Orden en su mundo
interior
"Nuestro Creador es un
Dios de orden. Desde el inicio de creación cuando la
tierra estaba desordenada
y vacía, él puso en orden todas las cosas..
Génesis 1:1-27.
Él desea que sus hijos vivan
una vida en orden. Orden en su mundo interior,
orden en el desarrollo de sus
actividades, orden en su aspecto físico, orden
en manejo del dinero, de su
tiempo, de su familia, de sus posesiones.
El mundo interior es ese
aspecto donde nos conocemos mejor, allí donde se
forja nuestra autoestima,
donde tomamos decisiones básicas en cuanto a
motivos, valores y compromisos
y donde tenemos comunión con Dios.
Organizar nuestro mundo
interior significa que permitimos que Cristo
permanezca en nosotros y
nosotros en Él.
"Permaneced en mí, y yo en
vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto
por sí mismo, si no
permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no
permanecéis en mí"
Juan 15:4.
Tener orden en el mundo
interior es permitir que Cristo tome el control de
nuestra vida que sea Él
nuestro guía, nuestro ayudador en cada decisión de
nuestra vida diaria. Es morir
a nuestros deseos e impulsos, y dejar fluir los
deseos de Dios, es reflexionar
acerca de nuestras motivaciones en cada cosa
que hacemos, decimos o
pensamos, es permitir que el mundo interior de lo
espiritual gobierne al mundo
exterior de lo natural.
Ann Morrow Lindberg esposa de
un famoso aviador tuvo que luchar con las
presiones de un mundo público,
y ella guardaba muy celosamente su mundo
interior y escribió en su
libro Los Regalos del mar: "Ante todo quiero...estar
en paz conmigo misma. Deseo
tener un ojo bueno, pureza de intenciones, un
núcleo central en mi vida que
me capacite para llevar a cabo esas obligaciones
y actividades lo mejor que
pueda. Quiero de hecho, tomando el lenguaje
prestado de los santos, vivir
en gracia el mayor tiempo posible. Qué el hombre
exterior e
interior sean uno. Quisiera lograr un estado de gracia espiritual
interna
mediante el cual pudiese funcionar y dar como debería a los ojos de
Dios.
Jesús dijo
que de abundancia del corazón habla la boca. De acuerdo a como
esté su mundo
interior, así será el exterior. Si no saca tiempo para estar a
solas con
Dios y permitir que su espíritu sea moldeado por Dios, vivirá una
en desorden,
agotamiento psíquico, colapso nervioso o estallido, pues no
contará con
los recursos de apoyo interior. "Sobre
toda cosa guardada, guarda
tu
corazón, porque de él mana la vida" Proverbios 16:3.
Orden en su
mundo interior. Paz con Dios, paz con el prójimo y consigo mismo.
Mi paz os
dejo, mi paz os doy, yo no os doy como el mundo la da. No se turbe
vuestro corazón, ni tenga miedo.