Cristo no sólo es nuestra vida, sino también nuestro ejemplo (Jn.13:15; 1 Pe.2:21). Nosotros aprendemos de Él (Mt.11:29) según Su ejemplo y no por nuestra vida natural, sino por Él mismo como nuestra vida. Según el Nuevo Testamento, el Señor Jesús no entró en nuestro ser como vida directamente. Mas bien, después de vivir en la tierra durante treinta años y ministrar durante tres años y medio, Él estableció un ejemplo, un patrón, un modelo. Este asunto es muy relevante este asunto. Una de las razones porque se escribieron los cuatro evangelios fue mostrarnos el ejemplo de la vida que Dios desea que vivamos, el molde la vida que lo satisface a Él y cumple Su propósito. por esta razón, Por esta razón, el Nuevo Testamento presenta una biografía única, la biografía del Señor Jesús, escrita desde cuatro perspectivas distintas. después de establecer el patrón revelado en los cuatro evangelios, el Señor Jesús fue crucificado y luego entró en la resurrección. Es una resurrección en la que Él entra en nosotros para ser nuestra vida.
La expresión, "la realidad está en Jesús" se refiere a la verdadera vida de Jesús según se describe en los cuatro evangelios. En el andar impío de los gentiles, es decir, de la gente caída, hay vanidad. Pero en la vida piadosa de Jesús, hay verdad, hay realidad. Jesús llevó una vida en la cual hacia todo en Dios, con Dios y para Dios. Dios era Su vivir, y Él era uno con Dios. Esto es lo que significa "la realidad está en Jesús". Nosotros los creyentes, quienes fuimos regenerados con Cristo como vida y quienes somos enseñados en Él, aprendemos de Él conforme a la verdad que está en Jesús.