Cicatrices del alma
"Más yo haré venir sanidad para ti, y sanaré tus heridas, dice Jehová; porque deshechada te llamaron, diciendo: Esta es Sion, de la que nadie se acuerda" Jeremías 30:17.
Las contusiones y heridas recibidas sobre nuestro cuerpo, cuando son severas; nos dejan una marca (cicatriz) permanente, de por vida. Personas que han sufrido accidentes, han estado en una guerra, o han sido votimas de violencias fisica y maltrato, conservan en sus cuerpos una marca que les recuerda un momento trágico momento de sus vidas.
Pero hay heridas que son invisibles a nuestros ojos fisicos pues no se trata de heridas del cuerpo, sino del alma. De alguna manera u otra, la mayoría de nosotros cuenta con estas heridas del corazón.
Estas cicatrices pasan la mayoría de las veces inadvertidas para los demás. Sonreímos, saludamos, conversamos con los demás en forma normal. Somos a veces a los ojos de los demás, personas felice que la vida les sonríe. Pero bien sabemos que al reflejarnos al espejos de nuestros recuerdos, vemos allí las heridas que solamente podemos ver nosotros y Dios.
Surge entonces en nosotros un sentimiento de impotencia, que exclama en un suspiro silencioso: Ah si alguien supiera de mis heridas y de mis tristezas.
Quizá ninguna persona las sepa, pero Dios si las sabe. Quizás me diga que esto no es ninguna noticia nueva, pero déjame mostrarte este versículo de la Biblia donde declará la actitud que toma Dios, hacia los heridos del alma. "Él sana a los a los quebrantados de corazón, y liga sus heridas".
Muchas personas por impotencia frentea las heridas sufridas en el pasado, se rebelan contra Dios, cerrándole la puerta de su corazón. Es cómo quien se enoja cotra su médico, porque padece una dolencia..
Uno puede estar toda su vida preguntandose ¿Porque me afectó esto a mí? Aveces puede encontrar la respuesta y otras veces no. Pero lo cierto es que continuar en este estado, de autocompasión, sin entregar nuestra vida al "médico divino", antes que mejorar, nuestro estado empeorará.
Estimado amigo/a:
Cristo entiende de heridas Él fue herido en la cruz del calvario por todos nosotros. Su cuerpo fue maltratado, por los clavos, azotes y la corona de espinas. Aún más , fue despreciado, recibií burlas e insultos. Pero sobre todas las cosas, el mayor dolor infringido fue que todos nuestros horrendos pecados fueron cargados sobre Él. Nosotros fuimos quienes le provocaron las heridas a Cristo.
No se si algún día vendrán a pedirle perdón aquellas personas que le firieron. Pero si se, que puedes it hoy a Jesús y pedirle perdón por tus pecados, perdón por haberlo rechazado, aceptar la Salvación que Él le da y la sanidad que enviarte a ti.
¿Aquel que sufrió heridas, acaso no comprenderá las suyas? ¿Aquel Dios de amor que vino a buscarte, no querrá salvarte? ¿No estará dispuesto a sanar a los "quebrantados de corazón cómo dice su Palabra?.
El Señor Jesús describe en la Biblia a lo que ha venido a este mundo, Preste atención a lo que Ël dice: "El Espíritu del Señor es sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los pobres de corazón; A pregonar a los cutivos libertad, Y vista a los ciegos; Aponer en libertad a los oprimidos" Lucas 4:18.
El médico divino quiere tratar su alma. Su amor es la medicina, eficaz que nos cura. Sus manos amorosas, quieren limpiar sus pecados y vendar sus heridas. No más cicatrices del alma, sino sanidad de Dios.
¡Dejese curar!
Ministerio Internacional
http://www.gabitogrupos.com/fuente-de-vida/general.php Fondo Myriam_Lhamya
|