Amado Padre poderoso eterno, en este momento
me humillo ante tu presencia, para reconocer
que no hay Dios como tú , tan grande soberano
lleno de gracia y amor y justicia, entre tus manos pongo
la vida de nuestra hermanita Marita, para que tu
lo restaures y la sanes de toda enfermedad,
que sufre, porque tu palabra nos dice,
Mas él herido fue por nuestras rebeliones,
molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz
fue sobre Él, y por su llaga somos nosotros curados.
Isaias 53:5
se que tu palabra es fiel verdadera, yo se que tu
eres el medico de exelencia, todo para horra y gloria
de tu santo nombre, tu sierva testifique de tu poder y tus
bondades lo que haces en su vida solo tu eres el que
sana nuestras enfermedades, y renuevas para que te
alabemos te adoremos con todo nuestro corazón.
gracias amado se que puedo confiar en ti porque
eres misericordioso y lleno de amor, y compasión
en el nombre todo poderoso de tu hijo amado Jesuscristo
Amen!