EXALTAD A JEHOVÁ NUESTRO DIOS...
Exaltad a Jehová nuestro Dios,
y postraos ante el estrado de
sus pies: El es Santo.
Salmos 99:5
Si quieres que tu tiempo de
adoración sea más rico y
significativo, observa y has lo
siguiente:
I. Te levantarás temprano en
el día del Señor y te
prepararas para adorar a
Dios en su santuario
mediante estas palabras:
"Este es el día que isntituyo
Jehová, nos gozaremos y
alegraremos en El.
II. Iras al templo de adoración
con la esperanza de
encontrar a Dios allí,
recordando las siguientes
palabras: "Donde hay dos
o tres congregados en mi
nombre, allí estoy yo en
medio de ellos."
III. Llegaras a tiempo y no te
atrasaras para que no
parezca que te pesa dirigir
tus pasos al Altar del Señor.
IV. Cuando llegues al lugar
indicado orare por ti, por los
que ministran y por los que
adoran junto a ti, sabiendo
que de esta manera todo el
mundo se halla unido con
cadenas de oro a los pies
de Dios.
V. Si tienes algo contra alguien,
lo perdonaras de la misma
manera que Dios te perdono
en Cristo. Haz esto y vivirá
tu alma.
VI. Te sentaras tan cerca del
altar como los ujieres te lo
indiquen. Recuerda que
está escrito: "Allegaos a mí,
y yo me allegare a vosotros."
VII. Cantaran con gozo y alegría
en el corazón los cantos que
que se indiquen: "Con gozo
cantando en vuestros
corazones al Señor."
VIII. Participaras plenamente del
culto y adoraras a Dios con
todo el corazón, con toda la
mente y con todas las
fuerzas de tu ser.
IX. Recibirás la palabra hablada
como del Señor, con mente
dispuesta, y luego
escudriñaras las Escrituras
con diligencia para ver si lo
que han dicho es cierto.
X. Amen y Amen. Además
guardaras silencio y reverencia
y esperaras en el Señor:
"Espera en Jehová y veras las
maravillas que El hará por ti."
¿Podían haberse escrito palabras
más grandes que estas?
"Caminó con Dios." No se nos
dice que pensaba o que dijo,
ni en que trabajaba, ni donde,
solamente:"caminó con Dios."
breves palabras de oro
incorruptible. No podemos
saber cuantas almas socorrió en
su viaje, ni a cuantos consoló
con sus palabras, ni por cuantos
oró. Solamente leemos, palabras
de gran esplendor:
"Caminó con Dios."
-J.Danson Smith.
Bendiciones amados hermanos.
Marthita Torres