Aguardando con paciencia

"Por tanto, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad como el labradoe espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia hasta que reciba la lluvia tardía y la temprana" Santiago 5:7.

Lea atentamente este versículo d3e Santiago 5.Vemos que se nombra al labrador para ayudarnos a comprender la actitud correcta de la manifestación de lo que sembramos.

El labrador esperra el precioso fruto de la tierra aguardándolo con paciencia. Toda buena semilla que responde a la Palabra de Dios, va a tener el tiempo de la manifestación, luego de haber sido plantada.

Lo que le quiero manifestar en esta ocasión es que muchas veces usted tendrá que esperar el tiempo de la cosecha. Toda la semilla de la Palabra está destinada a cada uno de sus hijos. Eso es seguro. Todas Sus semillas son para cada hombre de pacto. Pero lo que no sabemos es el tiempo de esa manifestación, cuánto tardará en aparecer. Santiago muestra cómo el labrador siembra su semilla y espera con paciencia que venga la lluvia para que produzca.

Es importante, en primer lugar, que usted es labrador y tiene su semilla, la plante, para que luego, cuando venga la lluvia, el precioso fruto aparezca. Tiene que hacer las cosas a la manera de Dios para que Él intervenga. El pueblo de Isarael plantaba la semilla y está recibía la , y la lluvia temprana, y con esa humedad la semilla se afirmaba. Luego tiene que venir la lluvia tardía que producirá que el fruto aoarezca.

Pero durante este tiempo se debe tener paciencia y la paciencia no es una espera inactiva. El labrador va a cuidar la semilla desde el comienzo para que no aparezcan animales ni plagas para que no atenten contra ella. Eso es estar con paciencia pero activo. Y mientras tanto, el Espíritu Santo está trabajando y Dios preparará la lluvia tardía.

Recuerde que toda semilla tiene poder reproductor; todo lo que viene de la Palabra en forma de semilla, tiene ese poder. Entonces usted tiene que desarrollar una mentalidad de acuerdo con lo que Dios ha planeado de acuerdo para que se desarrolle en el terreno del crecimiento. Debe esperar la participación, la intervención de Dios sobre la semilla que ya ha plantado. Todo lo que recibe y le va siendo revelado viene a ser sembrado a su vida para este tiempo. Muévase con fe hacia adelante porque estará preparando la atmósfera o el clima para que la lluvia venga. Y mientras espera la manifestación de Dios sobre su vida, tiene que tener esa paciencia para aplicarla con fe y de manera constante. No abandone, aunque al presente no vea los resultados. La cosecha vendrá.

Oración: Padre, hoy aguardo con paciencia y me muevo en fe esperando la lluvia tardía que producirá el fruto. Sé que vendrá a su tiempo. Lo creo y lo rwecibo en el nombre de Jesús, amén.