... Y surgiendo de las simas más profundas de los avernos de la propia nada, el hombre ha evolucionado hasta mantenerse erguido sobre sus cuartos traseros... En su imparable evolución, y búsqueda de su propio bienestar, ha conseguido grandes logros... Ha conseguido curar enfermedades... Dominar y domesticar a todas las especies del planeta...
Ha surcado los cielos sin poseer alas… Incluso ha conquistado los espacios siderales... Ha navegado por los mares sin tener aletas... Ha construido maquinas capaces de viajar hasta las profundidades de los océanos... En su imparable búsqueda, a coronado las mas altas cimas... Pero su escalada aun no concluyó ahí, y siguió creciendo, creciendo y multiplicándose, llegando con su infinita imaginación a crear o hacer hazañas tan grandes como:
Dominar, maltratar y torturar sin piedad a todas las especies de animales y plantas que habitan sobre la tierra… Ha esclavizado, torturado y asesinado a sus semejantes, justificándose en creencias religiosas... Ha inventado las guerras... Ha inventado las armas... Incluso ha creado el hambre... La pobreza… La miseria… La marginación… El racismo... La xenofobia...
En su imparable escalada, se ha apropiado de todo el planeta... Creando fronteras... Y dentro de esas fronteras, siguió su escalada, “vendiendo en parcelas la tierra que nunca le perteneció”... ¡Para que quienes compraron algo que es de todos! Pudiesen crear nuevas fronteras con la que aislarse más aun de sus semejantes… Y sigue, y sigue creciendo, creciendo y creando en una escalada que no ha de acabar ¡Hasta el día que consiga llegar a su propia autodestrucción!...
¿Volverá a resurgir de sus cenizas para volver a comenzar?....
... Y surgiendo de las simas mas profundas de los avernos de la propia nada, el hombre en su infinita búsqueda de su propia locura, ha conseguido coronar las más altas cotas de su propia miseria...