Tu decisión hacen la diferencia de quién eres Hijo. Tu elegiste la luz y el éxito, en vez de continuar en la oscuridad, el fracaso y la ruina, por lo que así te dice el Señor quién te dio vida: "... Levántate, y ponte sobre tus pies; porque para esto he aparecido a ti, para ponerte por ministro y testigo de las cosas que haré en ti y aquellas en que apareceré a ti, librándote de tu pueblo y de muchos otros también, a quién te envío ahora, para que abras sus ojos, y se conviertan de las tinieblas a la Luz, y de la potestad de Satanás a Dios y reciban por fe que es en mi, Jesús, el perdón de pecados y hereden las naciones entre los santificados" Hechos 26: 16-18
El llamado de
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