El girasol y la cizaña
"El campo es el mundo; la buena semilla los hijos del reino, y la cizaña los hijos del malo" Mateo 13:38.
En medio de un hermoso campo de trigo, nació un girasol, que creciendo agidantamente, llegó a convertirse en esplendor y orgullo para las plantas de trigo, quienes llegaron a considerar a la planta como la reina de la plantación.
El girasol dormía toda la noche; pero en el día, apenas salía el sol, su mirada lo buscaba con tesón sin perderlo de vista en su trayectoría de por el arco de ciento ochenta grados que éste realizaba de este a oeste. Daba la impresión que el girasol se encantaba con la luz del sol, y en laimaginación de las plantas de trigo, le escuchaban cantar preciosas adoraciones y alabanzas.
En una ocasión el trigo le pregunto al girasol: ¿Porque ese brillo tan hermoso que tienes?
Porque esoy ungido con aceite, respondió el girasol sin dejar de adorar.
¡Ungido con aceite! ¿Y por quién? pregunto con estupor el girasol.
Por esa luz que adoro.
¿Y quién es esa luz?
Esa luz se llama Jesús, concluyó el girasol.
No obstante lo poco común y familiar que resultabadentro de un campo todo sembrado de trigo se sentían orgullosos de tenerla.
Un día inesperadamente apareció una planta de cizaña con un aspecto tan patético, que pronto todas las nobles plantas del trigo se compadecieron de ella y le dieron albergue entre ellas. Pero tan pronto se sintió la cizaña en confianza, comenzó a trabajar de acuerdo a su naturaleza y en obediencia a quién la había enviado, el enemigo, naturalmente.
Pronto revolucionó a todo el trigo, con insidiosos comentarios contra el girasol, que en un principio no fueron escuchados; pero al pasar los días hicieron efecto, consiguiendo que el trigo se enemistará con el girasol.
Por otra parte se acercaba al girasol, usando la misma fórmula que contra el trigo; pero aquí, no encontró otra cosa que oídos sordos; porque el girasol, no tenía más tiempo, que para adorar a su luz.
Viendo la cizaña los objetivos frustrados con el girasol, comenzó una nueva estrategia en una nueva campaña para que se destruyeran las plantas del trigo entre sí. Este plan resultó, porque el trigo escuchaba a la cizaña, y en poco tiempo del campo sólo quedaron unas pocas plantas de trigo en pie. La cizaña viendo que su labor había concluido, hizo mutis sin dejar rastro.
Las plantas del trigo que sobrevivieron se acercaron al girasol y le preguntaron: ¿Cómo es posible que la cizaña no te haya podido confundir, como lo hizo con nosotras?.
A esta pregunta el girasol respondió: "el campo es el mundo; la buena semilla son los hijos del reino, Y la cizaña son los hijos dell malo" Mateo 13:38.
Estimado hermano/a que lees esta parábola. En estos últimos tiempos, las iglesias que duermen, se están plagando de cizañas. Es responsabilidad de todo evangelista, al igual que el girasol mostrarle al trigo la verdadera luz. No debe permitir que la cizaña aparezca con infundios sobre los pastores y otros hermanos. La luz es nuestro Señor Jesucristo y buscar su rostro tiene que ser nuestro propósito. Sobre cualquier otra cosa.
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