No es vuestra guerra, sino de Dios
"Oíd, Judá todo, y vosotros moradores de Jerusalén, y tú, rey Josafat, Jehová os dice así: No
temaís ni os amedrentéis
delante de esta multitud tan grande,
porque no es vuestra guerra sino
de Dios"(2Crónicas20:15)
Es terrible como en un momento determinado nuestra vida puede convertorse en un temor constante frente a las circunstancias que nos rodean. No voy a negar que como humanos que somos, débiles y faltos de fe, tendemos a procuparnos por todo, más aun cuando vemos que la guerra que tratamos de luchar la estamos perdiendo.
Y es que por los afanes de la vida y el temor humano muchas veces olvidamos que la guerra no es nuestra, que no está en nosotros la capacidad para vencer o salir derrotados, que nuestras fuerzas no dependen de lo humano ni de lo terrenal, sino de Dios.
Quizás un momento de esos donde ves a una a multitud contra ti, donde todo te está saliendo mal y donde lejos de ver el sol sólo ves nubes muy nubladas y grises. Pero es ahí donde humanamente no se puede hacer nada o nuestras fuerzas son insignificantes frente al adversario cuando Dios sale a nuestro rescate y nos recuerda lo siguiente: "La gerra no es vuestra sino mía".
Y es que ¡Cuidado! Con el que se mete con un hijo de Dios, porque nuestro Padre sale en nuestro auxilio, pues Él es pronto en auxilio en la tribulación y quién levanta nuestra cabeza.
Este día Dios quiere decirte: "No temas ni te amedrentes delante de esa multitud", pueda que tengas detrás de ti una multitud de problemas que quieren intimidarte, amedrantarte, robarte la paz y el gozo que Dios ha depositado en tu vida, pero déjame decirte que esta en hora no tienes NADA que temer, porque te tengo una más que excelente noticia: "LA GERRA NO ES TUYA",
Ya deja de pensar cómo vas ha hacer. ya deja de pensar cómo vencerás, no te rompas más la cabeza
pensando en las soluciones humanas que puedan haber, porque esta guerra no es humana ni terrenal, sino espiritual porque Jehová de los Ejércitos está de nuestro lado, ante esto, ¿porque temer?.
Hermanos (as) tenemos que comprender que esta guerra no es nuestra, que ahora ya no vivimos según nuestras propias capacidades, sino que nuestras capacidades fueron depositadas delante de Dios para que Él haga lo que le parezca bien y frente a esta rendición humana ante la Divinadad de Dios debes estar seguro que tienes todo que ganar y nada que perder, porque hasta el día de hoy Jehová de los Ejércitos no ha perdido ni una sola guerra. Ya no luches más, sólo déjale las cosas al Señor que Él tiene mil y una formas de solucionar dicha situación, tu sólo confía totalmente en sus palabras, porque si Dios dijo, entonces Dios hará.
"No tmas, la guerra no es tuya. es del
Señor, Él peleara por ti y vencerá"