Kathryn Kuhlman

¿Era la forma como caminaba sobre el escenario y teatralmente desfilaba a través de
él en su arrollador vestiodo blanco lo que dejaba tal marca sobre la gente? ¿O era el
"Holaaaa, ¿Han estado esperando por mí?" con lo que comenzaba cada transmisión de
radio? Posiblemente era su acento distintivo y la enunciación de las palabras, que  dejaba
tales frases como "YO crEEEO en los milaaaaagros" sonando en los oídos de la gente.

Donde quiera que iba, cualquier cosa que hacía, Kathryn Kuhlman (1907-1976) dejaba
una impresión en todos.

Criada en Concordia, Missourí, la muchacha flacucha de pelo rojo probó su primera
experiencia en el ministerio en 1924 cuando se unió a su hermana mayor y a su
cuñado que era un evangelista itinerante. El equipo tuvo dificultades tanto financiera-
mente como en sus relaciones, y Kathryn finalamente los dejó.  Después de predicar
por todo Idaho, Kulhman llegó a Denver, Colorado, donde por cinco meses ministtró
en un almacén repleto a plena capacidad cada noche. Con el tiempo, se construyó
el "Tabernáculo de Avivamiento" de Denver, Colorado y como las personas venían de
todo el país, KKuhlman fue testigo de miles de almas salvadas durante los próximos
años.

Con el crecimiento del ministerio de Kathryn Kuhlman vinieron varios reverses. Su padre,
con el que ella había tenido una relación especialo murió en un accidente automovi-
listico. Miembros de su propio equipo la traicionaron, atacaron su carácter públicamen-
te e intentaron llevarse una parte de las ganancias con el evangelista Burroughs Wakltrip
y su final divorcio, un aspecto exgtremadamente atípico de su vida en el que ella no
hizo caso de las advertencias del Espíritu Santo, Kuhlman sufrió las consecuencias de
una relación condenada a fracasar desde el principio.

Sin embargo a través de estas y otras pruebas Kuhlman se volvió más quebrantada
y más dependiente del Espíritu Santo. Enfrentando cada reunión con la misma
desesperación: si el Espíritu Santo no la usaba, ella quedaría como una tonta.
Sin embargo, Dios la usó poderosamente, y durante las décadas de 1650 y 1970
millones de escépticos, desechados de la sociedad e incrédulos vinieron a Cristo
a través de las señales milagrosas que veían en sus reuniones.

Cindy Jacobs

Amado Padre celestial, eres tan bello Padre, eres tan fiel y misericordioso
es tan hermoso saber que no importa que pasado hayamos tenido, no
importa que fue lo que vivimos, si nos arrepentimos de esa manera de
vivir  y reconocemos a Jesucristo como nuestro Señor y Salvador, consa-
gramos nuestra vida a Ti, buscando la presencia de Tu Santo Espíritu,
Tú nos usarás con poder, si el verdadero propósito en nuestro corazón
es darte a conocer y que Tú recibas toda la gloria y toda la honra,
las señales, los milagros y los prodigios nos seguiran en dónde quiera
que Tu desees usarnos. impondremos manos en los enfermos y estos
sanarán, el agua que le demos al sediento saciará su sed, el pan de
vida que llevemos al hambriento llenará su vientre y quedará convidado.
Padre, en el nombre de Tu Hijo Jeuscristo, Heme aquí usame a mí

 

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