¿¿¿¿¿Puede una piedra
ser una almohada?
"Y llegó a cierto lugar, y durmió allí, porque ya el sol se había puesto; y tomó
y tomó de las piedras de aquel paraje y puso a su cabecera, y se acostó en
aquel lugar" Génesis 28:11.
"Acercándose a Él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas
para Dios escogida y preciosa" 1 Pedro 2:4.
Vimos que Jacob tomó una piedra y la puso por cabecera. Durante años no
entendía que significaba eso. Aunque no podemos entenderlo según lo dicho
externamente, si lo podemos entender conforme a nuestra experiencia interior.
Antes de ser salvos, no teníamos reposo. Siempre sentíamos que estábamos
en el aire o en el fondo del mar. No había nada firme que nos sostuviera o nos
mantuviera. Por muy rico que usted haya sido, su dinero no podía apoyarlo.
Por el contrario, lo privaba de la paz y el descanso. Antes de ser salvos, no
teníamos un apoyo sólido, independientemente de si éramos viejos o jóvenes,
hombres o mujeres. Sin embargo, un día fuimos salvos y algo sucedió dentro
de nosotros. Lo convirtió en nuestro sólido apoyo. Quizás hemos pasado por
dificultades después de ser salvos. No obstante, en lo profundo de nuestro ser
sentimos la seguridad que había una roca sólida sobre la cual podíamos
descansar. Esta roca sólida es la naturaleza misma, el elemento mismo, de
Cristo, forjado en nuestro ser.
Ninguno de nosotros encontró descanso antes de ser salvos. En aquel día, algo
divino, algo de Cristo, fue forjado en nosotros y se convirtió en el apoyo
sólido dentro de nosotros. Este es nuestro descanso, nuestra almohada.
Nuestra almohada es el elemento divino. ¡Cristo!.
Pastor Jaime Batista Cortes |