Lamentablemente, son muchas las personas que todavía no se dan cuentade que viven condicionadas por una sociedad que a todas horas y a través de diferentes medios, trata de programarles sus vidas. Estas personas, son esclavas de unas ideas ajenas que les someten a un ritmo de vida que no es el suyo propio y que incluso en algunas ocasiones, les lleva al límite de sus posibilidades, con tal de conseguir los objetivos que les han impuesto los demás.