día yo sufra alguna injusticia, pero jamás asumiré el papel de victima.

Puede ser que yo tenga algunos enemigos, pero tendré humildad para aceptar las manos que se extiendan en dirección mía.

Tal vez una de esas noches frías yo derramaré muchas lágrimas, pero no me avergonzaré por ese gesto.

Tal vez sea engañada innumerables veces, pero no dejaré de creer que en algún lugar alguien merece mi confianza.

Tal vez con el tiempo yo perciba que cometí grandes errores, pero no desistiré en continuar mi camino, tras corregirlos.

Quizás con el correr de los años yo pierda grandes amistades, pero aprenderé que nunca perderé a los que realmente son mis verdaderos amigos.

Tal vez algunas personas me deseen un mal, pero continuaré plantando la semilla de la fraternidad por donde yo pase.

Tal vez yo quede triste al concluir que no consigo el ritmo de la música, pero entonces trataré que la música siga el compás de mis pasos.

Quizás yo nunca alcance un arco iris, pero aprenderé a diseñar uno, aunque sólo sea dentro de mi corazón.

Puede ser que yo hoy me sienta débil, pero mañana recomenzaré de nuevo, aunque sea de manera diferente.

Tal vez yo no aplique las lecciones necesarias, pero tendré la conciencia que las verdaderas enseñanzas ya están grabadas en mi alma.

Tal vez yo me deprima por no ser capaz de cantar la letra de aquella música, pero quedaré feliz con las otras que he deletreado y las que poseo.

Tal vez la voluntad de abandonar todo se vuelva mi obsesión, pero en vez de huir, correré tras aquello que anhelo.

Quizás yo no tenga motivos para grandes celebraciones, pero no me dejaré de alegrar con las pequeñas conquistas.

Tal vez yo no sea exactamente quien me gustaría ser...Pero no dejarè de admirar quién soy.

Porque al final sabré que, a pesar de mis defectos, soy capaz de construir una vida mejor.

Y si aún no me convencí de eso, es porque....

"aùn no se baja el telòn"

Porque al final no habrá ningún "tal vez", y sí la certeza de que mi vida valió la pena y que yo hice lo mejor que pude...