Un Regalo Precioso
"Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su
Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se
pierda, mas tenga vida eterna"
(Juan 3:16)
* * * * * * *
Una niña halló, cierto día, un pequeño fragmento de papel
que había sido usado para imprimir Biblias. En el pequeño
pedazo encontrado se leía: "Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado..." La niña conocía de Dios aquello que
le habían enseñado, o sea, sobre Su ira y Su castigo. Ella
nunca había aprendido sobre el amor de Dios. Desde aquel día
la niña mostró grande transformación y eso fue percibido por
su madre. Ésta, sentando-si junto a la hija, le preguntó el
motivo de tan grande cambio. La niña mostró el fragmento de
papel que había encontrado. La madre leyó lo que estaba
escrito y preguntó a la hija: "¿Pero lo qué fue qué Dios ha
dado?" La respuesta de la niña fue: "Yo no sé lo que Él dio,
pero se Él nos amó a punto de dar cualquier cosa, no
necesitamos más tener miedo de él."
¡Cómo es maravilloso saber qué nuestro Dios nos ama! Y su
amor fue tan grande que nos dio lo que Él tenía de más
precioso -- Su Hijo. lo dio por nosotros, para perdonarnos,
para restaurarnos, para darnos vida abundante, para que,
arrepentidos y perdonados, pudiésemos ser Hijos de
Dios, tener el nombre escrito en el Libro de la Vida y ser
herederos de los Cielos. ¡Gloria sea al nombre del
Señor!
Al darnos tan excelente regalo, Dios nos permitió también
experimentar total transformación. Donde había rencor, Él
plantó amor; donde había desilusión él construyó un edificio
de fe y esperanza; donde reinaba sequia de los fracasos
hizo brotar una fuente de interminables victorias.
Cuando abrimos el corazón para el Señor entrar nuestra vida
es rellenada con mucho goce y alegría. La fiesta comenzada
en el cielo a los que aceptemos tan grande bendición se vuelve
constante en cada uno de los días que nos seguirán. Cantemos
de goce porque Dios nos amó... y nos dio... una vida plena,
feliz y eterna.
Paulo Barbosa
Un ciego en el Internet